El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Mark Toner, cree que el informe de la Junta de Seguridad de los Países Bajos sobre el siniestro del vuelo MH17 de Malaysia Airlines valida la versión estadounidense sobre quién es el responsable del derribo del avión el 17 de julio de 2014, aunque los investigadores holandeses no digan nada al respecto.
Así lo demostró una reciente rueda de prensa de Toner, durante la que el periodista de AP Matt Lee le pidió detallar la afirmación de un comunicado difundido horas antes según el cual el informe corrobora "lo que el secretario [de Estado] John Kerry dijo originalmente hace más de un año".
En aquel entonces, recordó el comunicado, el jefe de la diplomacia estadounidense "dejó claro que EE.UU. detectó un lanzamiento de misil desde territorio controlado por separatistas en el momento del derribamiento y llamó la atención a las conversaciones interceptadas entre dirigentes separatistas jactándose de haber derribado un avión, inmediatamente después del trágico evento".
El periodista destacó que el informe neerlandés no acusa del derribo a ninguna de las partes del conflicto y que todavía sigue en curso otra investigación que busca determinar a los posibles responsables. "Entonces, ¿de qué manera puede confirmar su teoría, si ni siquiera conjetura quién podría haberlo hecho?", preguntó Lee.
"[En el informe] se dice que el MH17 fue derribado por un misil del sistema Buk lanzado desde el territorio controlado por las milicias", contestó Toner. "Esto es lo que declaramos desde el primer día". En una réplica Matt Lee observó que el Departamento de Estado no se limitó a determinar el supuesto lugar del lanzamiento, sino que acusó directamente a los milicianos prorrusos. Acto seguido Toner aceptó que el informe no inculpa a ninguna de las partes, pero que no obstante las autoridades estadounidenses no tienen dudas acerca de quién es el culpable.
El informe final de la Junta de Seguridad neerlandesa sobre el derribo que hace más de un año se cobró la vida de 298 personas ha sido publicado este martes. Según la conclusión de este grupo de expertos, el Boeing malasio fue impactado por un misil 9M38 lanzado por el sistema antiaéreo Buk desde el este de Ucrania. Aquel lanzamiento pudo producirse desde una superficie de unos 320 kilómetros cuadrados, especifican.
Este mismo día el consorcio de defensa antiaérea ruso Almaz-Antéi ha presentado su propio informe sobre el MH17, elaborado a partir de una base experimental. Según sus autores, las conclusiones de la junta neerlandesa sobre la clase de misil disparado y el lugar de lanzamiento son erróneas. Dos simulaciones del derribo efectuadas por Almaz-Antéi mostraron que la explosión se produjo a unos 20 metros del motor izquierdo de la aeronave y no frente a la cabina, y que el proyectil fue lanzado desde un área controlada por Kiev.