En 1954 Estados Unidos bombardeó a Guatemala

En 1954 Estados Unidos bombardeó a Guatemala

Ghassan Ben Jeddou habla sobre la grandeza de Sayyed Nasrallah

///////
****El Presidente del Consejo de Dirección de la red panárabe Al Mayadeen destacó la valentía del gran mártir de la Resistencia libanesa, su profunda conexión con sus seguidores y su liderazgo inquebrantable hasta su martirio.

"Como otros que conocían a Sayyed Hassan Nasrallah, nunca esperé hablar de él como un mártir", aseveró este viernes el Presidente del Consejo de Dirección de la red panárabe Al Mayadeen, Ghassan Ben Jeddou.

Así comenzaron sus reflexiones sobre el secretario general de la Resistencia de Líbano (Hizbullah), el mártir Sayyed Nasrallah, y lo describió como un hombre a quien no le gustaban los halagos ni alabanzas, ya sea en su presencia o su ausencia.

En una entrevista con la red Al Mayadeen, como parte de su cobertura de la ceremonia de martirio de Sayyed Nasrallah, Ben Jeddou recordó cuando en 2014 el entrevistado pasaba por un momento difícil, y Sayyed Nasrallah, al tanto de la situación, le hizo una promesa.

"Estaba a su lado, y su eminencia me hizo una promesa. Me dijo: 'Cuando seas mártir, hablaré de ti'. Entonces besé su frente y le agradecí, creyendo que me encontraría con Dios delante de él".

Hoy Ben Jeddou recuerda la llegada de la devastadora noticia sobre el martirio del gran líder.: "Estaba aquí, en Al Mayadeen, cuando escuché la explosión masiva, y las primeras palabras que pronuncié fueron: "Que sea cualquiera menos el Sayyed", confiesa.

Al describir la fuerza de aquel ataque, recuerda un estremecimiento muy poderoso: "Beirut se estremeció, las montañas se estremecieron y el lugar donde estábamos se estremeció. Dada la magnitud del ataque, estaba claro que el objetivo era un líder importante y muy significativo".

"Sólo pensaba en Sayyed, que Dios se apiade de él", admitió Ben Jeddou. "Pero, como todos los demás, me aferré a la esperanza de que sobreviviría a ese terremoto".

La noche antes del anuncio oficial del martirio de Sayyed Nasrallah, Ben Jeddou se enteró de la verdad. “Hablé con dos personas y una de ellas me dijo: ‘Estamos manejando la situación como si Sayyed Hashem hubiera sido martirizado’”. Su respuesta inmediata fue: “¿Pero Sayyed Hashem está a salvo?”.

Recibió una confirmación: “Sí, Sayyed Hashem está a salvo”. Ben Jeddou explicó por qué había preguntado: “Como muchos otros, creía que entre los más calificados para suceder a Sayyed Nasrallah estaba Sayyed Hashem Safieddine”.

Ben Jeddou recordó su reacción cuando se confirmó el martirio de Sayyed Nasrallah. “Me sobrecogió un frío tremendo, una calma sobrenatural… No derramé ni una lágrima por Sayyed ese día”.

Su principal preocupación en ese momento era asegurar la continuidad de la red comunicativa que dirige, explicó. “Sentí que mi responsabilidad era no hablar, no perder el tiempo en nada más que no fuera centrarme en Al Mayadeen… Vi que era mi deber alejarme del centro de atención, abstenerme de hablar o escribir”.

Sin embargo, el desgaste emocional salió a la luz después. “Dos semanas después de su martirio, sufrí una crisis nerviosa… Esa noche no pude dormir. Fue un colapso nervioso abrumador”.

El último encuentro

El último encuentro de Ben Jeddou con Sayyed Nasrallah fue en vísperas de la Operación Diluvio de Al-Aqsa, mientras se estaba preparando para lo que llamó "la entrevista de su vida" con el venerado Secretario General.

"Le había enviado una lista de temas y puntos clave el 25 de junio de 2020... Había expresado mi deseo de realizar una entrevista larga y en profundidad con él", narró el experimentado periodista.

