
Practicas religiosas, severas tradiciones, denigrantes condiciones socioeconómicas o simple crueldad de género son algunos de los factores que determinan la seguridad para las mujeres en un país.
A partir de estas premisas y tomando en cuenta la violencia dirigida en contra de ellas, la extrema pobreza que deben enfrentar o la carencia absoluta de un sistema de salud que vea por ellas, la Thomas Reuters Foundation, a través de su nueva organización TrustLaw Woman, se dio a la tarea de publicar un ranking en el cual se identifica a los países más peligrosos para la integridad de las mujeres:
En Somalia las mujeres no solo enfrentan el riesgo a una agresión sexual de manera cotidiana, sino que también están expuestas a mutilaciones de órganos sexuales (vinculadas a tradiciones tribales o fanatismo religioso) y su acceso a un sistema de salud es nulo (si una mujer se embaraza en este país tiene 50% de probabilidades de morir durante el parto).
Uno de los países más poblados y con mayor riqueza cultural en el mundo, también es uno de los más amenazantes para las mujeres.
Violencia doméstica, sexismo y la agresión cotidiana (incluidos múltiples asesinatos que se registran anualmente) le han valido a la India el cuarto lugar de este poco decoroso listado.
Tráfico de mujeres, violencia doméstica y agresiones físicas en contra e la población femenil de Pakistán, impulsaron a los 213 expertos en problemáticas de género que integran TrustLaw Woman a ubicar a este país como el tercero más peligroso del mundo para las mujeres.
2) Congo
Se calcula que cada año más de 400,000 mujeres sufren violaciones sexuales en el Congo, un país con 60 millones de habitantes.
Para TrustLaw Woman Afganistán es el país más peligroso del mundo para la mujeres.