En la última jornada tenemos las manifestaciones de los pequeños ahorristas en Kiev que se han quedado sin ahorros, motines en Vinnitsa, Nikolayevsk y Poltava relacionados con el aumento de las tarifas de servicios comunales y del costo de la canasta básica de alimentos.
En la ciudad fronteriza con Crimea - Chongar (Jerson) las autoridades han anunciado que cortan el servicio de agua caliente y calefacción (que proviene de Crimea) además de cortes sectoriales de la energía eléctrica lo cual está poniendo a la población al borde de motines y tumultos ante la aproximación de uno de los inviernos más fríos de las últimas décadas.
Paralelamente al severo deterioro económico y social que atraviesa la "nueva Ucrania", la agudización de la situación en el frente del Donbass es la manifestación de la política de huida adelante que lleva Kiev, poniendo así a la UE ante echos consumados, tratando de asegurarse el apoyo de la CE ante "el peligro ruso".
Es la política de agarrarse a un clavo ardiendo ante la imposibilidad de maniobrar tras casi 3 años del golpe de estado, guerra y crímenes (...).
El descontento de las fuerzas nazis con la "indefinición" de Poroshenko y la negra perspectiva de este invierno por un lado, y el reagrupamiento de las fuerzas oligárquicas en torno a la figura de Yulia Timoshenko que desafía al gobierno actual por "corrupto e inútil", minan considerablemente el margen de maniobra de Poroshenko.
Volver a entrar en el papel de victima nacional ante la "agresión rusa", es decir, repetir el viejo guion que le escribieron en el Departamento del Estado y el cuartel general de la OTAN- y que el mismo puso en práctica desde el día de su elección - es lo único que le queda.
Las preguntas claves son: ¿cuánto tiempo va a poder mantenerse a flote este gobierno? y ¿hasta dónde pueden aguantar las Repúblicas el continuo bombardeo de la artillería de Kiev antes de que esto comience a dar problemas internos serios?
Internacionalistas 36
Publicado por JM Álvarez