También recordó una conversación de 2002, parte de la cual se emitió más tarde en la serie documental "Cuarenta y más sobre Hizbullah", con motivo del 40 aniversario del movimiento.

En 2019, le insistió mucho acerca de lo oportuno de hablar sobre su mandato como Secretario General de la Resistencia y el panorama árabe e islámico más amplio desde la creación del partido: "Mi objetivo era hablar de él. Pero para evitar incomodarlo, lo planteé como una discusión sobre estas fases históricas desde su perspectiva, y aceptó".

En junio de 2020, Ben Jeddou había elaborado "una lista de 200 temas, divididos en numerosas preguntas, casi mil en total".

A mediados de agosto del pasado año, Ben Jeddou solicitó una entrevista con Sayyed Nasrallah para conmemorar el primer aniversario de la Operación Diluvio de Al-Aqsa.

"Me puse en contacto con Hajj Yihad, quien más tarde sería conocido como el gran mártir Samir Deeb. Le dije que le enviaría una solicitud a Su Eminencia para una entrevista.

 Me dijo: 'Si fuera por mí, la entrevista no debería realizarse. Pero es mi deber transmitirle su solicitud a Sayyed'".

Unos días después, Hajj Yihad devolvió la llamada: "Me informó que Sayyed había aprobado la entrevista", y entonces le envió una lista de puntos de discusión.

Un regalo personal y valioso

Ben Jeddou también habló sobre la generosidad de Sayyed Nasrallah. "Era increíblemente generoso... Si alguien le pedía algo, se lo daba. Incluso cuando no se lo pedíamos, lo ofrecía".

Para él, su regalo más preciado fue su capa personal, entregada después de la guerra de julio de 2006, cuando lo visitó en privado. "Al final de nuestra reunión, se quitó la capa y me la puso. Fue el regalo más sagrado y significativo. Se tomaron fotografías de ese momento, aunque nunca las recibí. Pero la capa sigue conmigo, preservada en un marco especial".

Sayyed Nasrallah siempre valoró a los medios de comunicación y su papel, aseveró el presidente de Al Mayadeen. "Estaba muy interesado en los medios de comunicación, los apreciaba mucho y comprendía su importancia".

Al mismo tiempo, no trataba a los periodistas como si fueran excepcionales o diferentes de los demás en términos de conducta. en su opinión, el líder era una persona de buenos modales por naturaleza, y si los periodistas podían considerarse especiales junto él, se debió a su trato cálido, su sonrisa, palabras amables, hospitalidad y gran cortesía.

En la entrevista de este viernes, Ben Jeddou reveló también detalles de una visita a Sayyed Nasrallah en 2020, durante la cual solicitó permiso para producir un importante documental sobre Hizbullah para su 40º aniversario, dos años después.

Sayyed Nasrallah respondió: "Eres libre de hacerlo... ¿Qué tiene que ver esto conmigo?". Cuando le aclaró que pedía permiso para que discutiera el asunto con los líderes del movimiento, le respondió: "Te pido, por favor, que no hable yo en este documental, pero sería bueno que mis hermanos hablaran".

Según afirmó el directivo de prensa, aquellas entrevistas para el documental fueron transcritas en su totalidad, pero no todas fueron transmitidas.

También reveló que Sayyed Nasrallah informó a los líderes militares sobre la serie y elogió su realización, y sus hermanos consideraron al periodista un hombre confiable, con quien podían trabajar.
Relación con el mártir Rafic Hariri

Ben Jeddou destacó la profunda conexión personal de Sayyed Nasrallah con el ex primer ministro libanés Rafik Hariri. "Se sintió profundamente afectado por la pérdida de Hariri a nivel personal, antes incluso de considerar su dimensión nacional".

Nasrallah y Hariri se reunieron 34 veces en secreto, y sólo dos personas lo sabían, además de sus equipos de seguridad e Imad Mughniyeh: Nazik Hariri y Mustafa Nasser. Al decir de Ben Jeddou el último fue un encuentro de "extraordinaria calidez y afecto".

