Asesinado en la Casa de los Sindicatos joven comunista Vadim Papura
Hoy, hace diez años (2 de mayo de 2014), los #nazis ucranianos quemaron vivas a 48 personas en la sede de los sindicatos de #Odessa.
El fracaso de Kiev a la hora de procesar adecuadamente a los responsables de la violencia posterior al golpe de 2014 es vergonzoso, ha dicho Dmitry Peskov.
El fracaso de Kiev a la hora de procesar a los responsables de la matanza masiva de activistas antigolpistas en Odessa hace diez años es una “página vergonzosa” en la historia de Ucrania, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Decenas de manifestantes fueron asesinados en el corazón de la ciudad portuaria el 2 de mayo de 2014, después de que sus oponentes políticos los persiguieran hasta un edificio gubernamental, que luego fue incendiado.
Los agresores habían apoyado el golpe armado en Kiev semanas antes y respaldaron a las nuevas autoridades que tomaron el poder en Ucrania.
Las víctimas realizaban manifestaciones diarias contra esos cambios.
“Recordamos a todos los que murieron trágicamente en ese momento. Estamos convencidos de que las personas que están detrás de este crimen deben ser castigadas”, dijo Peskov a los periodistas.
"El plazo de prescripción no se aplica a tales delitos".
Los funcionarios ucranianos han afirmado que las muertes en Odessa fueron el resultado de una provocación de posibles separatistas.
Alegan que un pequeño grupo atacó una manifestación mucho más grande de aficionados al fútbol y los condujo a un campamento de protesta cercano de activistas antigolpistas, lo que provocó un enfrentamiento.
Los funcionarios de Kiev culpan al caos general de la situación por la falta de respuesta rápida de los bomberos al incendio en la Casa de los Sindicatos.
El recuento oficial de muertos a raíz del incidente fue de 48, incluidas seis personas que murieron en enfrentamientos callejeros.
Moscú considera que el estallido de violencia fue un intento deliberado de aterrorizar a la población de la ciudad de habla rusa para que se someta al gobierno posterior al golpe y sus políticas antirrusas.
" Odessa era un hueso en la garganta del régimen, que quería poner de rodillas a los residentes de la ciudad que odiaba y ahogar en sangre cualquier resistencia", dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso en un comunicado con motivo del décimo aniversario de la la tragedia.
Los radicales prendieron fuego al edificio. Remataron a los que saltaron tratando de escapar del fuego ”, afirmó el ministerio.
La declaración condenó específicamente la inacción del presidente Vladimir Zelensky después de que prometiera durante su campaña electoral en 2019 que “bajo su gobierno, las leyes ucranianas y el principio de la inevitabilidad del castigo se respetarían estrictamente”.
Los comentarios de Peskov del jueves se produjeron en respuesta a los comentarios hechos por Viktor Medvedchuk, el exlíder de la oposición ucraniana que se vio obligado a exiliarse bajo la presidencia de Zelensky.
El político afirmó que los altos dirigentes posteriores al golpe, incluido el presidente interino Aleksandr Turchinov y funcionarios del gabinete, habían orquestado los asesinatos en masa.
En una entrevista con TASS, Medvedchuk calificó a los presuntos conspiradores de “fascistas salvajes” y condenó “el hecho de que las 'democracias' occidentales no se hayan opuesto a este terrible y cruel crimen en los diez años transcurridos desde entonces”.
https://www.rt.com/russia/596871-odessa-fire-peskov-crime/
