Pedro Echeverría (especial para ARGENPRESS.info)
1. Enorme expectativa por la visita a México que realizará este martes la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton. Abordará con miembros del gobierno mexicano medidas de combate al narcotráfico.
Clinton encabezará una delegación integrada además por la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano; el secretario de Defensa, Robert Gates; el director de Inteligencia Nacional, Dennis Blair; el asesor presidencial John Brennan y el jefe del Estado Mayor Conjunto, Michael Mullen.
7. Pareciera que esa reunión del gran poder de “seguridad” entre los gobiernos de EEUU y México, es simplemente una más.
La reunión tendrá lugar en un momento extremadamente difícil: México –que lleva más de tres años desplegando al ejército en todo el país provocándose alrededor de 20 mil muertes- ha manifestado su impotencia al sufrir una ola de homicidios que ha llevado al Gobierno de Estados Unidos a reconocer que su vecino sufre un problema "muy serio" de violencia. ¿Podría haber mejor momento para que el gobierno yanqui imponga sus exigencias a México?
2. El general Benito Medina, director de Educación Militar de la Universidad del Ejército y de la Fuerza Aérea, dijo que en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado ni el Ejército ni México pueden enfrentar solos el problema; se requiere de la cooperación internacional ante un fenómeno transnacional en el que se necesita combatir el lavado de dinero, el tráfico de armas y los mercados de consumo.
La sociedad debe entender, dijo, que “no es por decreto, no es porque la presencia de parte del poder nacional, como son las Fuerzas Armadas y otras fuerzas, se presenten a tratar de mitigar el problema, éste va a dejar de existir”, aunque se han tenido resultados importantes, urge una estrategia social. Insistió en que el combate al narcotráfico y el crimen organizado rebasan fronteras.
“No podemos decir que el Ejército no puede, no, es que no solamente no es el Ejército, todo México no puede solo, necesitamos de la colaboración de la comunidad internacional”.
3. Al parecer la llamada “Iniciativa Mérida” será enterrada porque fue un acuerdo firmado por el ya ex presidente Bush y porque no funcionó de manera eficiente. Lo probable es que ahora se convierta en Plan México y los EEUU impongan el control total que requieren.
¿Puede alguien olvidar que el Plan Colombia funcionó desde 1999 de la misma manera al pasar a controlar totalmente la política del país, convertir al gobierno colombiano en un simple pelele y luego usar el territorio para instalar siete bases militares?
Quizá, como me decía un amigo, las condiciones del mundo no estén para soportar una invasión abierta a México, pero el total control de la frontera por parte del gobierno parece que no se podrá evitar. Sin embargo nunca conoceremos a ciencia cierta los contenidos del la reunión de mañana.
Lo que sí puede verse con absoluta claridad es que el gobierno de Calderón está recibiendo un fuerte espaldarazo para que termine su período de gobierno.
4. Los EEUU han penetrado al fondo de la política mexicana, sobre todo a partir del gobierno de Salinas (1988-94) Fue este personaje quien trazó la línea de dependencia económica y política total que los gobierno panistas han llevado hasta sus últimas consecuencias.
Si México durante varias décadas, antes de 1982, mantuvo una relación de asociación y competencia, de cierta independencia relativa, que lo llevó en muchas ocasiones a chocar con los intereses yanquis, a partir de la implantación del modelo del neoliberalismo y la privatización los pequeños márgenes de independencia impulsados por el “nacionalismo” desaparecieron para dar paso el poder a una poderosa burguesía sometida totalmente al capital yanqui e internacional.
En 30 años el neoliberalismo ha provocado un gigantesco desempleo, migración, comercio informal, miseria, prostitución y delincuencia; pero también una enorme concentración de capital en una cuantas manos.
5. La presencia del secretario de la Defensa y de la secretaria de Seguridad Nacional en esa cumbre de “seguridad nacional”, me causa alarma y mucha preocupación. ¿Qué se plantea el gobierno aún fuerte de Obama frente al débil gobierno de facto de Calderón? Quizá los resultados de la reunión no los veamos de inmediato, pero en el transcurso de las semanas se comenzarán a acomodar las cosas.
Por ahora se abordarán la situación de los enemigos en los que EEUU coloca en primer plano al terrorismo y no propiamente a la venta y distribución de droga; pone atención al gran fortalecimiento y organización militar de los narcotraficantes y no de la droga que ha sido ampliamente legalizada en los EEUU.
Seguramente se acordarán gigantescos montos económicos, compra de armas, asesoría técnica y helicópteros de vigilancia y de combate. Pero donde seguramente se pondrá el acento es en la frontera entre los dos países; pues más que combatir la droga los yanquis ponen en primer lugar la lucha contra el terrorismo.
6. Recuerdo que en los años sesenta y sesenta hacíamos grandes manifestaciones antiimperialistas en el Paseo de la Reforma de la ciudad de México. Los gritos contra el imperio yanqui por la invasión y guerra en Vietnam, por las provocaciones contra Cuba, en apoyo a las luchas de los negros para la igualdad racial, sobre todo contra las visitas de los presidentes Kennedy, Johnson, Nixon, fueron siempre batallas en las que la izquierda se unía.
Aunque aquellas marchas no llegaban al Zócalo, en el monumento a Juárez se realizaban todos los mítines de aquella combativa izquierda que no había entrado al juego electoral de la democracia burguesa. Mañana estarán los grandes jefes militares de los EEUU –los mismos que planean los bombardeos contra Afganistán, Irak y que planearon el golpe de Estado en Honduras- y la izquierda no ha programado ningún acto de repudio o muchos no estamos enterados. ¿Puede decirse que la izquierda es cada vez más fuerte?
7. Pareciera que esa reunión del gran poder de “seguridad” entre los gobiernos de EEUU y México, es simplemente una más.
Sin embargo puede cambiar radicalmente muchas cosas:
a) Ahora sí, la total subordinación de Calderón (alguien me diría que más no se puede);
b) La creación de un comité binacional bajo las órdenes de los EEUU apuntando sobre el “terrorismo”;
c) reanudar el cierre militar de la frontera;
d) plazos para que el ejército demuestre que sí puede acabar con el narcotráfico, de lo contrario habría una intervención militar yanqui;
e) acuerdo de un fuerte financiamiento y compra de armas.
En fin, el objetivo de los EEUU es, más que frenar el tráfico de drogas (legales en los EEUU), aniquilar la guerra que crece en la que los ejércitos de los narcotraficantes están representado un verdadero peligro para la estabilidad de México (su traspatio) y del gobierno calderonista.
¡Debemos seguir muy atentos, no hay otra tarea más importante hoy!