RT – El ex presidente de Estados Unidos George W. Bush
decidió cancelar su visita a Suiza por temor a ser detenido a causa de
las acusaciones de torturas que se han formulado contra él.
“Está
evitando que le pongan las esposas”, afirma Reed Brody, un abogado de la
organización Human Rights Watch.
Estaba previsto que el ex mandatario fuera uno de los principales
ponentes en una fiesta benéfica en Ginebra el 12 de febrero de 2012.
Pero en las últimas semanas el Gobierno de Suiza ha recibido varias
peticiones para arrestarlo y abrir una investigación criminal en el caso
de que entre en el país.
Varios grupos de defensa de los derechos humanos declararon su
intención de presentar una demanda judicial contra Bush.
Entre ellos, Amnistía Internacional sostiene que Bush está implicado en delitos de tortura y otras violaciones de los derechos humanos cometidas entre 2002 y 2009 como parte del programa de detención secreta de la CIA.
Suiza es uno de los 147 estados que ratificaron la Convención Contra
la Tortura de las Naciones Unidas, y la decisión de Bush de no viajar al
país demuestra que tiene razones para preocuparse.
Bajo este convenio,
las autoridades están obligadas a abrir una investigación contra las
personas acusadas de practicar torturas.
Sin embargo, los oficiales
judiciales suizos afirman que el político tiene inmunidad diplomática
como ex líder de un país.