El cosmódromo de Baikonur, desde el que Yuri Gagarin salió a conquistar el espacio, lanzará un servicio de viajes que permitirá a los amantes del cosmos conocer de cerca las instalaciones de este lugar.
Los visitantes podrán ver e incluso entrar en las famosas naves espaciales Soyuz, tocar con sus propias manos los trajes espaciales que usan los cosmonautas rusos y tomarse fotos en uno de los lugares más emblemáticos de la historia de la conquista del espacio.
En el futuro no se descarta la posibilidad de realizar viajes al cosmódromo Vostochni, la más moderna estructura espacial de Rusia.
El primer lanzamiento desde este lugar fue realizado con éxito el 28 de abril de 2016.
El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció la decisión de su país de usar del cosmódromo de Baikonur en Kazajistán más allá de 2050 cuando vence el contrato de arrendamiento.
"Hemos tomado una decisión respecto a su ofrecimiento para continuar nuestra cooperación en el ámbito espacial y seguir usando Baikonur", dijo Putin al dirigirse a su par kazajo, Nursultán Nazarbáev, en la cumbre de la Unión Económica Euroasiática (UEE) en Kirguistán.
El mandatario ruso señaló que su país corregirá en breve sus planes en el sector espacial, teniendo en cuenta la nueva base Vostochni en el Lejano Oriente, que se estrenó en abril de 2016 con el lanzamiento de un cohete Soyuz para poner en órbita tres satélites.
Rusia y Kazajistán tienen previsto varios lanzamientos conjuntos desde Baikonur y desde 2004 construyen el complejo espacial Baiterek para cohetes con tecnologías verdes.
En 2017 Roscosmos planea un total de 23 lanzamientos: 15 desde Baikonur, seis desde Plesetsk (norte de Rusia) y dos desde Vostochni.
La UEE que comenzó a andar en 2015 está integrada por Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán y Rusia.