El año pasado, 36.929 personas perdieron su casa.
Es un 3.8% menos que en 2014, según el Banco de España ya que el número de personas que llegaron a un acuerdo con el banco es mayor frente a las que fueron desahuciadas.
Más de 17.900 personas perdieron su inmueble por la vía judicial.
El 79.4% del total -29.327 viviendas – eran viviendas habituales.
Del total de familias que perdieron la titularidad de sus primeras viviendas, cerca de 15.500 fueron cedidas al banco de forma voluntaria mientras que en 13.193 ocasiones la deuda se saldó mediante la entrega de las llaves.
Por otra parte, 13.827 viviendas habituales fueron entregadas por decisión del juez, de las cuales 12.925 propiedades estaban ya vacías mientras que las 902 restantes estaban ocupadas.
Según el supervisor, el 82% de las hipotecas que se corresponden con entregas judiciales de viviendas ocupadas se concedieron antes de 2007, periodo previo al estallido de la burbuja inmobiliaria.
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Publicado por Odio de Clase
