La controversia por los escáners de cuerpo completo que han sido instalados en los aeropuertos de Estados Unidos continua luego de que se filtraran más imágenes de personas desnudas (lo que ha sido llamado pornografía en rayos x, incluso pornografía infantil en rayos x).
Muchos ciudadanos en Estados Unidos,
incluyendo a Janet Napolitano, se oponen a estos escáners alegando que
son excesivos y que en realidad no mejoran la seguridad de forma
significativa.
Una investigación del diario Washington
Examiner apunta a que una de las razones por las cuales han sido
introducidos estos escáners es que tienen un poderoso lobby detrás,
altas conexiones políticas.
Los escaner fueron introducidos 4 días
después de un intento fallido terrorista llamado “Christmas Day
Bombing”, otra vez capitalizando el terror.
La empresa Rapiscan obtuvo
un contrato de 165 millones de dólares de la agencia de seguridad en los
aeropuertos (TSA, por sus siglas en inglés).
El lobby de esta empresa
incluye al director del subcomite de Homeland Security, el republicano
Davi Price y al ex secretario de esta dependencia encargada de la
seguridad nacional, Michael Chertoff.
La empresa Rapiscan pertenece a OSI
Systems Inc., de la cual el multimillonario especulador George Soros
tiene 11, 300 acciones, una cifra pequeña pero que nos dice mucho dado
que Soros es un experto inversionista, ex miembro del Consejo de
Relaciones Exteriores y ex convicto por usar información privilegiada en
Francia.
Un hombre que se especializa en desestabilizar países para su
beneficio. Soros al parecer ha vendido sus acciones en los últimos
días, anticipando a la controversia que están generando estos escáners.
Soros incluso ha sido acusado de ser uno de los más grandes nacrotraficantes del mundo, financiando a los carteles de la droga en México.
Vía Washington Examiner