Hariri incluso confió a Sayyed Nasrallah la transmisión de mensajes políticos, y tras el asesinato del premier, sintió una profunda conmoción, pues además habían logrado una convicción compartida de cooperación a largo plazo.

Confesó entonces Sayyed Nasrallah al periodista: "Aparte del presidente Nabih Berri y mi relación especial con el Movimiento Amal, tuve una relación orgánica con Hariri que no se parecía a ninguna otra".

De acuerdo con Ben Jeddou, el líder de Hizbullah estableció una vía excepcional de cooperación con Hariri en todos los asuntos. Habían llegado a acuerdos sobre casi todo, incluidas las elecciones parlamentarias previstas para 2005 o 2006. Acordaron alianzas y cooperación con sólo dos puntos disonantes: uno relativo al Partido Tashnag (luego fue resuelto), y otro relativo al Grupo Islámico (Al-Jamaa Al-Islamiya)." Desafortunadamente, Hariri fue asesinado antes de que pudiera resolverse".

Tras el asesinato de Hariri, Sayyed Nasrallah percibió una grave amenaza para Líbano, y estaba seguro de quién había ordenado u orquestado ese crímen. Por eso previó una importante convulsión regional, en particular un conflicto sectario entre suníes y chiítas, afirmó Ben Jeddou.

Sin embargo, estaba convencido de cuánto podría aportar la cooperación entre ambos en un posible un camino hacia la unidad islámica entre chiítas y suníes, sobre todo en su nación.

A pesar de las tensiones políticas posteriores, el Sayyed mantuvo un gran respeto y afecto por la familia Hariri, resaltó Ben Jeddou. Como político desaprobaba que Saad Hariri abandonara el país, pero "entendía sus razones y encontraba justificación para ello... Después de todo, necesitaba preservar su vida".

Intento de asesinato entre 2008 y 2009

Presidente del Consejo de Dirección de la red panárabe contó también durante la entrevista televisiva cómo Sayyed Nasrallah sobrevivió a un grave intento de asesinato por parte de la ocupación israelí entre 2008 y 2009.

"Un escuadrón de aviones fue enviado a matarlo en el Líbano", recordó, pero aquela operación fue detenida por el gobierno de Estados Unidos.

Para otros fue diferente, reflexiona el entrevistado. Sayyed Nasrallah fue muy afectado por el asesinato de Imad Mughniyeh, con quien sostuvo una relación extraordinaria a nivel personal, no solo como secretario general y comandante militar.

También lo impactó mucho la pérdida del teniente general Qassem Soleimani. "Ojalá Dios se hubiera llevado mi alma en lugar de la de Soleimani", dijo entonces el gran líder libanés.

Soleimani había expresado un sentimiento similar. Recuerda el periodista cuando el combatiente iraní le confesó: "No puedo soportar la idea de que Sayyed Nasrallah sea martirizado o muera. Rezo para que, si uno de nosotros debe ser asesinado, sea yo. Le pido a Dios que mantenga a Sayyed como un pilar para esta Ummah'".

Según pudo percibir, Soleimani "no solo amaba y admiraba a Sayyed Nasrallah: lo reverenciaba de una manera excepcional, y lo veía como el segundo, o igual a Sayyed Ali Khamenei".

Otra figura cuyo martirio dolió mucho al líder fue su propio hijo, Hadi, recordó el entrevistado.

Los encuentros más hermosos

Al rememorar sus entrevistas con el Secretario General de Hizbullah, Ben Jeddou describió cómo él siempre prefería sentarse en una mesa, para mantener el control. "Le encantaban los bolígrafos, el papel y escribir... Le gustaba tomar notas".

Tales encuentros no solían prepararse,como mucha gente imagina: "Discutíamos temas generales, pero las preguntas detalladas nunca se ensayaban", afirmó.

La entrevista posterior al martirio de Soleimani fue para el comunicador uno de los encuentros más hermosos y emotivos, porque lo encontró "profundamente conmovido, pero en paz".

