CARTA PASTORAL DE PARTE DE DISTRITOS PASTORALES DEL CONSEJO NACIONAL DE PASTORES EVANGELICOS DE NICARAGUA CNPEN AL PUEBLODE NICARAGUA.
A TODO EL AMADO PUEBLO DE NICARAGUA, CATOLICOS, EVANGELICOS, AGNOSTI COS Y DEMA S HIJOS DE DIOS DE NUESTRA QUERIDA PATRIA.
"Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo, el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre, a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén." (Gálatas 1: 3-5).
Como pastores del pueblo de Dios, representantes de mas de 200 congregaciones de distintos barrios de Managua, hemos sido compelidos por el Espíritu de Dios a dirigirnos a la nación nicaragüense en momentos de confusión e incertidumbre y tristeza para la grey nicaragüense en general.
Son estos momentos de desafío, momentos de graves riesgos y peligros, pero con la esperanza puesta en el Redentor de la humanidad cuyo amor sobrepasa todo entendimiento, "Porque de tal manera amo Dios al mundo que dio a su hijo unigénito para que todo aquel que en el crea, no se pierda mas tenga vida eterna." (Juan 3:16).
Ante la presente coyuntura, llamamos a todo el pueblo de Nicaragua, a buscar con todos vuestros corazones al Señor de Señor es, aquel Verbo Hecho carne que habito entre nosotros, Jesús de Nazareth, a quien "...Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. "(Filipenses 2:9-11)
Con profundo dolor y tristeza hemos tenido conocimiento de las palabras pronunciadas por el papa Francisco en contra de nuestro presidente sobre disputas temporales de pecado que tienen que ver más con el reino de este mundo que con los negocios del Reino de Dios "en los negocios de mi padre, me es necesario estar" como le dijera el niño Jesús a sus padres que lo buscaban por todo Jerusalén (Lucas 2:49).
No somos jueces, ni pretendemos serlo, pero si es nuestro deber levantar nuestra voz pastoral y profética en estos tiempos de enormes retos y desafíos para nuestro pueblo. No podemos sustraernos de las palabras del Apóstol San Pablo, quien con voz ungida por el Espíritu de Dios nos dice: "El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor." (Romanos 13:10)
Constatamos el sufrimiento del pueblo de Nicaragua, causado por poderes temporales de pecado que según la profecía bíblica están claramente tipificadas en las Sagradas Escrituras en las profecías de Daniel y las visiones del discípulo amado, Juan de Patmos, hermano de carne de nuestro Señor.
Las visiones proféticas del libro de Apocalipsis nos hablan claramente de una bestia que sale del mar (Apocalipsis 13) lo cual hace ineludible concluir se trata de un formidable poder imperial que en el lenguaje figurado del Apóstol es presentado como bestia. De manera inequívoca, la profecía dice "que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre." (Apocalipsis 13: 17)
Igualmente, el capítulo 17 de Apocalipsis nos habla de una mujer sentada sobre muchas aguas ebria con la sangre de los mártires de Jesús, con la cual han fornicado todos los reyes y emperadores de la tierra.
Al respecto, el discípulo amado, Juan de Patmos dice:
"Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación; 5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES
DE LA TIERRA. 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús;" (Apocalipsis 17: 4-5)
Si las Sagradas Escrituras constituyen "la regla infalible de fe y conducta que nos guía de la tierra a los cielos" y gran parte de la Biblia esta dedicada a la profecía sobre los tiempos del fin, podemos concluir con la iluminación del Espíritu de Dios, que su Palabra no nos dejaría en la incertidumbre de conocer las poderosas maquinarias de pecado que mediante fuerzas económicas, militares y religiosas controlan hoy la suerte, la vida y la muerte de millones de seres humanos que no viven una vida digna, gracias a maquinaciones de los reinos de este mundo, actualmente bajo el control de Satanás, como se lo expreso el mismo Lucifer a nuestro Señor en el monte de la tentación:
"Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, 9 y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares." (Mateo 4:8).
Como pastores del pueblo de Dios, ese pueblo pobre y humilde que lucha diariamente de manera heroica para traer el pan a la mesa de sus hogares para alimentar a sus hijos, constatamos con profunda tristeza que gran parte de nuestras penurias económicas obedecen a factores humanos producto de conspiraciones imperiales que claramente apuntan a bestias apocalípticas, específicamente reveladas en Apocalipsis capitulo 13 y capitulo 17.
