El asalto a la embajada de la República Popular Democrática de Corea
En la tarde del 22 de febrero de 2019 se produjo un asalto con rehenes, agresiones y robo en la embajada de Corea del Norte en Madrid, situada en la calle Darío Aparicio nº 43.
El edificio está a un kilómetro y medio de la sede del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), en la Avenida del Padre Huidobro s/n, esto resulta inoportuno.
Los asaltantes estuvieron al menos cuatro horas dentro de la embajada e hicieron rehenes al personal. Les amenazaron y maltrataron.
Cuando se marcharon se llevaron ordenadores y documentación. Esto parece un crimen organizado muy grave.
La Jefatura Superior de Policía de Madrid abrió un parte por las lesiones sufridas por una funcionaria coreana de la embajada, quien logró escapar y dar la voz de alarma.
Otras tres personas de la embajada fueron atendidas en ésta por equipos desplazados por el SAMUR (Servicio de Asistencia Municipal de Urgencia y Rescate de Madrid). Esto es sobrecogedor.
No ha habido explicación por parte del gobierno ni de otras autoridades sobre el asalto tras un mes de sucedidos los hechos, esto es abracadabrante.
Tampoco se escucha a los tres partidos de derecha, aunque a menudo ensalzan la soberanía nacional, la defensa de la patria, el ultraje a la bandera, etc. Esto es chocante.
Ni parlamentarios ni otros líderes se han manifestado al respecto. Esto es extraño.
Un delito tan grave ha pasado de soslayo en los medios, al contrario que una reciente pelea de bar en Alsasua. (1) Esto es insólito.
Seis días más tarde, el 28 de febrero de 2019, un grupo de coreanos publica en Internet una declaración titulada “¡Por un Joseon Libre!” (en el original inglés: “For a Free Joseon!”) (2)
“Hoy esa gran tarea (de liberación) sigue sin terminarse.
Millones de compatriotas coreanos permanecen esclavizados por un poder depravado, gobernados por unos pocos corruptos millonarios gracias al esfuerzo de muchos.
Mientras tanto construyen un poder de inimaginable destrucción, presentan una sonrisa y extienden la mano a los que no quieren ver que sólo con buenas palabras no se puede llevar a la rendición a un totalitarismo tan arraigado.”
A esto añaden una lista de agravios:
“Hambruna de millones, asesinatos ordenados por encargo del gobierno, violaciones sistemáticas, actos de terrorismo por todo el mundo, desarrollo y distribución de armas modernas de destrucción masiva con fines crueles, además de muchísimas maldades mezcladas.”
Posteriormente “declaramos esta entidad la única representante legítima del pueblo de Corea del Norte” y “nos entregamos completamente a la abolición de esta enorme maldad, una mancha en el alma misma de la humanidad.”
El resto es un batiburrillo compuesto con “la protección de los espíritus de miles de generaciones de antepasados” y la “declaración en el día de hoy del establecimiento de Free Joseon y de un gobierno provisional que prepare las bases de una futura nación”.
También animan a la población a que abandone al dictador y piden la ayuda de las naciones y la de los amigos de su causa en todo el mundo.
Finalmente hay un vídeo de 40 segundos con el título “ Breaking: Group called Cheollima Civil Defense claims they're protecting Kim Jong Nam's family” (Últimas noticias: El grupo llamado Defensa Civil Cheollima afirma que está protegiendo a la familia de Kim Jong Nam, el hermanastro del presidente coreano). (3)
En el vídeo aparece un joven que -en inglés- dice ser de la familia Kim y enseña un pasaporte, pero sólo la cubierta, o sea, sin dato alguno.
A continuación añade que su padre ha sido muerto hace dos días y que está con su madre y sus hermanas y muy agradecido, pero no se sabe dónde y a qué benefactor porque, como pasa con el pasaporte, esta vez se elimina el sonido desde el segundo 27.
Si tenemos en cuenta que la “Declaración por un Josean Libre” está fechada el día uno de marzo de 2019, dos años después del asesinato del padre, puede deducirse que Cheollima Civil Defense a lo mejor es un caso de ejército de liberación cuyo nombre es más abultado que su historial. Esto es atípico.
Veamos un caso opuesto: si se teclea Hezbollah en Internet, a pesar de los algoritmos aparecen 15 millones de páginas, pero si se teclea Cheollima, salen 37.000 y algunas se refieren a Chomilla (un caballo alado en China) y en algunos enlaces aparece Cheomilla junto a periódicos, foros de policías, foros de espías, etc.