Para esta entrevista, Ben Jeddou pidió un entorno diferente. "Sugerí reemplazar la mesa con sofás para que pudiera estar más a gusto, ya que se trataba de una conversación histórica. Lo organizaron así y ambos estuvimos cómodos".

Como reveló también, esa entrevista tuvo lugar en el mismo salón donde Sayyed Nasrallah fue martirizado. Un gran retrato de Soleimani y Abu Mahdi al-Muhandis adornaba la habitación. "Le expresé mi admiración y al día siguiente Hajj Yihad me llamó y me dijo: 'Te voy a enviar algo'; y era ese mismo retrato".

Admiración especial del líder Khamenei

Ben Jeddou trajo también del recuerdo un suceso de finales de los años 80, cuando los líderes de la Resistencia libanesa visitaron Irán para reunirse con Sayyed Ali Khamenei antes del Acuerdo de Taif.

Esa vez los líderes del partido le hicieron una pregunta a Khamenei, y él les dijo: "Vuelvan a verme en 48 horas".

Cuando regresaron, dos días después, les ofreció dos principios clave. El primero fue: ‘Hizbullah es un partido libre e independiente dentro del Líbano; no necesitan consultarme para asuntos internos; sus decisiones son suyas’”. Y el segundo: “Si surge una crisis importante en Líbano o en otros lugares y sienten la necesidad de consultarme, sepan que la opinión de Sayyed Hassan Nasrallah es mi opinión”.

En ese momento, el mencionado aún no era Secretario General, pero todos se dirigían a él, porque comprendieron que ocupaba un lugar especial junto a Sayyed Khamenei, aseguró el entrevistado.

Ben Jeddou también reveló que en los últimos años el líder libanés visitó Teherán varias veces en viajes no anunciados: “Algunas visitas fueron a petición suya, y otras por solicitud de funcionarios iraníes, para conocer su perspectiva sobre cuestiones clave”.

Opiniones sobre la epopeya Diluvio de Al-Aqsa

Tras la operación del 7 de octubre de 2023, inicio del Diluvio de Al-Aqsa, Sayyed Nasrallah mantuvo a propósito en secreto las acciones de Hizbullah.

Dieciocho días después, cuando Hizbullah lanzó su batalla de apoyo, algunas facciones palestinas esperaban una mayor intervención, y algunas voces en las redes sociales también pidieron más apoyo.

"Tomé la iniciativa de enviarle un mensaje con sugerencias, incluida la designación de un portavoz militar", reveló Ben Jeddou.

El líder respondió a través de un intermediario: "Me abstuve intencionalmente de hacer anuncios. No queremos eclipsar a nuestros hermanos palestinos ni atribuirnos el mérito de sus acciones. Esta será una estrategia a largo plazo".

Hizo hincapié en un objetivo clave: "Espero que el resultado del Diluvio de Al-Aqsa sea una victoria puramente palestina". 

Y fue aún más explícito: "Quiero que sea una victoria palestina, árabe y sunita. No quiero que nadie diga que Hizbullah o los aliados chiítas de la Resistencia palestina desempeñaron un papel importante. No se trató sólo de apoyo: hubo una sala de operaciones conjunta y mucho más".

Sayyed Hashem esperaba la decisión de Sheikh Qassem

El Sheikh Naim Qassem tomó la iniciativa de llamar a Sayyed Hashem Safieddine para elegirlo como Secretario General de Hizbullah, confirmó Ben Jeddou.

"Sayyed Hashem esperaba esa decisión, porque era el primer candidato para el puesto", explicó el entrevistado, y narró cómo fue el Sheikh quien realizó la llamada e indicó elegirlo de inmediato como Secretario General, aunque Sayyed Hashem debatió con él un poco.

El Sheikh insistió: "No podemos perder el tiempo. Es una demostración de fuerza por parte de Hizbullah anunciar la rápida elección de un Secretario General. Ahora estoy hablando como Vicesecretario General".

De acuerdo con Ben Jeddou, el anuncio debía hacerse público el mismo día en que Sayyed Safieddine fue atacado, y nombrar al Sheikh Qassem era la sucesión natural.

