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Perú, Cecilia Túpac Amaru 1742 - 1783


Cecilia Túpac Amaru, prima hermana del caudillo, esposa de Pedro Mendiguri y madre del joven capitán rebelde Andrés Túpac Amaru

“Por causa de los corregidores ya no tenían lana en el pellejo en que dormir”

Cecilia Túpac Amaru, nace en el pueblo de Sicuani, Cuzco, el año de 1742, siendo su nombre original Cecilia Escalera; de niña fue trasladada a Surimana, donde fue criada y adoptada por Marcos Túpac Amaru y Marcela Castro, incorporándola así a la familia Túpac Amaru, siendo reconocida como Cecilia Túpac Amaru, prima hermana de José Gabriel Túpac Amaru. 

Muy joven se desposo con Pedro Mendiguri.

Cecilia Túpac Amaru, durante el levantamiento de Túpac Amaru II, fue un elemento importante en las tareas administrativas y de logística junto a Micaela Bastidas. Cecilia por su carácter ágil y alegre motivaba con gracia y picardía a las huestes indígenas para mantenerlos firmes y optimistas; aseguraba permanentemente expulsar definitivamente a los “pukacuncas” del Cuzco, refiriéndose a los españoles.

Las mujeres tuvieron roles cruciales en el conflicto, prueba de ello, es que junto a los cabecillas, esposos y familiares, fueron severamente castigadas. 

Micaela Bastidas, Marcela Castro y Titu Condemayta fueron condenadas a muerte atroz.

 A Cecilia Túpac Amaru a quien la exhibían desnuda le dieron públicamente 200 latigazos y fue sentenciada a diez años de exilio en México, murió en prisión antes de salir de Perú. 

Muchas otras mujeres fueron exiliadas, incluyendo a la madre de Túpac Amaru, quien murió durante el viaje.

Fue capturada tras la toma en Tinta por las tropas del Mariscal Joseph del Valle alcanzando en las punas que circundan al Alto Perú a lado de Micaela Bastidas y lugartenientes, llevados a Cusco fueron juzgados y sentenciados uno por uno, Cecilia tan escueta y firme respondía: "Lo confesado confesado y lo negado negado".

Fue encarcelada dos veces, sentenciada a 200 azotes públicos y a la de 10 años de destierro para servir gratuitamente en un convento de México previo envío al Real Felipe, que no se cumplió.

Los azotes se las dieron en las calles aledañas de la plaza, ella montada en burro tuvo que soportar la crueldad de las genocidas, ensangrentada y toda su ropa desgarrada, desfallecida, los verdugos arrojaron a su calabozo.

Meses después se pactó un armisticio en Lampa su hermano Diego Cristóbal Tupac Amaru y los invasores y la aguerrida Cecilia fue indultada antes de cumplirse el mes de ese convenio sin embargo no estaba de acuerdo con ese tratado de paz y de mentira.

El deseo de los virreinales era desaparecer toda esa familia y ascendencia que enarbolaba no solo justicia ni derechos de los pueblos, más que eso, aupaban una ideología de liberación de los carroñeros, dicho y hecho por azuzar y reflotamiento Tupac Amarista ha sido apresada y llevado de nuevo al calabozo donde un año después fue cruelmente vejada y asesinada, el 18 de abril de 1783.

Cecilia Tupac Amaru vive!.


SENTENCIA

[Sentencia pronunciada por el Visitador Areche contra la acusada. Julio 14, 1781].

En la causa criminal que se ha seguido de oficio de la Real Justicia contra Cecilia Tupa Amaro, por complicidad en la premeditada y ejecutada rebelión por el vil traidor Cacique en la Provincia de Tinta, José Gabriel Tupa Amaro, hallándose ésta en su compañía, criándose entre los de la familia y manifestado algún deseo de la felicidad, en las empresas del rebelde:

 Observados los términos del derecho en que ha hecho de acusador el Doctor Don Antonio Felipe Tapia, Abogado de la Real Audiencia de Lima, y de Defensor el Doctor Don Juan Munive y Mozo, Abogado igualmente de la misma Audiencia. 

Fallo atento a su mérito y lo que de ellos resulta, que debo de condenar y condeno a Cecilia Tupa Amaro en 200 azotes que le serán dados por las calles públicas de esta ciudad, en la forma acostumbrada y a diez años de destierro al Convento de Recogidas de la ciudad de México, para que sirva en los destinos que conforme a su sexo la ocupare la superiora de él, y en el interín se presente ocasión de ser conducida al dicho destino será llevada al Presidio del Callao, donde se mantendrá en depósito sin descuento, remitiéndose testimonio de esta sentencia a la enunciada superiora para que avise de su recibo y cumplimiento al Superior Gobierno de estos Reynos; e igualmente orden para que anualmente avise de la conducta de esta rea sin poder ponerla en libertad, aún pasados los diez años, sin expresa orden para ello. 

Así lo proveo y mando por esta mi sentencia definitivamente juzgando.

José Antonio de Areche (rubricado)

Copia del acta del proceso seguido contra Cecilia Tupac Amaru.

Escribe: Guido Amílcar Ancori Cervantes

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