Tras la liberación de Mosul, la ONG Amnistía Internacional acusó a las tropas iraquíes y sus aliados de haber utilizado en los barrios densamente poblados del oeste de la ciudad armas explosivas de baja precisión.
Sin embargo, los oficiales de la coalición han rechazado cualquier tipo de críticas.
Las tropas iraquíes izaron la bandera de su país el 9 de julio en la orilla del río Tigris en el casco histórico de Mosul, al expulsar por completo a los terroristas de Daesh (grupo terrorista, proscrito en Rusia y otros países).
Pero según señala una nota de prensa publicada en el sitio web de Amnistía Internacional, los yihadistas en Mosul intentaron utilizar a civiles en calidad de escudo humano, y "las fuerzas iraquíes y la coalición liderada por EEUU no pudieron adaptar sus tácticas a esa realidad y siguieron utilizando armas explosivas, no precisas, con amplios efectos colaterales en zonas urbanas densamente pobladas".
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En su informe titulado 'A cualquier precio: la catástrofe civil en el oeste de Mosul', la ONG expone las hostilidades que tuvieron lugar en los barrios occidentales de esta ciudad iraquí desde enero hasta mediados de mayo de 2017.
Mientras tanto, el general británico Rupert Jones, subcomandante de la coalición, calificó la campaña de nueve meses como la más importante batalla urbana desde los tiempos de la Segunda Guerra Mundial.
No obstante, se trata de una clara exageración, según reveló a la agencia FAN el director del Instituto ruso de Ciencias Políticas, Derecho y Desarrollo Social, Vladímir Shapoválov.
"Primero, es imposible declarar que la operación para liberar Mosul fue exitosa debido a la cantidad de víctimas entre la población civil y la duración del proceso, ni hablar de la diferencia en recursos entre los que atacaron y los que se defendieron.
EEUU y sus aliados trataron de sobrestimar la cantidad de terroristas que estaban en Mosul", afirmó el experto.
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El académico está seguro de que la parte estadounidense exagera la cifra de los yihadistas que estaban en Mosul, supone que había significativamente menos terroristas que soldados de la coalición.
"Pienso que los estadounidenses no tienen por qué estar orgullosos, además, hace falta confesar que esta operación fue organizada y llevada a cabo con muchas imperfecciones, algunas de las cuales resultaron ser fatales, por ejemplo, hicieron volar alevosamente con explosivos la Gran Mezquita de Al Nuri, no importa si los responsables fueron los terroristas o los norteamericanos", remarcó Shapoválov.
Además, a la hora de comparar la liberación de Mosul con la de Alepo, llevada a cabo por las tropas del Gobierno sirio con la asistencia de las Fuerzas Aeroespaciales rusas, se evidencia que la segunda operación fue realizada con mayor rapidez y eficiencia.
Mosul, el principal bastión iraquí de Daesh, se encontraba bajo la ocupación de terroristas desde mediados de 2014.
Las tropas iraquíes, respaldadas por la coalición internacional dirigida por EEUU, lanzaron una operación para recuperar la ciudad en octubre de 2016.
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