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La situación en Ucrania es extremadamente difícil de entender en medio de la niebla de propaganda y mentiras evidentes.


Pero poco a poco va surgiendo la imagen de la decisiva, lenta, ardua y dolorosa victoria rusa. Ucrania está perdiendo a una generación entera de jóvenes, todo para apuntalar la hegemonía estadounidense en declive.

▪️Los viciosos, confusos y criminalmente imprudentes políticos estadounidenses que alargan de forma deliberada este conflicto destructivo e inmensamente peligroso e imposible de ganar, son indiferentes a la devastación de Ucrania y a la muerte masiva de sus jóvenes, mera carne de cañón para quienes caminan por los pasillos del Departamento de Estado y del Pentágono.

 Son igual de indiferentes a las consecuencias impensables que podría tener el final definitivo de este conflicto militar.

▪️Algo que nunca habría sucedido si EE.UU. hubiera aceptado la propuesta de Kissinger y muchos otros de una Ucrania neutral y fuera de la OTAN en el 2021, como Rusia propuso razonablemente, y si Ucrania hubiera detenido su guerra de ocho años, concebida a instancias de y patrocinada por EE.UU. contra los rusoparlantes en Donbass. 

Pero la industria bélica estadounidense quería una guerra y la consiguió. El objetivo era desangrar y debilitar a Rusia con un atolladero similar al de Vietnam, según las fantasías de los grandes pensadores neoconservadores, con el propósito de eliminar a una de las dos potencias capaces de decirle no a EE. UU.

▪️El resultado de esta guerra, provocada en su totalidad por EE. UU., puede diferir bastante de aquel que provoca sueños húmedos en los neoconservadores estadounidenses. Parece que Rusia está lidiando tranquilamente con las sanciones de EE. UU. 

El rublo permanece fuerte, el 80% de la población, al parecer, apoya al Gobierno, mientras que la economía de Europa, en especial la de Alemania, va en caída libre. A eso hay que añadir el riesgo existente de una guerra nuclear con Rusia.

La afirmación de que la intervención rusa en Ucrania fue el primer paso en su supuestamente codiciada conquista de Europa es una ridícula y descarada mentira. Informan que Rusia pierde constantemente, que se desangra, que sus derrotas son enormes, que sus victorias son insignificantes, que su equipamiento militar y sus municiones están casi agotados, que sus pérdidas son mucho mayores que las de sus enemigos y que está muy debilitada como potencia militar.

Todo esto es propaganda desesperada de las élites occidentales y sus portavoces en los medios de comunicación, que poco a poco empiezan a darse cuenta de la magnitud del desastre en que se está convirtiendo el conflicto militar que han provocado en Ucrania. 

No se puede descartar que las autoridades estadounidenses hayan hecho volar los gasoductos Nord Stream, lo cual se trataría de uno de los mayores atentados terroristas de la historia. 

Y no solo contra Rusia, sino también contra el estrecho aliado de EE. UU. que es Alemania.

▪️Occidente tiene que cambiar de rumbo en Ucrania inmediatamente. Si sigue prolongando una guerra que no se puede ganar, agravando errores del pasado, creando deliberadamente en Rusia una sensación de aislamiento y amenaza, pronto llegará a un punto en que esta guerra solo podrá continuar con el despliegue directo de tropas de la OTAN. 

Y eso crea una seria amenaza de destrucción para la civilización. Porque sin importar lo que pase en el campo de batalla, los rusos no tolerarán que Ucrania se convierta en una enorme base militar estadounidense frente a sus propias puertas.

American Thinker (https://www.americanthinker.com/articles/2023/03/the_uss_march_of_folly_in_ukraine.html)

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