Sin embargo, fuentes dignas de toda credibilidad y sin intereses espurios como The Washintong Post y The New York Times entre otros –y sus admiradores en España- han publicado que el asalto a la embajada de Corea del Norte en Madrid la noche del viernes 22 de febrero ha sido realizado por:
“Una organización disidente, consagrada al derrocamiento del líder norcoreano Kim Jong Un, está detrás del asalto de la embajada en Madrid el mes pasado, según fuentes conocedoras de los planes y ejecución de la misión.”
La Biblia (como algunos periodistas se refieren al NYT) presenta una prueba convincente: “El Post dice que el grupo no actuó en coordinación con ningún gobierno y que las agencias de inteligencia de Estados Unidos serían especialmente reacias a implicarse, dada la sensible fecha de la misión previa a la segunda cumbre entre Kim y el presidente Trump.”
Esto es lo que pasa cuando a los periodistas imperiales no se les exige el estudio del latín sino el del “Manual del perfecto periodista amante del Imperio que le da de comer”: Excusatio non petita, accusatio manifesta
Esos sepulcros blanqueados, como diría hoy San Mateo (23, 27-32), son responsables en las guerras de agresión junto con los gobiernos que las lanzan.
En tiempos del 11-S, Afganistán, Iraq, Libia, Siria, Ucrania, Nicaragua, Venezuela… esto es la libertad de prensa en el capitalismo.
¿Quién puede creer con esa única “prueba” que un grupo desconocido va a desplazar un comando de unas diez personas hasta Madrid para realizar un crimen bien planeado en un recinto especialmente protegido y varias horas después se va ir tranquilamente en coches de lujo con un botín?
Puesto que Trump y sus monaguillos en otros países occidentales se refieren habitualmente al presidente coreano con insultos y afirman que forma parte del eje del mal y que es un peligro para la humanidad, ¿no tienen nada que explicar a los españoles los servicios de inteligencia, ni los cuerpos y fuerzas de seguridad sobre el asalto a la embajada, especialmente cuando una patrulla de la policía nacional estuvo en ésta cuando se produjo?
Este asunto recuerda el episodio ocurrido cuando Gorbachev declaró que la guerra fría terminaba y en respuesta Estados Unidos instigó la confrontación entre sus buques de guerra y los de los soviéticos, lo que causó choques entre aquellos y problemas entre submarinos. ¿Por qué lo hacía? Porque Estados Unidos no tenía interés en terminar ese conflicto.
Ahora se plantea algo similar: Estados Unidos no tiene interés en crear un clima positivo conducente a la eliminación del conflicto.
Con la situación actual mantiene sus bases militares en Corea del Sur y al tiempo el control sobre ésta mientras sigue amenazando a la del Norte. Si se llega a un acuerdo, entonces las bases se vuelven inútiles y los coreanos pueden ignorar a los yanquis.
Peter Ford, ex embajador británico en Siria, explica –como Noam Chomsky y otros- que Estados Unidos no consiente países independientes que no sigan sus órdenes. Si le desafían entonces les fuerza a elegir entre un Guaidó, que dirigirá un sistema económico favorable a Estados Unidos, o los destruye:
Este asalto es un enorme insulto de Estados Unidos (buen amigo de España, decía Aznar) al Gobierno, Ministerio de Interior, CNI y a las fuerzas y cuerpos de seguridad.
Es tan enorme que también alcanza a los partidos que se presentan como patriotas pocos días antes de presentarse a las elecciones.
Lo ocurrido en la embajada de Corea del Norte es un capítulo más del interminable cuento que escriben entre los grandes imperialistas y sus vasallos fieles (de izquierda y derecha por igual): el de las bases militares de Estados Unidos en suelo español; el de sus aviones que hacen escala en aeropuertos españoles cargados de personas secuestradas para su reenvío a las cámaras de tortura de los campos de concentración en Guantánamo y otros lugares; el de otros aviones que despegan y de los buques de guerra –con armamento nuclear- que parten para atacar otros países que nunca han atacado ni amenazado a España; el de las presiones y amenazas para apoyar golpes en América Latina y otras tierras y votar a su son en Naciones Unidas…
Esto es una colaboración necesaria en el crimen contra la humanidad que es el imperialismo.
