La mañana del 29 de septiembre, los tanques del Ejército Ucraniano dispararon contra localidades situadas en la primera línea del frente en la República Popular de Donetsk.
Risas infantiles se escuchan ligeramente en la recientemente reabierta guardería Dyuimbochka de la localidad de Mineralnoye, en la línea del frente.
Los niños bailan con entusiasmo al ritmo de la música en la ceremonia de inauguración.
Los periodistas filman cómo el actual jefe de la administración de la zona de Yasinovataya cortaba la cinta roja a la entrada del edificio.
Nos encontramos a poca distancia del parque infantil con sus recientemente pintados columpios.
Al ver a personas de uniforme, un hombre mayor se acerca y explica cómo ha empezado esa mañana.
“Esta mañana han empezado a dar golpes pronto.
Los proyectiles han volado sobre el jardín.
Hace tiempo que no se oía algo así en Mineralnoye.
Ha caído algo potente en el distrito del kilómetro 71 en Yasinovataya o Spartak”, explica el vigilante de la guardería.
Así, mientras Donbass vive intentando recuperar todo lo que sea posible, el Ejército Ucraniano sigue, una y otra vez, bombardeando zonas civiles: niños, mujeres, personas mayores.
Pero nada, ni siquiera los bombardeos de esa misma mañana, puede interrumpir una fiesta para los niños.
El ataque de esa mañana:
“Entre las 6:00 y las 9:00, la parte ucraniana violó en ocho ocasiones el alto el fuego.
En el bombardeo masivo de tanques y mortero proveniente de Avdeevka, zona bajo control del Ejército Ucraniano, se vieron afectadas las localidades de Krutaya Balka, Vasilyevka, Yasinovataya, Yakovlevka, Mineralnoye y Spartak, en la línea del frente de la RPD.
El enemigo disparó 53 proyectiles de mortero de 82mm y 40 proyectiles de 120mm y 57 rondas de disparos de tanques con proyectiles de 125mm” [el armamento de calibre superar a 100mm debía haber sido retirado de la línea del frente en marzo de 2015 según los acuerdos firmados en Minsk en febrero de ese año-Ed].
Cerca del lugar en el que los residentes de Spartak reciben ayuda humanitaria, agua y pan, residentes locales se reúnen para, aún en shock, discutir el caos de esa mañana.
“Desde las seis de la mañana empezaron a llegar saludos de Ucrania, empezaron a disparar.
Yo salgo a las seis de la mañana para llevar a mi nieta al colegio.
Disparaban para que no pudiera abrir la puerta. Fuimos al sótano y nos quedamos ahí esperando diez minutos. Volvimos a salir y volvieron a disparar.
Ahora han dejado de disparar contra el pueblo”, explica Valentina, una residente local.
Una bomba del Ejército Ucraniano ha impactado contra una vivienda en el número 50 de la calle Octubre. Alrededor de la casa hay desperdigados fragmentos de metralla.
Ya sea por una feliz casualidad o por la experiencia de la población local en la guerra, los residentes han conseguido escapar ilesos.
A pocos kilómetros de Spartak se encuentra otra de las víctimas del fuego del Ejército Ucraniano: el poblado punto Donetsk-Severskiy.
Recientemente, el personal del Ministerio de Emergencias de la RPD ha limpiado la destrucción de lo que hasta hace poco fueran viviendas residenciales tras los daños causado por los bombardeos ucranianos.
Y una vez más, los residentes se han visto obligados a esconderse en sótanos para evitar los impactos de los tanques ucranianos.
A cien metros de un edificio residencial de cinco pisos encontramos restos de un proyectil y metralla de los impactos.
También un gran fragmento que no cabe en una mano.
En él hay también pequeños fragmentos de metal del cuerpo del proyectil.
Una docena de fragmentos están diseminados por el terreno.
El bombardeo de la localidad se ha realizado desde Avdeevka, bajo control ucraniano.
“Hoy, durante mucho tiempo, no podía salir para ir al trabajo.
La metralla de los proyectiles ha volado en dirección a las casas”, explica sobre lo ocurrido una de las trabajadoras de la tienda de alimentación, situada en la casa que ha resultado afectada.
La mujer explica que el Ejército Ucraniano ya había bombardeado el pueblo. Ahora, las tropas ucranianas no solo disparan en la oscuridad, sino que también lo hacen por la mañana cuando la población trata de salir de sus casas para ir al trabajo.
La situación militar en la República Popular de Donetsk es más que tensa.
Es difícil afirmar con seguridad qué ha provocado este nuevo pico de tensión en el frente, pero se puede esperar que todo empeore, ya que el 18 de octubre expira el periodo de vigencia de la ley de Ucrania “sobre el estatus especial de ciertas zonas de las regiones de Donetsk y Lugansk”, por lo que las Fuerzas Armadas de Ucrania serán libres para pasar a la ofensiva.
Es posible que se reanuden las hostilidades en un futuro próximo, especialmente teniendo en cuenta declaraciones recientes como la de Yarosh: “jugaremos en Minsk, pero después limpiaremos toda la suciedad en Donbass”.
https://slavyangrad.es/2017/10/01/a-pesar-de-los-bombardeos/