Rusia ha intensificado su ayuda militar al gobierno sirio que está ocupado luchando contra los militantes Takfiris respaldados desde el extranjero.
Según un informe de Reuters, el ejército sirio ha estado recibiendo suministros de equipamiento militar, incluyendo vehículos blindados, aviones no tripulados y bombas guiadas de precisión, equipo de vigilancia, radares y sistemas de guerra electrónica desde diciembre del año pasado.
“Docenas de 124s Antonov (aviones de transporte rusos) han estado llevando a Siria vehículos blindados, equipos de vigilancia, radares, sistemas de guerra electrónica, piezas de repuesto para helicópteros, y diversas armas, incluyendo bombas guiadas para aviones”, afirma el informe citando a una fuente de seguridad de Oriente Medio.
Los nuevos suministros rusos llegan en medio de una etapa crítica del conflicto en el país árabe, con las conversaciones de paz sobre Siria previstas para la próxima semana en Ginebra, los militantes respaldados desde el extranjero perdiendo terreno y el apoyo occidental a los rebeldes en pleno debilitamiento.
Rusia dice que sus negocios de armas con Siria no violan el derecho internacional y que sólo está vendiendo sistemas de defensa a Damasco.
Mientras tanto, según informes de medios de comunicación árabes, un grupo de extremistas clérigos salafistas de Jordania ha viajado a Siria para hacer la paz entre las facciones en guerra de Al Qaeda.
El grupo está tratando de alcanzar una tregua entre los militantes del Frente de al-Nusra y el llamado Estado Islámico de Irak y el Levante. Los dos grupos de al-Qaeda son responsables de la muerte de civiles y de atentados en Siria.
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