PL – La negativa de Estados Unidos a calificar de ataque terrorista los sucesos en Beijing con saldo de dos muertos y 40 heridos demuestra la doble cara que mantiene Washington en este tema, denunció hoy la agencia estatal Xinhua.
La agencia de noticias señala que pese a las detalladas revelaciones del gobierno chino sobre este ataque frente a la plaza de Tiananmen el 28 de octubre, un vocero del Departamento de Estado solo dijo que se monitorea la situación y determinan los hechos de qué sucedió en el terreno.
Recuerda que ese mediodía tres personas prendieron fuego a un vehículo que impactaron contra una muchedumbre a la entrada de la Ciudad Prohibida, con saldo de dos muertos (una turista filipina y uno del sur de China) y más de 40 muertos, entre ellos tres filipinos y un japonés.
Todas las evidencias indican que el incidente fue cuidadosamente planeado, organizado y que es un acto premeditado de terrorismo, agrega Xinhua.
Es difícil concluir que lo sucedido -que tenía como objetivo a civiles inocentes- fuese algo diferente a un ataque terrorista, precisa este influyente medio de prensa chino, que destaca la condena en menos de tres días del presidente de Francia, Francois Hollande.
Califica de penoso que las reacciones de medios y expertos occidentales se centren no en la crueldad del violento crimen sino en el hipotético “grito de desesperación” detrás del hecho, como opinó un profesor estadounidense en la página web de la cadena televisiva CNN.
A juicio de Xinhua, el hecho que los perpetradores fuesen chinos de la región autónoma de Xinjiang Uygur dio a esos expertos una pauta para condenar el ataque, pero marcharon sin dudas a elaborar sus tendenciosas lecturas de la vida y sucesos en esa zona del país.
La agencia considera que racionalizar el terrorismo invita a más actos de ese tipo.
Los terroristas, añade, siempre han tenido sus propias supuestas desesperación y animosidad, pero ese razonamiento no puede aplicarse cuando se usa deliberadamente la violencia contra los civiles, precisa Xinhua.
Al respecto, la agencia recuerda que la cancillería denunció que vincular temas de etnicidad y religiosos, o usarlos como pretexto para criticar las políticas internas de China mientras se quedan a medias para denunciar este ataque es aprobar el terrorismo.
Fundamentada en una moral absoluta que no admite excusas, racionalizaciones o justificaciones, el terrorismo no conoce fronteras, como la historia reciente ha demostrado, ya sea una niña china muerta en los atentados del Maratón de Boston o una madre filipina en Beijing, subraya Xinhua.
