El presidente guatemalteco Álvaro Colom defendió en 2008 ante el embajador estadunidense, James Derham, su plan para firmar un acuerdo con la alianza regional Petrocaribe, creada a iniciativa del presidente venezolano, Hugo Chávez, en junio de 2005, pese a las presiones de Estados Unidos para evitar que los países centroamericanos se sumaran a la corporación regional.
Derham llevó el tema ante Colom durante una reunión con el mandatario celebrada el 8 de julio de 2008, según revela un memorando diplomático filtrado en el sitio de Internet Wikileaks.
Aunque Derham no afirma haber presionado al socialdemócrata, el presidente estadunidense de entonces, George W. Bush, trató de evitar que los gobiernos centroamericanos se unieran a Petrocaribe, según confirma otro cable diplomático del 30 de julio de 2008, escrito por el embajador en Tegucigalpa, Charles Ford.
Ni Guatemala ni Honduras se unieron a Petrocaribe en la fecha de constitución de este organismo regional, el 29 de junio de 2005, fundado de forma paralela al Pacto de San José (Costa Rica), mediante el cual México y Venezuela se comprometieron en agosto de 1980 a suministrar 160 mil barriles diarios de petróleo a 11 países de Centroamérica y el Caribe, a precios más bajos que en el mercado mundial.
Los 14 países signatarios del Acuerdo de Cooperación Energética Petrocaribe fueron Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guyana, Jamaica, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Venezuela.
Ford relató que el presidente Manuel Zelaya le pidió que obtuviera la aprobación del presidente George W. Bush a su plan para unirse a Petrocaribe, durante entrevistas que sostuvieron entre mayo y junio de 2006.
Cuando se reunió con el presidente Bush, quien confirmó nuestra estricta oposición a sus intenciones, Zelaya luego me dijo que estaba sorprendido de que este asunto haya estado en nuestra agenda bilateral, escribió Ford en un cable diplomático que redactó cuando se preparaba la llegada de su relevo a Tegucigalpa, Hugo Llorens, quien ocupaba el puesto cuando el hondureño fue depuesto mediante un golpe de Estado, el 28 de junio de 2009.
Nicaragua fue el primer país del istmo centroamericano que se adhirió a Petrocaribe; Honduras se sumó en enero de 2008 y Guatemala en julio de 2008. Los otros tres países hispanoparlantes de la región, El Salvador, Costa Rica y Panamá se mantienen al margen.
En su diálogo con el embajador Derham, Colom argumentó que la idea de unirse a Petrocaribe tenía bases económicas.
El canciller Haroldo Rodas, según afirmó el representante estadunidense en el memorando de julio de 2008, sostuvo que Guatemala no se unirá a la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (Alba), también encabezada por Venezuela.