"El partido, la dirección de la Resistencia militar e incluso algunos aliados en el extranjero se sorprendieron por el éxito y la competencia de Sheikh Qassem en la gestión de la batalla militar", reflexionó.

Un líder excepcional y único en su tipo

De la capacidad de emocionarse del geran líder habló también el entrevistado: "Vi a Sayyed Hassan Nasrallah llorar tres veces. Dos de ellas por su pueblo, sus partidarios y su entorno. Sentía un amor y una gratitud incomparables por ellos. 

Después de la Guerra de Julio, lo vi profundamente afectado, derramando lágrimas por la destrucción y el desplazamiento de la población. Incluso visitó a los desplazados en el parque de Sanayeh, abrumado por la emoción".

La tercera estuvo relacionada con los acontecimientos del 7 de mayo, durante una reunión en la que Sayyed Nasrallah proporcionó aclaraciones detalladas a un destacado líder islámico árabe enviado por los Hermanos Musulmanes.

"Le explicó todo para disipar la idea de que el 7 de mayo fue un conflicto sectario. Nunca se trató de sunitas y chiítas. Durante esa conversación, Sayyed Nasrallah lloró", reveló Ben Jeddou.

No obstante, era un hombre de extraordinaria valentía y, contrario a la creencia popular, no se escondía en túneles, afirmó el reconocido periodista. "Nunca me encontré con él en un túnel, ni una sola vez. Me lo encontré docenas de veces, siempre sobre la tierra, a veces en edificios altos. Los túneles eran para reuniones y operaciones de alto rango, no para su residencia".

En su opinión, el funeral de Nasrallah tiene una gran importancia: "Una multitud masiva de leales participará porque Sayyed fue valiente. La gente debe honrarlo con el mismo coraje y lealtad que él tenía por ellos".

"Se lo llevaron cuando más lo necesitábamos"

Reflexionando sobre el martirio de Sayyed Nasrallah, Ben Jeddou afirmó: "Sí, fue martirizado a una edad temprana. Sí, se lo llevaron en el momento en que más lo necesitábamos. Pero se lo merecía. Se merece estar en los rangos más altos del paraíso. 

¿Preferirían que Hassan Nasrallah hubiera muerto de muerte natural? El martirio le conviene. La esencia misma del martirio se elevó al abrazar a Sayyed Hassan Nasrallah".

Sin embargo, admitió su profundo pesar: "Este dolor permanecerá conmigo toda la vida. Nunca he llorado a nadie como lloro a Sayyed Hassan, ni a mi padre, ni a mi madre, ni a nadie más. Que Dios nos ayude a seguir adelante".

También recordó el profundo respeto de Nasrallah por el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri. En 2016, en el décimo aniversario de la Guerra de Julio, propuso un diálogo especial entre ambos. "Al principio se sorprendió, pero acogió con agrado la idea y dijo: 'Hagámoslo; echo de menos al presidente Berri'. Lamentablemente, las circunstancias lo impidieron”.

Por último, Ben Jeddou reflexionó sobre la relación de Nasrallah con la red Al Mayadeen. “Nunca interfirió en nuestros asuntos, la amaba y confiaba en ella. 

Sabía de su creación antes de su lanzamiento porque yo le consulté al respecto. Me dijo: 'Te deseo todo el éxito, pero ten en cuenta que la competencia será feroz y te verán de una determinada manera. Que Dios te ayude'”.

El mensaje final del Presidente del Consejo para el amigo mártir, fue: “Descansa en paz, nuestro más querido y reverenciado líder. 

Tu Ummah te ama, tu pueblo sigue siendo leal y tu resistencia protege tu legado. Al Mayadeen continuará, como idea y como proyecto, ya sea conmigo o sin mí. El viaje continúa”.

https://espanol.almayadeen.net/noticias/politica/1987837/ghassan-ben-jeddou-habla-sobre-la-grandeza-de-sayyed-nasrall

Related Posts

Subscribe Our Newsletter