(PL) Desde exfuncionarios de alto nivel hasta policías de a pie han sido
reclutados por agencias estadounidenses, publica hoy el diario La
Jornada en su primera plana.
Esas agencias son principalmente las encargadas del combate antidrogas (DEA), la oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Altos mandos de la Procuraduría General de la República y de las secretarías de Seguridad Pública Federal y Gobernación de México confirmaron esta información a La Jornada.
Al menos 80 exservidores públicos de áreas sensibles de inteligencia, investigación y análisis del gobierno mexicano trabajan para las agencias estadounidenses, espiando, recopilando información y dando seguimiento a los temas y casos de su interés, añade La Jornada.
Las fuentes consultadas solicitaron anonimato, ya que han sido parte de los equipos que participaron en reuniones de representantes de México y Estados Unidos en negociaciones de acuerdos, como la Iniciativa Mérida y la infiltración de agentes en organizaciones criminales.
Estas afirmaron que "no se ha descartado que funcionarios en activo también estén trabajando para los estadounidenses en combinación con sus excompañeros.
"Esto ya está siendo investigado en la averiguación previa en la que se indaga si la DEA ha lavado dinero de grupos criminales mexicanos en territorio nacional sin conocimiento de las autoridades del país".
Los exservidores públicos y ahora informantes estadounidenses actúan como si se tratara de funcionarios consulares, pues una de sus bases se localiza en la propia embajada de Estados Unidos y otras oficinas están en Reforma 265, aunque la más importante abarca un piso completo de un hotel en la glorieta del Ángel de la Independencia.
Los entrevistados señalaron que los ahora servidores de DEA, ICE y ATF han sido detectados en instalaciones como el Centro de Mando de la Policía Federal o el Centro de Investigación y Seguridad Nacional y luego dirigen sus pasos a la embajada de Estados Unidos o a las instalaciones que tienen en Paseo de la Reforma 265.
En esa última dirección oficialmente se localiza la Oficina Bilateral de Seguimiento a la Iniciativa Mérida.
La contratación de agentes y funcionarios mexicanos no es una situación reciente, pero ahora es más visible, dijeron los entrevistados.
En ese contexto, aunque los agentes estadounidenses no suman más de 200 en todo el país, las autoridades mexicanas no conocen el número de informantes que han contratado.
Inclusive se ha detectado que algunos que fueron detenidos como delincuentes colaboraban con alguna de esas agencias, sobre todo en la frontera norte.
Esas agencias son principalmente las encargadas del combate antidrogas (DEA), la oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Altos mandos de la Procuraduría General de la República y de las secretarías de Seguridad Pública Federal y Gobernación de México confirmaron esta información a La Jornada.
Al menos 80 exservidores públicos de áreas sensibles de inteligencia, investigación y análisis del gobierno mexicano trabajan para las agencias estadounidenses, espiando, recopilando información y dando seguimiento a los temas y casos de su interés, añade La Jornada.
Las fuentes consultadas solicitaron anonimato, ya que han sido parte de los equipos que participaron en reuniones de representantes de México y Estados Unidos en negociaciones de acuerdos, como la Iniciativa Mérida y la infiltración de agentes en organizaciones criminales.
Estas afirmaron que "no se ha descartado que funcionarios en activo también estén trabajando para los estadounidenses en combinación con sus excompañeros.
"Esto ya está siendo investigado en la averiguación previa en la que se indaga si la DEA ha lavado dinero de grupos criminales mexicanos en territorio nacional sin conocimiento de las autoridades del país".
Los exservidores públicos y ahora informantes estadounidenses actúan como si se tratara de funcionarios consulares, pues una de sus bases se localiza en la propia embajada de Estados Unidos y otras oficinas están en Reforma 265, aunque la más importante abarca un piso completo de un hotel en la glorieta del Ángel de la Independencia.
Los entrevistados señalaron que los ahora servidores de DEA, ICE y ATF han sido detectados en instalaciones como el Centro de Mando de la Policía Federal o el Centro de Investigación y Seguridad Nacional y luego dirigen sus pasos a la embajada de Estados Unidos o a las instalaciones que tienen en Paseo de la Reforma 265.
En esa última dirección oficialmente se localiza la Oficina Bilateral de Seguimiento a la Iniciativa Mérida.
La contratación de agentes y funcionarios mexicanos no es una situación reciente, pero ahora es más visible, dijeron los entrevistados.
En ese contexto, aunque los agentes estadounidenses no suman más de 200 en todo el país, las autoridades mexicanas no conocen el número de informantes que han contratado.
Inclusive se ha detectado que algunos que fueron detenidos como delincuentes colaboraban con alguna de esas agencias, sobre todo en la frontera norte.