Pocos costarricenses ayudan a la presidenta Laura Chinchilla a sustentar sus discursos contra el pesimismo nacional.
La cantidad de ciudadanos con una expectativa negativa sobre el futuro del país, aumentó un 33% en solo cuatro meses, según la última encuesta de Unimer.
Desilusión entra hasta la cocina de los hogares
El 60% de la población se alejó de la postura optimista que ha pregonado la mandataria en las últimas semanas y que enfatizó la semana pasada en Nicoya, cuando pronunció:
El 60% de la población se alejó de la postura optimista que ha pregonado la mandataria en las últimas semanas y que enfatizó la semana pasada en Nicoya, cuando pronunció:
“Todos los días en las calles del país me encuentro que es más la gente agradecida con Dios y con la Patria que la gente escéptica y desesperanzada”.
El dato de gente pesimista se disparó desde la encuesta de abril pasado, cuando el 45% de los encuestados expresaron su desesperanza por la situación del país.
El dato de gente pesimista se disparó desde la encuesta de abril pasado, cuando el 45% de los encuestados expresaron su desesperanza por la situación del país.
Ahora son 15 puntos porcentuales más.
Los que opinan que la situación será mejor, representan solo al 9%, después del 14% registrado hace cuatro meses. Y quienes creían que el porvenir del país será “igual que siempre”, pasaron de 41% a 31%.
La encuesta de Unimer muestra que los más pesimistas son los hombres mayores de 40 años, de clase media, con trabajo y residentes en las zonas rurales de la Gran Área Metropolitana.
Frío en los bolsillos. Aunque el Gobierno muestra indicadores positivos en la macroeconomía (crecimiento del PIB, exportaciones y recaudación fiscal), los presupuestos familiares se han afectado en los últimos tres meses por el incremento en las tasas de interés de unos 600.000 préstamos.
Solo el 3% (apenas por encima del margen de error) dice que la economía nacional mejora en relación con mediados del 2011, frente al 67% que la califica como “peor” y el 30% de las entrevistados que la consideran “igual”.
El empeoramiento económico es más percibido por las mujeres (72%) que por los hombres (62%). También hay un énfasis especial entre la gente de clase media
En la cancha de la política, el último trimestre ha deparado posibles casos de corrupción y falta de planificación en la construcción de la trocha en la frontera norte, además de los cuestionamientos a la ética del ministro Leonardo Garnier y el vicepresidente Luis Liberman, a quienes la presidenta Chinchilla decidió mantener en su equipo de gobierno.
La inseguridad, en cambio, agobia menos a la población.
Los que opinan que la situación será mejor, representan solo al 9%, después del 14% registrado hace cuatro meses. Y quienes creían que el porvenir del país será “igual que siempre”, pasaron de 41% a 31%.
La encuesta de Unimer muestra que los más pesimistas son los hombres mayores de 40 años, de clase media, con trabajo y residentes en las zonas rurales de la Gran Área Metropolitana.
Frío en los bolsillos. Aunque el Gobierno muestra indicadores positivos en la macroeconomía (crecimiento del PIB, exportaciones y recaudación fiscal), los presupuestos familiares se han afectado en los últimos tres meses por el incremento en las tasas de interés de unos 600.000 préstamos.
Solo el 3% (apenas por encima del margen de error) dice que la economía nacional mejora en relación con mediados del 2011, frente al 67% que la califica como “peor” y el 30% de las entrevistados que la consideran “igual”.
El empeoramiento económico es más percibido por las mujeres (72%) que por los hombres (62%). También hay un énfasis especial entre la gente de clase media
En la cancha de la política, el último trimestre ha deparado posibles casos de corrupción y falta de planificación en la construcción de la trocha en la frontera norte, además de los cuestionamientos a la ética del ministro Leonardo Garnier y el vicepresidente Luis Liberman, a quienes la presidenta Chinchilla decidió mantener en su equipo de gobierno.
La inseguridad, en cambio, agobia menos a la población.
Aunque sigue ocupando la cima de la preocupación popular, ahora solo el 27% considera que es el mayor problema del país, un porcentaje que en junio del 2011 llegaba a 49%.
Frente a esta tendencia a la baja, el costo de la vida y el estado de la economía muestran un aumento dentro de las angustias populares.
Frente a esta tendencia a la baja, el costo de la vida y el estado de la economía muestran un aumento dentro de las angustias populares.
Llega a un 35% de la población el porcentaje de gente que cita asuntos de índole económica como mayor problema del país.
Entre ellos están el desempleo, el costo de la vida y el estado de la economía.
Un cristal distinto.
Un cristal distinto.
Pese a las críticas de algunos sectores, Chinchilla se aferra el discurso optimista contra “algunos quieren crear un día sí y otro también diciendo a Costa Rica que aquí nada camina, nada funciona, nada prospera y que pareciera que nos hemos convertido en pueblo más sombrío, corrupto y vagabundo del planeta”, como improvisó el miércoles en Nicoya.
“Ante esas voces que vienen a afectar el ánimo nacional, yo les quiero decir que todos los días en las calles del país, y Guanacaste no es la excepción, la gente me confirma que esa es una gran mentira”.
La realidad que muestra Unimer es otra. Además del incremento del pesimismo, también empeoró la percepción sobre el rumbo del país.
“Ante esas voces que vienen a afectar el ánimo nacional, yo les quiero decir que todos los días en las calles del país, y Guanacaste no es la excepción, la gente me confirma que esa es una gran mentira”.
La realidad que muestra Unimer es otra. Además del incremento del pesimismo, también empeoró la percepción sobre el rumbo del país.
El 59% de los entrevistados consideran que el país va encaminado en una dirección equivocada, mientras el 36% cree algo quizá peor, que no va hacia ningún lugar.
Únicamente, el 4% calificó como “correcta” la ruta por la que se conduce el país.
Únicamente, el 4% calificó como “correcta” la ruta por la que se conduce el país.
Este es el valor más reducido que se reporta en las seis encuestas que Unimer ha realizado desde principios del año 2011.
Eso empuja al alza en la preocupación del 67% de los ticos, según la muestra.
Eso empuja al alza en la preocupación del 67% de los ticos, según la muestra.
Son cuatro puntos porcentuales más que en abril y 13 más que en enero de este mismo año.