EL DIARIONY – Santo Domingo — El escándalo generado a partir de la muerte de once niños registrada en un fin de semana en el Hospital Infantil Robert Reid Cabral llevó al presidente Danilo Medina a destituir al Ministro de Salud y al director del centro asistencial ubicado en la capital.
El presidente Medina sustituyó a Freddy Núñez por la pediatra Altagracia Guzmán Marcelino, quien ocupaba la dirección delSeguro Nacional de Salud (Senasa).
Designó además a José Miguel Ferreras como director del Hospital Infantil Robert Reid Cabral, en sustitución de Rosa Nieves Paulino, cuya destitución provocó rechazo en el personal médico del centro de salud, ubicado en el sector Centro de los Héroes, en esta capital.
El informe oficial que atribuye a negligencia médica la muerte de los once niños puso en pie de lucha al Colegio Médico Dominicano (CMD). El lunes los directivos del gremio realizaron una asamblea en las instalaciones del Robert Reid.
El CMD exige al Gobierno que cambie su visión sobre los problemas del hospital. Rechaza que los médicos actuaran con negligencia y atribuye la muerte de los infantes a las precarias condiciones económicas y físicas en que opera, pese a ser el principal centro de referencia para la salud infantil con que cuenta el país.
Además de designar a Guzmán Marcelino y a Ferreras, el presidente Medina emitió un decreto que dispone “la desconcentración administrativa, funcional y territorial” del viceministerio de Atención a las Personas y Servicios Regionales de Salud.
El escándalo también provocó que el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, anunciara que esa dependencia eliminará el Fondo de Gestión Social (Barrilito) que entrega a los legisladores cada mes para destinarlo a mejorar los servicios de los hospitales.
Cada diputado recibe cada mes 50 mil pesos (más de 1,100 dólares) para dedicarlo a “labores sociales”, a parte de su salario y los beneficios extras que les proporciona el Estado.
“Los fondos ya establecidos en el presupuesto de la CD para nov. y dic. serán donados a hospitales en cada provincia del país”, dijo Martínez, además de adelantar que para el próximo año 2015 la Cámara de Diputados reasignará a los hospitales 100 millones de pesos (más de 2.3 millones de dólares) del cuestionado Barrilito.
Cientos de personas mantienen una campaña en las redes sociales para exigir a los congresistas que reduzcan sus privilegios a favor del servicio de salud pública.
“La decisión que estamos tomando se la comunicaremos al presidente Danilo Medina para que la Cámara de Diputados conjuntamente con el Poder Ejecutivo haga una redistribución de los recursos a los que estamos renunciando, cuyo monto aproximado es de 100 millones y que estos sean asignados a instituciones, para contribuir a mejorar la salud de cada dominicana, cada dominicano, cada niña y cada niño que acudan a esos centros”, sostuvo.
