**Crowdstrike, un nombre líder en ciberseguridad, estuvo profundamente involucrado en el engaño 'Russiagate'.
Antes de que una actualización de software defectuosa arrastrara el nombre de la compañía a los titulares mundiales el viernes, Crowdstrike tenía una larga historia de participación con las agencias de inteligencia estadounidenses y jugó un papel clave en el engaño "Russiagate".
Crowdstrike lanzó el viernes una actualización defectuosa de su software de seguridad basado en la nube que dejó a una serie de usuarios de todo el mundo (incluidos bancos, aerolíneas, medios de comunicación y agencias gubernamentales) sin poder utilizar sus sistemas de TI.
La compañía emitió una solución pocas horas después de identificar el problema, pero miles de vuelos continuaron cancelados o retrasados hasta el viernes por la tarde, mientras que hospitales, departamentos de policía y empresas continuaron informando problemas para volver a funcionar.
Con la confianza de los gobiernos
Crowdstrike, fundada en 2011 por su director ejecutivo George Kurtz y el exdirector de tecnología Dmitri Alperovitch, lanzó su plataforma insignia Falcon dos años después.
Falcon monitorea las computadoras o servidores de los clientes en busca de ataques, transmite detalles de las amenazas entrantes a la empresa a través de un servicio de monitoreo basado en la nube y luego puede bloquear o rastrear el ataque.
Entre los clientes que figuran en el sitio web de Crowdstrike se encuentran Amazon, Google, Visa e Intel.
Más del 80% de los gobiernos estatales de EE. UU. utilizan Crowdstrike, al igual que los gobiernos nacionales de Australia, Alemania, Israel y otros.
La plataforma Falcon requiere acceso profundo a los dispositivos del cliente, lo que significa que una actualización defectuosa puede bloquear no solo el software, sino el dispositivo en sí, como sucedió a escala global el viernes.
Trabajando con espías
Menos de un año después de la fundación de Crowdstrike, Kurtz y Alperovitch incorporaron al exdirector ejecutivo adjunto del FBI, Shawn Henry, para que dirigiera su ala de consultoría en materia de ciberseguridad.
En 2014, el departamento de Henry ya estaba lanzando una oleada de acusaciones de piratería y espionaje contra China, Rusia y Corea del Norte, y la información proporcionada por Crowdstrike ayudó al Departamento de Justicia de Estados Unidos a presentar acusaciones ese verano contra cinco oficiales militares chinos que supuestamente habían pirateado corporaciones energéticas estadounidenses.
Rusiagate
Crowdstrike fue contratado por el Comité Nacional Demócrata de Estados Unidos para investigar el robo de datos de sus servidores en 2016. Publicados por WikiLeaks, los datos revelaron que el DNC había manipulado las primarias demócratas contra Bernie Sanders y que Hillary Clinton había pagado efectivamente para controlar el comité.
Crowdstrike concluyó que Rusia estaba detrás de la violación de datos, y Henry testificó ante el Congreso que la compañía "vio una actividad que creíamos que era consistente con la actividad que habíamos visto anteriormente y que habíamos asociado con el gobierno ruso".
La evaluación de Henry reforzó la Evaluación de la Comunidad de Inteligencia de enero de 2017, en la que las agencias de espionaje estadounidenses determinaron que Rusia “exfiltró grandes volúmenes de datos del Comité Nacional Demócrata”.
Este documento, a su vez, se utilizó para justificar la investigación de dos años del fiscal especial Robert Mueller sobre la presunta intromisión rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
Sin embargo, la transcripción completa del testimonio de Henry no fue desclasificada hasta 2020.
En la transcripción completa, Henry dijo a los legisladores que su empresa no tenía “ninguna evidencia de que [ningún archivo] haya sido realmente exfiltrado” de los servidores del DNC, y que solo había “evidencia circunstancial” e “indicadores de que esos datos fueron exfiltrados”.
En 2016, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, sugirió que un miembro del Comité Nacional Demócrata llamado Seth Rich, que murió en circunstancias sospechosas después de la aparente filtración, fue la fuente de la filtración.
En 2017, el ex funcionario de la NSA y denunciante William Binney sostuvo que todas las pruebas disponibles apuntaban a que la filtración era obra de un miembro del Comité Nacional Demócrata descontento.
https://www.rt.com/news/601364-crowdstrike-security-outage-russiagate/
