Tres conclusiones de cristina Kirchner para la argentina de hoy, en la noche del jueves del 25 de mayo más triste de las últimas décadas.
Anoche -jueves 25 de mayo- Cristina Kirchner fue entrevistada durante una hora y media en el canal del video C5N. La ex presidenta hasta fines del 2015, antes de la provocada gran crisis económica actual, convocó -anunciaron- 100 espectadores por internet y unos 700 mil en Buenos Aires, ciudad capital de Argentina, y Gran Buenos Aires (el conjunto de distritos y municipalidades que rodean a Buenos Aires).
Cristina Kirchner hizo TRES AFIRMACIONES CENTRALES, que deben poner en alerta y acción, aunque sea como autodefensa, a la ciudadanía argentina.
Tres afirmaciones centrales, a pesar de los desvíos e interrupciones de Sylvestre y, a veces, también Roberto Navarro, a punto tal que en un momento casi cómico uno de ellos la interpeló: “Bueno, ahora vamos a hablar de “política”?
A lo que la ex presidenta, con cara de “¡Qué pelotudo sos!”, le refregó: “¿¡Y de qué crees que estuve hablando hasta ahora!”.
Y sí, un verdadero pelotudo.
Bueno, los TRES PUNTOS:
1) En este último año y medio de gobierno se endeudó al país en 100 mil millones de dólares que volvieron a salir del país sin que se conozca quién los tiene y cuál ha sido su destino. Esos 100 mil millones no solo no fueron invertidos en Argentina en emprendimientos de producción que fabriquen, generen consumo popular y más trabajo y salarios, sino que se fugaron.
Ahora debe pagarlos el pueblo. En principio, con los fondos de jubilación, ya casi vacíos.
(¿Se dio cuenta de esta catástrofe el 51% que votó al electo a finales del 2015?, me pregunto. O a Stolbizer o que ahora habla de Massa (?).
Y cuando sufran la carencia, dentro de no mucho, servirá de algo. ¿Y para qué lado habrá de dispararse la disconformidad?)
2) Esa deuda, más la ya existente, ya alcanza niveles impagables. En el último año y medio de gobierno se tomó dinero de la ANSES, es decidir de los fondos de jubilación, para pagar los intereses y vencimientos de esa deuda fenomenal tomada sin saber para qué. O sea, en poco tiempo más, los jubilados dejarán de cobrar. (Esto último no lo dijo la ex presidenta, pero es una conclusión obvia.)
Cuando el dinero de los jubilados acumulado por los años de gobierno del kirchnerismo, dinero utilizado para pagar deuda externa tomada con fines no precisados, cuando esos fondos se acaben, para lo que falta poco, estallará una crisis social fenomenal.
Hay que tener en cuenta que gran parte de los ancianos jubilados, o jubilados a secas, votaron al electo a fines del 2015. Los servicios sociales a los jubilados ya se recortaron, hay menos beneficios. También las ayudas sociales, que eran -y son- criticadas por gran parte del 51% de los votantes del electo por considerar que “mantienen vagos”, cuando una simple visión humanitaria, O “cristiana”, por no decir peronista, determina que todo ser humano debe poder comer, vestirse, los niños ir a la escuela y tener derecho a curarse y ser atendido en salud.
3) La prioridad es la unidad de lo que puede llamarse espacio popular y nacional para frenar la política neoliberal conservadora retrógrada. Es decir, que todos los sectores, no solo el peronismo (?) deben unirse para parar la deuda externa, para analizar punto por punto lo ya endeudado, para decretar una emergencia alimentaria, otra emergencia farmacológica, y para empezar a abrir fábricas y entonces dar trabajo con salarios dignos, para lo cual hay que cobrar impuestos a los más ricos, reponer retenciones y parar las importaciones de casi cualquier cosa menos máquinas (bienes de capital). (Aclaro: a las retenciones ni las mencionó Cristina Kirchner).
Si se da esa unidad popular y nacional antineoliberal y anticonservadora, Cristina Kirchner dijo que podría aceptar -si se lo piden- proponerse de candidata. Pero si surge otro candidato que represente mejor y congregue más gente no tiene ningún problema en correrse y apoyarlo.
EN FIN, QUE TODO DEPENDE DEL PUEBLO, DE LA “GENTE”, ESTO ES, DEL ESPACIO POPULAR Y NACIONAL Y TODO EL QUE QUIERA ADHERIR PARA HACER ANTINEOLIBERALISMO Y ANTICONSERVADURISMO.
La entrevista se hizo en el programa “El Destape” que conduce el periodista Roberto Navarro. Lo secundaron Víctor Hugo Morales, quizás el periodista televisivo-radial más completo, culto y de más alta formación política y reflexiva de Argentina, más, Gustavo Sylvestre, de una medianía permanente. Un simple preguntador. Morales casi no habló. Es probable que, de modo deliberado, dejara el campo a sus dos colegas. Morales es una figura para la reflexión-entrevista a solas, mano a mano, profunda y serena.
Navarro, bien intencionado, es probable que se haya equivocado al apurar el vaivén de preguntas y respuestas. Cristina Kirchner debió repetir que le preguntaban y no le dejaban concluir las respuestas. Grave error periodístico, sobre todo si se trata de una figura política central de la que se esperan definiciones y, casi seguro, depende el futuro próximo del país.
Sylvestre, en un plano más simplificación de palabras y conceptos, trataba básicamente de hablar de listas, candidatos, personas. Kirchner replicaba una y otra vez que eso ahora no importa. Ahora lo central es explicar lo que están haciendo con Argentina y cómo ha de ser el futuro -seguramente doloroso y carenciado- del país, le replicaba la ex presidenta.
Cristina Kirchner no solo maneja información, sino que es una excelente estratega y hábil política. No puede mezclarse ni tiene punto de comparación -por superioridad- con el resto de los políticos argentinos, todos kilómetros más abajo que ella. La diferencia en box entre un campeón peso pesado y otro categoría mosca, lo más ligero, sin ninguna cualidad notable. (Aclaro: un mediocre, un don nadie de la mediocridad e imbecilidad, hoy puede llegar a altos cargos. Hay muchos ejemplos en el mundo. Si se lo piensa, también los hubo en el pasado, o siempre).
Hay algo que debe señalarse, insistirse sobre ello. La falta de formación política reflexiva intelectual, crítica de conocimiento, y aún de información e instrucción de la mayor parte de los periodistas argentinos, tal vez en gran parte del mundo.
Es la incidencia del Espectáculo y el Entretenimiento. Excluyo a Víctor Hugo Morales, una excepción.
Pero hay dos aspectos aún más graves: uno es la ausencia de sensibilidad y percepción para tener noción del otro, de los tiempos, de las pausas, de las preguntas en el momento preciso, del sentido del tiempo, el ritmo, el silencio y la reflexión o conclusión expuestas. Esto a veces suele aparecer en personas aún sin gran formación académica o sin especial instrucción institucional. Es una cuestión de inteligencia por sensibilidad y percepción. Los periodistas de televisión carecen de esta sensibilidad.
El otro aspecto, más que grave despreciable, y no me refiero a ninguno de los tres periodistas de “El destape” en el reportaje a Cristina Kirchner, es la repercusión nefasta que un periodismo como carrera mercantil, “profesional” del dinero, logra tener cada vez de modo más expandido en todo el periodismo que, en su forma actual, mercantilizada, hace y hará mucho daño y se destruirá solo o bien caerá junto con gran parte del mundo y de los humanos.
