Es bochornosa en Nicaragua, la aparición de grupos de médicos con intereses políticos mezquinos que intentan llevar agua a su molino "político y golpista" en nuestro país.
Cuando la Pandemia mundial exige unidad en la acción, seres desalmados de la medicina se han acoplado para intentar entorpecer la aplicación de los protocolos regidos por el MINSA que actúa bajo los criterios de la OPS/OMS.
Lo mas indignante es que se presten, violando todo juramento hipocrático, a realizar audios, publicaciones, comentarios, tan falsos y mentirosos como sus supuestos deseos de ayuda al pueblo, al ciudadano.
Si tanto en verdad les preocupa, dejen sus cuarentenas y sus honorarios de las consultas privadas, y preparen las escuadras del ejército de batas blancas para actuar en caso de desborde de la situación sanitaria, lo que veo imposible ante la buena organización, disciplina y respuesta en la acción intersectorial que preside el gobierno y la ayuda exterior.
Con los escasos recursos de país pobre, del que se burlan los que lo han empobrecido con sus remilgos neoliberales, pues con estos escasos recursos, Nicaragua está lista y trabajando para todos los escenarios.
Y los médicos lengua larga y faltos de ética ¿están listos a salir a atender al pueblo? ¿O sólo es un solace político golpista más?
Cada médico tiene un número estatal que los acredita como galenos, ¿estarían dispuestos a perderlos por hacer daño a la salud pública?
Tomando de una enciclopedia informática, esta nos recuerda "La expresión latina "primum nil nocere o primum non nocere" que se traduce en castellano por "lo primero es no hacer daño".
Se trata de una máxima aplicada en el campo de la medicina, fisioterapia y ciencias en salud, frecuentemente atribuida al médico griego Hipócrates.
Señores sabios de la medicina golpista ¿están dispuesto a hacer daño?
Ya nadie les cree, pero no pierdan la brújula que luego serán desechados por la historia.
(Sobras de PES)