“La crisis de Siria no tiene relación alguna con los chiíes ni los suníes, sino que en este país, un grupo seguidor de los pensamientos takfiríes se ha puesto frente a un pueblo de distintas etnias de suníes, chiíes, cristianos y otros, y se dedican a masacrar y cometer actos inhumanos”, según ha afirmado el embajador iraní en El Líbano, Qazanfar Roknabadi.
El representante iraní en Beirut, capital de El Líbano, ha pronunciado estas palabras durante una entrevista concedida este viernes a la cadena de noticias de Arabia Saudí, Al-Arabiya, donde alabó el importante rol de la República Islámica de Irán en la unidad islámica.
El funcionario iraní, al ser preguntado por la presencia del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), ha contestado que “en los últimos dos años, según declaraciones de los propios países occidentales y los informes internacionales, las fuerzas de Al-Qaeda procedentes de 13 países europeos estuvieron presentes en siria para ayudar a los grupos terroristas”.
Roknabadi ha continuado diciendo que dichas fuerzas cometieron todo tipo de crímenes inhumanos, pero, hasta el momento, nadie ha criticado su presencia en este país árabe y, peor aún, algunos países les han prestado apoyo financiero y militar.
En alusión a la iniciativa iraní para solventar la crisis siria mediante la vía política, Roknabadi ha añadido que, como primer paso para ello, es necesario el cese de la violencia, algo posible siempre y cuando se deje de financiar y suministrar equipos militares a los grupos armados desde el extranjero.
Cabe recordar que recientemente la portavoz del departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki, pidió la salida inmediata de los combatientes de Hezbolá de Siria, pero no hizo ninguna alusión a los grupos armados presentes en el país árabe, quienes patrocinan el caos.
Mientras las fuerzas armadas del Gobierno popular del presidente Bashar al-Asad consiguen grandes logros en una guerra de desgaste que comenzó desde mediados de marzo de 2011, algunos países occidentales y otros regionales, que apoyan a los grupos armados, intentan impedir el avance de las tropas sirias con el envío de un mayor número de armas.
AL MANAR
El representante iraní en Beirut, capital de El Líbano, ha pronunciado estas palabras durante una entrevista concedida este viernes a la cadena de noticias de Arabia Saudí, Al-Arabiya, donde alabó el importante rol de la República Islámica de Irán en la unidad islámica.
El funcionario iraní, al ser preguntado por la presencia del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), ha contestado que “en los últimos dos años, según declaraciones de los propios países occidentales y los informes internacionales, las fuerzas de Al-Qaeda procedentes de 13 países europeos estuvieron presentes en siria para ayudar a los grupos terroristas”.
Roknabadi ha continuado diciendo que dichas fuerzas cometieron todo tipo de crímenes inhumanos, pero, hasta el momento, nadie ha criticado su presencia en este país árabe y, peor aún, algunos países les han prestado apoyo financiero y militar.
En alusión a la iniciativa iraní para solventar la crisis siria mediante la vía política, Roknabadi ha añadido que, como primer paso para ello, es necesario el cese de la violencia, algo posible siempre y cuando se deje de financiar y suministrar equipos militares a los grupos armados desde el extranjero.
Cabe recordar que recientemente la portavoz del departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki, pidió la salida inmediata de los combatientes de Hezbolá de Siria, pero no hizo ninguna alusión a los grupos armados presentes en el país árabe, quienes patrocinan el caos.
Mientras las fuerzas armadas del Gobierno popular del presidente Bashar al-Asad consiguen grandes logros en una guerra de desgaste que comenzó desde mediados de marzo de 2011, algunos países occidentales y otros regionales, que apoyan a los grupos armados, intentan impedir el avance de las tropas sirias con el envío de un mayor número de armas.
AL MANAR