La 'madre' de la nación china rompe con los estereotipos tradicionales

La esposa del presidente chino Xi Jinping, Peng Liyuan, es para los chinos un ejemplo del "gran renacimiento nacional". No es casual que los internautas chinos llamen a la primera dama 'goma', que se traduce como 'madre de la nación'.

Junto con su política exterior activa y exitosa, China poco a poco sale de la sombra. El liderazgo actual del gigante asiático se aleja gradualmente de las limitaciones del protocolo anterior, en particular en lo que se refiere a los requisitos sobre cómo debe comportarse el jefe de Estado y la primera dama.

Por segundo año consecutivo Peng Liyuan figura en la lista de "las mujeres más influyentes en el mundo" de la revista Forbes.

La mujer del presidente chino figura en la lista junto con Angela Merkel, Michelle Obama, la reina Isabel II, Lady Gaga y otras personalidades.

Esta vez Peng Liyuan ocupa el puesto 57º. Sin embargo, en su país la 'madre de la nación' es mucho más conocida y popular que en el resto del mundo.

Ninguna de las esposas de los dos últimos líderes de China -Jiang Zemin y Hu Jinta- tuvieron tanto reconocimiento público y permancieron en la sombra.

Pocas personas se interesaban en su vida o puntos de vista, nunca daban entrevistas y, la mayor parte de las veces, llevaban trajes modestos y poco llamativos.

Sin embargo, Peng Liyuan, se ha convertido en un ejemplo del "sueño chino" de un poder fuerte en el mundo moderno, aunque sin dejar a un lado las raíces tradicionales y sin copiar modelos extranjeros.

Tras recibir educación musical en la escuela secundaria, Peng Liyuan se integró a los 18 años en las filas del Ejército Popular de Liberación de China.

Para la cantante del ejército con voz de soprano se abrieron entonces enormes oportunidades, llegando a cantar en las mejores salas de conciertos.

Su voz sonaba desde muchos escenarios mundiales, incluyendo el Lincoln Center en Nueva York y la Ópera Estatal de Viena.

La cantante de música folclórica pronto se ganó el amor del pueblo, lo que volvió a ocurrir en 1986, cuando se casó con el político Xi Jinping.

La primera dama china también protagoniza diferentes actividades públicas de caracter social.

Trabaja en el programa de apoyo a las escuelas rurales y con su participación activa en la provincia china de Shanxi dio pie a la apertura de la primera escuela para niños con el VIH.

También está comprometida en programas de apoyo de las víctimas de desastres naturales en China, es Embajadora de Buena Voluntad de la Organización Mundial de la Salud para el tratamiento de pacientes con tuberculosis y el SIDA, y destaca por ser una famosa activista antitabaco.