Los fondos de cobertura de EE.UU. que apostaron por una nueva caída del precio del petróleo se han visto obligados a cerrar y a abandonar sus posiciones, después de que los miembros de la OPEC, entre los que se encuentran Rusia y Arabia Saudita, decidieran plantearse "congelar" de nuevo la producción de oro negro para estabilizar de esa forma el mercado, informa el portal Finanz.
En la semana del 9 al 16 de agosto, en la que se produjo un aumento de casi un 10% del precio del petróleo, los gestores de capital especulativo del NYMEX (New York Mercantile Exchange), la bolsa de materias primas de Nueva York (EE.UU.), cerraron sus apuestas por la caída del precio en los contratos de futuros y opciones financieras, llegando a un total de 56.907 contratos clausurados, registrando de esa manera la mayor desbandada registrada en las estadísticas del CFTC desde el año 2006.
Los especuladores adquirieron en el mercado ofertas de unos 56,9 millones de barriles de petróleo, el equivalente al consumo en EE.UU. en tan sólo cuatro días.
Sin embargo, en el mercado se produjo un 'short squeeze', término anglosajón que se emplea para definir un rápido crecimiento del precio de las acciones cuando hay escasez de suministro y exceso de demanda.
Entre junio y julio de este año los fondos de cobertura lanzaron al mercado 80 millones de barriles con la idea de que se repitiera la misma situación de caída de precios que se vivió en 2015.
No obstante, en agosto de este año el mercado del petróleo empezó a crecer de forma inesperada, por lo que las apuestas y contratos sin límites preestablecidos contra el alzamiento del crudo acabaron por resultar no rentables, informa Bloomberg.
Los fondos de inversión se vieron entonces obligados a recomprar los contratos del mercado, lo que estimuló aún más el aumento de los precios y también propició un círculo vicioso de valor del crudo al alza.