Granada y el Movimiento de la Nueva Joya.

Granada es una pequeña isla caribeña de unos 100.000 habitantes, en su mayoría descendientes de esclavos africanos, que fue colonia británica hasta 1974, año en que consigue su independencia, en 1979 se produce una revolución armada de tendencia socialista dirigida por el Movimiento de la Nueva Joya, ¨New J.E.W.E.L¨(New Joint Endeavor for Welfare, Education, and Liberation), acabando con el gobierno dictatorial y corrupto de Eric Gairy, amigo personal de Pinochet, y apoyado por EEUU e Inglaterra.

Maurice Bishop es elegido como primer ministro del nuevo gobierno revolucionario, que se esforzará por crear nuevas estructuras de democracia popular, tomando medidas como la creación de la empresa estatal Corporación Agrícola de Granada, para garantizar la soberanía alimentaria, y en la que se estimulará la autogestión por parte de los trabajadores, la Corporación Turística de Granada, para administrar los Hoteles y otras empresas estatales, se construyen 3 plantas de biogás, una planta procesadora de café, una planta procesadora de pescado, y un banco popular, el Banco Nacional de Comercio, al mismo tiempo se realiza una reforma agraria, y se estimula y apoya la creación de cooperativas, reduciendo el desempleo del 50% previo a la revolución al 14%.

Se impulsa la creación de consejos zonales y distritales de trabajadores, donde se discuten las medidas económicas a tomar y se ejerce el control popular sobre la gestión de los cargos y representantes electos, como medio de democratización de las instituciones y lucha contra la corrupción e ineficiencia.

En general se multiplican las asociaciones y colectivos de todo tipo, en una auténtica ola de movilización popular entusiasta. Se establece un sistema de sanidad y educación público y gratuito, construyendo nuevas clínicas, hospitales y escuelas, y un programa de distribución gratuita de leche para madres y niños pequeños.

Con la ayuda cubana se iniciará también la construcción de un aeropuerto. Se hará especial hincapié en el esfuerzo por la preparación ideológica de nuevos cuadros y la enseñanza en general, algo crucial en un pueblo que había estado abandonado, con altos porcentajes de analfabetismo.

Todas estas medidas provocan la reacción de los perros imperialistas norteamericanos, que ven a la pequeña isla como un mal ejemplo que puede seguir extendiéndose a otros territorios (incluido el suyo), por lo que comienzan a diseñar un plan para desestabilizar al gobierno usando todo tipo de medios, solo en el primer año de revolución se producen una serie de incendios intencionados en edificios gubernamentales, poco después son asesinados 5 miembros de la Milicia revolucionaria en dos emboscadas, el 19 de junio del siguiente año, durante un mitin multitudinario de la dirigencia, estalla una bomba de relojería provocando 3 muertos, entre ellos una niña, y varias decenas de heridos y mutilados, en un acto de terrorismo que tenía por objetivo liquidar a la plana mayor del gobierno.

Este plan combina las acciones puramente terroristas, con la guerra psicológica y el sabotaje económico, especialmente contra el sector turístico, difundiendo toda clase de rumores y mentiras sobre la inseguridad del país, la presencia de gente armada sin control y demás inventos alarmistas, para presionar a las agencias de viajes a que cancelaran sus ofertas a la isla.

Los servicios de Inteligencia de la CIA sobornarán a algunos dirigentes sindicales para que fomenten huelgas contra el gobierno, y controlarán dos periódicos locales: ¨The Grenadian Voice¨ y ¨Torchlight¨, desde los que verterán toda clase de calumnias y manipulaciones para sembrar el descontento y la confusión entre la población.

La campaña de desestabilización, incluirá también el sabotaje al sistema eléctrico por parte de varias compañías británicas que llevaban 20 años explotando el sector con tarifas abusivas, que acabarán por cortar el suministro provocando apagones generalizados, a lo que el gobierno respondió con la nacionalización de la compañía de electricidad, adquiriendo la mayor parte de las acciones.

El gobierno de los EEUU continuará hostigando a Granada, emitiendo constantes amenazas de intervención y acusando al gobierno revolucionario de utilizar el nuevo aeropuerto como base militar soviética, lo cual era absolutamente falso.

El ejército de EEUU realizará amenazantes maniobras militares en la cercana isla puertorriqueña de Vieques, simulando una operación de rescate con despliegue de paracaidistas y vehículos anfibio. Ante estos hechos, el gobierno de Granada llama a la movilización general del pueblo y al estado de alerta de todas la unidades de las milicias ante una más que posible invasión.

La infiltración de la CIA se introducirá a través de tapaderas legales como fundaciones culturales e Institutos privados de estudios, logrando incluso penetrar hasta el círculo de la dirigencia del gobierno granadino, generando la desconfianza y la división con escritos manipulados, simulación de amenazas y falsos rumores para enfrentar a los miembros del partido entre sí.

Estas acciones darán sus frutos, en octubre de 1983 Maurice Bishop es derrocado por los partidarios de su viceprimer ministro, siendo puesto bajo arresto domiciliario al regresar de una visita diplomática a Hungría y Checoslovaquia.

Este hecho provoca la división del partido en dos facciones y una revuelta popular que lo libera, y marcha hacia el cuartel militar de Fort Rupert, allí se producen una serie de enfrentamientos tras los cuales, Bishop y varios de sus ministros, son detenidos y fusilados en extrañas circunstancias.

Aprovechando la situación de caos y confusión, EEUU invade la isla 6 días después durante la operación ¨Furia urgente¨, con el pretexto de proteger a los ciudadanos estadounidenses que se encontraban en la isla, para ello utilizará a 7.000 hombres con apoyo de helicópteros y artillería naval, ante la resistencia ofrecida por las milicias tendrá que pedir dos batallones más de refuerzos a los SEALS (Fuerzas de operaciones especiales), los enfrentamientos se saldan con varias decenas de muertos en ambos lados, incluidos varios SEALS, civiles y trabajadores cubanos que se encontraban en el aeropuerto.

Tras la invasión, el proyecto revolucionario granadiense verá su fin, los norteamericanos se hacen con un edificio en la capital, donde instalan una estación de la CIA por la que irán pasando todos los detenidos que se habían mantenido leales al presidente Maurice Bishop, siendo interrogados, encarcelados o expulsados del país, al mismo tiempo, miles de ejemplares de una edición especial de comic anticomunista editado por la CIA, titulado: ¨Granada: rescatada de la violación y la esclavitud¨, son lanzados desde el cielo, siguiendo en su línea de guerra psicológica, manipulación permanente y cinismo mayúsculo, colocando finalmente un nuevo gobierno títere al servicio del imperialismo. No obstante, el valioso ejemplo de cuatro años de revolución y la valentía de un pequeño país pobre de apenas 100.000 habitantes que se atrevió a coger las riendas de su destino y desafiar al mayor imperio terrorista que ha conocido la historia, perdura en la mente y los corazones de las nuevas generaciones, que algún día recogerán su legado.