La tercera fase de pruebas de la vacuna rusa Sputnik V contra el COVID-19 comenzará como máximo dentro de diez días, declaró el director del Centro Gamaleya, Alexandr Guíntsburg.
La investigación se llevará a cabo en la región de Moscú con la participación de decenas de miles de personas y durará entre cuatro y seis meses.
La vacuna se lanzará para la distribución civil dentro de un mes después de que comiencen los ensayos posteriores al registro, de acuerdo a Guíntsburg.
"Basado en el gran interés y atención del público y la prensa, creo que el Ministerio de Salud no se demorará y aprobará el protocolo para nosotros dentro de una semana.
Así que creo que dentro de siete, diez días a lo sumo, empezaremos... Varias decenas de miles participarán", aclaró Guíntsburg.
"La vacunación en masa se va a retrasar un poco, solo porque el grueso de las vacunas producidas se destinará al estudio posterior al registro.
El resto podrá usarse luego con fines civiles. Estamos hablando de dos a tres semanas de retraso, posiblemente un mes", puntualizó Guíntsburg.
De momento, se están encargando de poner remedio a la parte financiera porque "cuesta mucho dinero".
El director del Centro Gamaleya aseguró que la región de Moscú tiene toda la infraestructura necesaria para la investigación.
Los voluntarios de la tercera etapa de las pruebas no van a ser hospitalizados, sino que se someterán a todos los procedimientos necesarios de forma ambulatoria.
"Por supuesto, los voluntarios no serán hospitalizados con antelación. Todo el mundo irá y vendrá de su casa", señaló el científico.
El director del centro añadió que a los voluntarios les harán pruebas de sangre con regularidad: el primer día de la prueba, 21 días después de la vacunación y otros 21 días después de volverlos a vacunar. Guíntsburg aseguró que la tercera etapa sería más fácil que las dos anteriores.
La vacuna rusa se registró el 11 de agosto, así que fue la primera en el mundo en hacerlo. Su producción comenzó el 15 de agosto.