María: - José! Tenemos que hablar
José: - Recién llego de la carpintería. Dame un minuto al menos para cambiarme esta ropa
María: - Es importante.
José: - ¿Qué pasa?
María: - Sentate.
José: - No des tantas vueltas y decime que pasa.
María: - Vamos a tener un hijo.
José: - ¡Al fin! ¡Vamos a la cama!
María: - No, no. Ya estoy embarazada.
José: - ¿Que qué?
María: - Sí. Sí. Ya estoy embarazada. No es necesario que hagamos nada.
José: - No estoy para bromas
María: - No es una broma. Hoy vino Gabriel a avisarme.
José: - ¿Y quién cuernos es Gabriel?
María: - El arcángel Gabriel. Vino a avisarnos que voy a tener un hijo del Espíritu Santo.
José: - ¿Y ese quién es?
María: - Es una de las personas de Dios.
José: - ¿Personas de Dios? ¿En qué texto sagrado del judaísmo se habla de que Dios tenga distintas personas?