La policía chilena ha detenido al menos a 137 estudiantes en el proceso de desalojo de institutos en Santiago que fueron tomados por estudiantes de secundaria que exigen al gobierno una eduación pública, gratuita y de calidad.
Con bombas lacrimógenas y carros lanzaaguas, la policía puso en marcha la orden de desalojo emitida por el alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, en los institutos tomados por estudiantes dentro de la capital chilena.
Ya han sido desalojados los institutos Confederación Suiza, Miguel de Cervantes, Darío Salas y Amunategui. Durante el desalojo de Darío Salas, los agentes lanzaron agua al interior y los estudiantes respondieron con lanzamiento de piedras y pintura.
El operativo de desalojo se produjo con la presencia de padres y vecinos a las afueras de los cuatro edificios desalojados.
Mientras la policía desaloja los colegios tomados, grupos de estudiantes volvieron a ocupar el Internado Nacional Barros Arana, que fue desalojado el martes pasado, y el instituto Carmela Carvajal, en Providencia.
La toma de centros educativos se inició la semana pasada en distintos colegios y ha acaparado la atención de cientos de chilenos que apoyan la protesta estudiantil que pide educación gratuita y de calidad, y que para el gobierno se ha convertido en una “movilización política”.
LibreRed
Con bombas lacrimógenas y carros lanzaaguas, la policía puso en marcha la orden de desalojo emitida por el alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, en los institutos tomados por estudiantes dentro de la capital chilena.
Ya han sido desalojados los institutos Confederación Suiza, Miguel de Cervantes, Darío Salas y Amunategui. Durante el desalojo de Darío Salas, los agentes lanzaron agua al interior y los estudiantes respondieron con lanzamiento de piedras y pintura.
El operativo de desalojo se produjo con la presencia de padres y vecinos a las afueras de los cuatro edificios desalojados.
Mientras la policía desaloja los colegios tomados, grupos de estudiantes volvieron a ocupar el Internado Nacional Barros Arana, que fue desalojado el martes pasado, y el instituto Carmela Carvajal, en Providencia.
La toma de centros educativos se inició la semana pasada en distintos colegios y ha acaparado la atención de cientos de chilenos que apoyan la protesta estudiantil que pide educación gratuita y de calidad, y que para el gobierno se ha convertido en una “movilización política”.
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