Andrea Wolf (Munich 1965 - Kurdistán 1998)
Por Pacogarabato
Conocí a Andrea allá por el 92 en Frankfurt An Main. Vivía con mis amigos de la Fritzse, una casa okupada en Frankfurt. La juventud de Andrea está ligada a los acontecimientos de la izquierda en la Alemania Occidental de los 80 y 90.
Desde finales de los 70 y principios de los 80 Andrea empieza su militancia política, participando en acciones de okupación, lucha obrera en Wackersdorf y en la construcción del movimiento feminista. Eran los años finales de la RAF lo que unido a la lucha antiimperialista le marcó profundamente.
En aquellos años Steinmetz, un infiltrado de la policía, se introduce en los círculos de la izquierda alternativa en la zona del Rhein-Main. Su traición llevará a la aniquilación de Wolfgang Grams y el apresamiento de Birgit Hogefeld en Bad Kleinen. Andrea quedó tocada por tales sucesos.
Para colmo, el estado y la policía la acusaron de tomar parte en la acción de la RAF contra la prisión de seguridad de Weiterstadt, que destrozó el edificio sin víctimas, poco antes de su inaguración.
Todo parece indicar que fue un complot para llevarse por delante a gente activa como Andrea y el grupo con el que convivía y militaba: en el momento de la acción ella se encontraba en Centroamérica. Temiéndose una injusta y larga condena opta por pasar a la clandestinidad.
Poco después decide alistarse como luchadora internacionalista en el grupo de mujeres del ejercito de liberación kurdo YAJK. Si bien se sentía comprometida con la causa Kurda, su intención era más bien intercambiar experiencia organizativa, pensando en la construcción de una política revolucionaria; lo que los servicios secretos califican vulgarmente como “entrenamiento militar” y que para ella era aprender como funcionan los procesos revolucionarios a lo largo del mundo.
En Septiembre de 1998, el PKK ofrece una tregua al estado turco; pero el gobierno turco -un elemento más en el tablero de todo lo que se cuece en oriente medio y en aquel momento en guerra encubierta con Siria- afectado por los movimientos de otras potencias, responde invadiendo el Kurdistán con un ejercito de 25.000 hombres y lanzando ataques indiscriminados contra la milicia kurda, si bien este no era su objetivo primero.
El 22 del noviembre de 1998, en la provincia de Catak, al Norte de Kurdistán, en un combate entre el ejercito turco y la guerrilla, Andrea es capturada junto con 19 compañeras más (24 morirán en el ataque). Veinte minutos después eran fusiladas.
Andrea fue una compañera revolucionaria que, a su manera y condicionada por las circunstancias que le toco vivir, nos mostró un camino de trabajo y lucha para tratar de cambiar el mundo. Ahora nos toca a nosotros recoger su ejemplo, fuerza, determinación y amor por la humanidad y seguir con la tarea; ésto no quiere decir que tenga que ser exclusivamente por la vía de las armas, no: el mundo cambiará de verdad (cosa que ya dudo) por la formación y la educación de la gente en valores más solidarios y menos materialistas que los que hasta ahora nos han impuesto.
¡Qué la tierra te sea leve compañera!
Fuente: Kaos en la Red