Mientras tanto muchos idolatran al imperio, su paradigma de democracia y libertad. Éstos son los papanatas y los paganos de la fiesta.
Notas:
(1) No hace ni dos años que “la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado penas de entre 62 años y 6 meses y 12 años y 6 meses de cárcel para ocho jóvenes como autores de la agresión a dos guardias civiles y sus parejas el pasado 15 de octubre en Alsasua (Navarra), a los que pide que indemnicen con 41.100 euros.
En el escrito de acusación por esta causa, el fiscal pide que a siete de los ocho procesados se les condene por cuatro delitos de lesiones terroristas y reclama 12 años y medio de cárcel por cada uno de estos delitos, lo que suma un total de 50 años”. Esto es inverosímil.
¿Qué condena espera entonces a los miembros de una banda organizada y presumiblemente armada que asalta una embajada, toma como rehenes a los funcionarios, los mantiene maniatados bajo amenaza de muerte durante al menos cuatro horas, les ocasiona lesiones y se marchan tras haber robado ordenadores y documentación?
Joseon es el nombre antiguo de Corea cuando era un imperio hace siglos. El documento de donde se han extraído las citas del grupo Free Joseon está en esa página de Internet en inglés y coreano. Es un documento que en papel ocupa dos folios y en el que no aparece ninguna información más sobre el grupo, el ejército de liberación, sus objetivos, historial… nada.
Llama la atención la fecha que aparece al pie de la declaración: “ Feb. 28, 2019, 3:01 p.m. UTC.” Además en su encabezamiento aparece esta otra: “03.01.2019”. El mes primero y el día a continuación es la forma de fechar en Estados Unidos
Sucinta historia del origen de la partición de Corea en dos naciones conocidas popularmente como Corea del Norte y Corea del Sur , es decir, República Popular Democrática de Corea y República de Corea, respectivamente:
Los autores de la declaración empiezan por decir que “hace cien años, el primero de marzo de 1919, que “nuestros ancestros hablaron de la autodeterminación de una Corea independiente y libre, para lo que llamaron a sus compatriotas a levantarse y derrocar un sistema opresivo sin sentido e intolerables indignidades. Arriesgando sus vidas anunciaron una nueva era de luz: una en la que hombres y mujeres estaban dotados de ciertos derechos inalienables y una nación justa y buena protegería y proporcionaría bienestar y felicidad a los coreanos en armonía con los ciudadanos de la Península.”
Con una redacción poética en lugar de con un programa político, parece que alguien está clamando por un poderoso padrino –¡adivina, adivinanza!- que saque del gobierno a Kim Jong-un, el presidente desde 2011 de la República Popular Democrática de Corea, para colocarle a él, lo que sugiere una versión oriental del cuento escrito entre Trump y Guaidó.
Ese sistema opresivo era el de Japón, que en 1910 se había anexionado el Imperio de Corea y por eso -nueve años después- la resistencia coreana se manifestó pacíficamente en contra. Japón sometió a los rebeldes y China los recibió y además apoyó un gobierno provisional en el exilio. Los coreanos establecieron por su parte el Ejército Revolucionario Popular de Corea.
Además de recibir ayuda militar de su protector, éste intentó convencer a Estados Unidos de que reconociese al Gobierno Provisional de la República de Corea y una Corea independiente, pero a aquél le convenía entonces –también hoy como ayer- dividir el país, una de sus especialidades en política exterior como se ha visto también en Europa, África, Oriente Medio y Asia, lo que a partir del Imperio Romano se conoce como divide et impera.
Con ese objetivo preparó la estrategia para que se crearan dos Coreas de facto, una bajo la influencia soviética y otra bajo la estadounidense, en definitiva argumentar que Corea no estaba capacitada para la soberanía. Es una de las tretas que usan a conveniencia las potencias coloniales según las circunstancias una y otra vez para justificar lo que verdaderamente son conquistas, expolios y aumento de su propio poder.
(3) “Las dos mujeres que asaltaron a Kim el 13 de febrero de 2017 en la terminal de salidas del aeropuerto de Kuala Lumpur, en una acción que Corea del Sur atribuyó a agentes norcoreanos y que fue registrada por cámaras de seguridad mantienen su inocencia y aseguran que creían que participaban en una broma para un programa de televisión cuando frotaron el rostro de la víctima con una sustancia que ellas creían inofensiva.”
https://www.rebelion.org/noticia.php?id=253999