Ante un número creciente de ataques racistas en Alemania, los ministros del Interior de varios estados federados demandaron al gobierno nacional de la canciller federal, Angela Merkel, apoyar más decididamente el proceso para prohibir el fascista Partido Nacionaldemócrata Alemán (NPD).
“Lamentablemente ni el parlamento ni el gobierno federal han apoyado hasta ahora este proceso, lo que considero un grave error”, dijo el ministro del Interior de Renania Parlatinado, Roger Lewentz, del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD).
Según Lewentz, los 16 estados federados han presentado “material muy convincente” para probar la anticonstitucionalidad del NPD.
El ex presidente de la conferencia federal de los ministros del Interior espera que la solicitud de los estados para prohibir el NPD tendrá éxito.
También el titular del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, criticó la actitud del gobierno federal y del Bundestag, la cámara baja del parlamento alemán.
La conducta de estas dos instituciones “es lamentable”, dijo el socialcristiano, “pero no va cambiar nuestra posición”.
Mientras, el ministro del Interior de Sajonia-Anhalt, Holger Stahlknecht, dijo que “nadie puede explicar al contribuyente que el estado sigue financiando un tal partido con fondos recaudados”.
Según informaciones de la administración del Bundestag, el NPD recibió en el año 2014 alrededor de 1,4 millones de euros a base de la financiación estatal de los partidos.
La iniciativa de los estados federados para prohibir el NPD no es el primer intento.
Hace diez años, la primera tentativa para prohibir y disolver el NPD fracasó por la presencia de agentes de los servicios secretos en puestos directivos.
El Tribunal Constitucional federal decidió rechazar la solicitud por no poder decidir si actos criminales fueron cometidos por agentes de los servicios secretos o por funcionarios del partido.
PL