Frente a este sombrío panorama de un poder imperial todopoderoso que decide quien compra y quien vende en este mundo junto a otro poder satánico que decide quién entra o no entra al reino de los cielos, constatamos que el reto va mucho más allá de nuestras fuerzas humanas, como nos ilumina la Palabra de Dios por medio del apóstol San Pablo:
"Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes." (Efesios 6: 12).
La batalla por el control del alma de Nicaragua y su pueblo, es una batalla espiritual y ha de resolverse con armas espirituales. El fondo del problema no esta en la lucha por el poder entre el gobierno de Nicaragua y los opositores sustentados por fuerzas exógenes que históricamente han afligido al pueblo de Nicaragua por más de 10 generaciones.
El conflicto es el conflicto de los siglos, es la permanente lucha que desde tiempos de los profetas del Antiguo Testamento se libra en las regiones celestes como nos advirtió hace 3 mil años el profeta Moisés: "Por cuanto la mano de Amalee se levantó contra el trono de Jehová, Jehová tendrá guerra con Amalee de generación en generación. (Éxodo 17:16)
Nuevamente, Dios mismo por medio del apóstol Pablo, ese gigante del Nuevo Testamento nos exhorta:
"Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;" (Efesios 6:13-18).
La solución a nuestros problemas terrenales y espirituales jamás podrá provenir, ni de Washington ni de Roma, sino de aquel que dijo, "Yo he venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia." (Juan 10: 10).
Hacemos un llamado a toda la grey nicaragüense, católica o evangélica a buscar intensamente la gracia de Dios por medio de la oración intercesora, guiados por el libro de las generaciones, la Biblia, la palabra inspirada de Dios que nos convoca a usar esa arma secreta que tanto teme Satanás:
"Exhorto, ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad." (1ª Timoteo 2: 1-2).
Solo una poderosa intervención de Dios en la historia, manifestada mediante un grandioso despertamiento espiritual podrá sanar a nuestro país de las lágrimas, el dolor y la tristeza que afligen a muchas familias nicaragüenses.
Hoy renovamos este llamado, pedimos a los lideres espirituales de este país, abandonar estilos de vida que ofenden a los humildes. Que sigamos el ejemplo del carpintero de Nazareth que, teniendo todos los tesoros del universo, "y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz." (Filipenses 2: 8)
Recordamos con regocijo cristiano el mensaje profético de nuestro consiervo el pastor estadounidense, reverendo David Vicente Spencer que pronunció ante las autoridades de nuestro país: "Y si Dios con ustedes, quien contra ustedes?. Se les pueden interponer, pero no te vencerán. (El 19 digital, 23 de febrero 2018).
Estas fueron las palabras proféticas más seguras, sobre el futuro de nuestro país.
Esperamos ansiosos la Segunda Venida de Jesucristo, para intervenir con poder y gran gloria para derrotar al anti Cristo y al mismo Satanás y hacerlo prisionero por la eternidad "Y entonces se manifestará aquel inicuo, al que el Señor matará con el espíritu de su boca y destruirá con el resplandor de su venida. (2ª Tesalonicenses 2:8).
La contienda por el control del alma de Nicaragua y por el desenlace de los tiempos del fin, están predeterminados por la soberana voluntad de Dios. Evocamos las palabras del Dr. Billy Gram, el predicador norteamericano que le predico a mas de 200 millones de seres humanos en los 5 continentes:
"Ni el imperialismo, ni el comunismo tendrán la última palabra en la historia sino Dios."
Esperamos, que el Gobierno de Nicaragua honre y respete el artículo 14 de nuestra Constitución Política, el cual a la letra dice: "El Estado no tiene religión oficial". Pedimos al gobierno nicaragüense exonerar a los empleados estatales y militantes partidarios evangélicos de toda obligación de participar y/o promover actividades religiosas reñidas con nuestros principios bíblicos, siempre y cuando la persona así lo solicite. Pedimos no se tomen medidas disciplinarias contra dichos ciudadanos.
Encomendamos a nuestro pueblo en las amorosas manos de Dios con la petición a todo el pueblo de Dios a que nos arrepintamos de nuestros pecados y entreguemos nuestros corazones a aquel que dio su vida por nosotros, "Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio," (Hechos 3: 19)
En el Antiguo Testamento los profetas llamaron al pueblo a buscar a Dios de todo corazón, para que veamos la poderosa mano de Dios actuar en nuestra amada Nicaragua:
"sí se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra." (2 Crónicas 7: 14).
Que "La gracia del Señor Jesucristo, y el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén." ( 2ª Corintios 13:14).
Managua, 21 de marzo de 2023
