La Masonería, El Imperio Británico Y El Sionismo.

19/04/18.- En Managua Bandas Derechistas asesinan al Capitan de la Policia Jiltón Rafael Manzanares

El trabajo de Polonia es ser un "saboteador" de Estados Unidos en la UE

No importa quién dirige el gobierno en Varsovia; Lo que importa es quién realmente mueve los hilos.

Foto.- El viceprimer ministro polaco y líder del partido Ley y Justicia (PiS), Jaroslaw Kaczynski (C) y el primer ministro polaco Mateusz Morawiecki (3L) del partido Ley y Justicia reaccionan con sus partidarios en la sede del partido en Varsovia, Polonia, en octubre. 15 de septiembre de 2023

Por el director del programa del Club Valdai, Timofey Bordachev

El ascenso de Polonia en el firmamento político de la Unión Europea es en sí mismo una evidencia vívida de la importancia cada vez menor del bloque en los asuntos mundiales. 

Esto se ve en el papel meramente ceremonial que desempeña Bruselas en la discusión de casi todas las crisis contemporáneas y en su incapacidad para ofrecer una alternativa a la política estadounidense.

Desde su “ regreso a la familia europea”, Polonia ha desempeñado sistemáticamente el papel de saboteador en cualquier intento de fortalecer el bloque o de negociar con Rusia. En otras circunstancias, en el tipo de UE con el que París y Berlín soñaron hace 30 años, Varsovia habría seguido siendo un apéndice silencioso del tándem franco-alemán. 

El hecho de que el país desempeñe ahora un papel desproporcionado no sólo significa que los europeos occidentales han perdido la iniciativa, sino que también revela hasta qué punto la política del bloque se ha vuelto provinciana.

Para Rusia, lo que importa no es Polonia en sí, sino las nuevas condiciones en el juego geoestratégico que estamos jugando con Occidente. 

No nos importa qué partido estará en el poder en Varsovia porque cualquier gobierno allí no es más que funcional, cuya única forma de sobrevivir es representar los intereses estadounidenses y mantener la unidad transatlántica. 

Esto, por supuesto, corta de raíz cualquier esperanza de un orden europeo sostenible. Después de todo, la disposición estratégica de nuestra confrontación con Occidente siempre ha estado determinada precisamente por sus divisiones internas.

Si el nuevo gobierno polaco está formado por el partido Plataforma Cívica, que anteriormente estaba en la oposición, el país se enfrentará a una crisis de doble centro de poder, ya que un representante del antiguo régimen seguirá siendo presidente. 

Esto debilitará temporalmente el poder de la política exterior de Varsovia, provocando confusión y discordia. 

Por supuesto, no es imposible que sus patrocinadores estadounidenses se vuelvan más activos en el manejo de las contradicciones internas polacas en tales condiciones. En cualquier caso, la lucha con Rusia seguirá siendo un pilar que une a los políticos polacos, independientemente de sus otras posiciones.

El conflicto de Polonia con Alemania probablemente disminuirá por un tiempo, y las demandas de reparaciones de guerra quedarán fuera de la agenda por un tiempo. Se reducirá el grado de confrontación entre Varsovia y Bruselas por las diferencias de valores.

Sin embargo, es poco probable que la posición estratégica de Polonia como puesto de avanzada estadounidense dentro de la UE cambie seriamente. El cambio de poder en Varsovia tampoco conducirá a un cambio radical en su política hacia Ucrania. 

Además, es probable que un gobierno liberal resulte ser un socio más conveniente para las autoridades de Kiev. En cualquier caso, el territorio de Polonia seguirá siendo un punto de transbordo de armas y mercenarios que viajan desde Occidente a su vecino devastado por la guerra.

No deberíamos esperar que los liberales en el poder cumplan más los tratados respecto de las relaciones fronterizas en torno a la región rusa de Kaliningrado. Otro factor es que la militarización de la política exterior polaca puede volverse menos demostrativa.

La esencia seguirá siendo la misma, pero habrá menos gritos y menos declaraciones escandalosas. Sin embargo, no creo que el carácter extremista de los populistas de derecha de Ley y Justicia haya sido un problema para Rusia. Tampoco para Alemania, que es el segundo adversario más importante en política exterior de Varsovia. 

La realidad es que Polonia está demasiado insegura acerca de su supervivencia como para convertirse en un Estado verdaderamente soberano.

La historia independiente del país terminó a mediados del siglo XVIII. Dos intentos de revivirlo –entre guerras mundiales y bajo el régimen comunista– fracasaron. El Estado polaco actual es producto de circunstancias globales únicas resultantes de la victoria de Estados Unidos en la Guerra Fría. 

Y su futuro –bajo cualquier gobierno– depende de la continuidad de la presencia estadounidense en Europa. 

Por lo tanto, en la cuestión crucial que divide a Polonia y Rusia, y a Polonia y Alemania (si alguna vez se reaviva allí el deseo de independencia), el cambio de partidos e incluso de ideologías en Varsovia tiene poca importancia.

https://www.rt.com/news/585414-poland-election-us-control/

Related Posts

Subscribe Our Newsletter