Ante una clara victoria del candidato presidencial por el movimiento Alianza País, Lenín Moreno, que con el 88% de las actas escrutadas ostenta una ventaja de más de diez puntos porcentuales sobre el candidato más cercano, el banquero Guillermo Lasso, la derecha ecuatoriana emprendió una campaña de desprestigio contra el Consejo Nacional Electoral (CNE) de la nación suramericana, y ha hecho desde este lunes llamados a la violencia y a desconocer los reportes ofrecidos por el órgano comicial.
Con líneas de acción similares a las ejecutadas por los dirigentes de oposición venezolanos en los procesos electorales en los que han resultado derrotados, algunos líderes de la derecha ecuatoriana, incluido el candidato Lasso, de la alianza Creo-Suma, insisten en contradecir las normas legales, y aseguran a sus seguidores que se requiere una segunda vuelta electoral, cuando el CNE explicó que falta un 12% de actas por escrutar para llegar al 100% y determinar si es, o no, necesario un segundo proceso.
Los líderes de la derecha han utilizado este hecho para manipular la información en torno a ese 12% de actas por escrutar y acusan de fraude e irregularidades arbitrarias en el proceso.
No explican que ese 12% incluye actas que vienen del exterior y otras de zonas rurales del país. Lo que sí utilizan en su campaña es el lenguaje técnico del CNE para intentar confundir con las llamadas actas “inconsistentes”.
El presidente del CNE, Juan Pablo Pozo, explicó este lunes que del 12% por escrutar, 5,49% son actas “inconsistentes”, es decir, actas con fallas humanas inevitables en un proceso electoral manual de tal magnitud, como la falta de firma del secretario o presidente de Mesa de Votación, datos que son ilegibles o el caso de inconsistencias numéricas, no mayores a 1%, que son auditadas por el organismo electoral y los testigos de todos los partidos.
A dos días del proceso electoral con el 88,8% de actas escrutadas, Lenín Moreno cuenta con un 39,10% de los votos, y saca una ventaja de más de 10 puntos sobre Guillermo Lasso, que hasta ahora cuenta con 28,30% de sufragios.
Estas cifras indican que a Moreno le hace falta sólo un 0,90% de votos para lograr su meta de ganar en primera vuelta, ya que de acuerdo con las leyes ecuatorianas, obtiene la victoria en primera vuelta el candidato que logre el 40% de los votos con al menos diez puntos porcentuales de ventaja sobre el candidato más cercano.
Aunque el CNE espera a escrutar el 100% de las actas para emitir resultados definitivos, el banquero de derecha Guillermo Lasso llamó a sus seguidores a “mantenerse en vigilia” y exigir al órgano comicial publicar los resultados de forma inmediata, contra todo principio legal.
Esta forma de acción política es muy similar a la ejecutada por los dirigentes de la derecha venezolana cuando se encuentran con una derrota electoral irreversible.
De esta forma, igual que lo han hecho en Venezuela los líderes de oposición, los dirigentes de la derecha ecuatoriana optan por la acción desesperada de arremeter contra las instituciones, e intentar deslegitimar y restar credibilidad al órgano rector en materia electoral de la República.
En vista de estos sucesos, Lenín Moreno llamó este lunes a la concordia y rechazó los llamados a la violencia por parte de la oposición.
Moreno rechazó las convocatorias que efectuó la dirigencia de Creo y del Partido Social Cristiano, a través del alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, a protestas callejeras por un supuesto fraude electoral, y lamentó que estos actores pretendan sembrar el caos en el país con fines políticos.
AVN