"Turquía está utilizando el ejemplo norteamericano"
Análisis de James Petras en CX36, lunes 27 de julio de 2015. Escuchar: http://www.ivoox.com/analisis-james-petras-cx36-lunes-audios-mp3_rf_5366566_1.html
Efraín Chury Iribarne: Podríamos comenzar con las relaciones de Canadá con Israel. ¿Es algo antiguo?
JP: Es algo más nuevo que viejo. Históricamente Canadá tuvo una posición más crítica a Israel que EEUU. Nunca tuvo una posición pro liberación de Palestina, pero tampoco eran apoyo incondicional de Israel.
Ahora, tres factores influyen en Canadá para volcarse a este abrazo con Israel. Primero, ha aumentado en los últimos 20 años el peso del poder económico y político de las organizaciones sionistas. Han penetrado particularmente el Partido Conservador y Liberal, pero también a los socialdemócratas con influyentes contribuidores a las campañas. Entonces, el primer factor que influye en Canadá es el aumento del poder de las organizaciones sionistas.
El segundo factor es que el gobierno conservador del Primer Ministro Stephen Harper ha tenido relaciones muy estrechas con los sionistas y a partir de eso ha aumentado su apoyo a Israel.
Y el tercer factor que influyó es que en Canadá existen organizaciones sindicales, organizaciones por el boicot y la desinversión en Israel, entre sectores universitarios y populares. Esa oposición de base ha tenido el efecto de detonar las actividades de los grupos más derechistas de la sociedad canadiense. Los sectores más reaccionarios están tomando posiciones que antes dejaban a los partidos.
Por tanto tenemos tres factores: el gobierno conservador, la enorme influencia de los ricos sionistas en la política y tercero, la actividad de los grupos derechistas en la sociedad canadiense. El conjunto de estos tres factores, han tenido el efecto de empujar a Canadá a imitar la política norteamericana.
EChI: El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, emitió duras palabras contra la Organización de Estados Americanos. Dijo que la OEA no sirve para nada, sólo sirve al imperio y al capitalismo. ¿Qué repercusión hay allí de estos dichos?
JP: Puede ser que haya repercutido entre los sectores más politizados; que haya sido repudiada por otros sectores como la derecha de los exiliados cubanos y los auto exiliados venezolanos. Pero la política norteamericana va ahora por otros instrumentos.
La OEA dejó de tener importancia, entonces Washington busca aumentar su influencia a partir de encuentros bilaterales, o instrumentos comerciales de libre comercio como el Trans Pacífico y otros. La OEA no tiene mucha importancia ahora en la política latinoamericana ni tampoco en la política norteamericana.
EChI: ¿En qué otros temas estás trabajando?
JP: Bueno son varios. Estamos en el año del 62 aniversario del asalto al Cuartel Moncada en Cuba, cuando los revolucionarios encabezados por Fidel Castro atacaron un cuartel de la dictadura de Batista. Y ayer, el 26 de julio, Raúl Castro ofreció un discurso sobre la importancia que tiene el fin del bloqueo económico y la devolución de la Base de Guantánamo colonizada por EEUU.
Esto es importante porque marca las limitaciones que tiene la reapertura de relaciones y embajadas entre Washington y Cuba. Todavía faltan los elementos más importantes, ya que sigue el bloqueo y la ocupación de territorio cubano en Guantánamo.
Y los cubanos han dicho que no tienen interés en la OEA y mucho menos someterse al embargo norteamericano. Entonces, debemos tener en cuenta que Cuba sigue siendo un país revolucionario que defiende su soberanía y ha entrado en estos acuerdos con Washington, con mucha defensa de sus intereses básicos.
El segundo tema que quiero comentar, es el ataque de Turquía contra los luchadores kurdos. Turquía ha declarado la guerra contra los kurdos, que están luchando por su independencia y combatiendo a los terroristas en Irak y Siria. Pero Turquía en cambio, con el pretexto de combatir al EI, ataca Siria, trata de ocupar territorio del norte sirio, llamándolo "cordón de seguridad".
Entonces, a partir de esta actividad supuestamente antiterrorista, el gobierno turco de Erdogan está lanzando una ofensiva contra Siria, contra los kurdos y con muchas detenciones de disidentes internos.
Hay más de 600 presos ya en Turquía entre disidentes y activistas que no tienen nada que ver con EI, pero Turquía está utilizando el ejemplo norteamericano de usar el antiterrorismo para lanzar guerras contra el gobierno sirio, contra los kurdos y contra los movimientos pro democracia en Turquía, con el respaldo de Washington y los países de la OTAN.
Entonces, el Medio Oriente –Turquía en particular- entran en un período de guerra que va a multiplicar los frentes de conflictos más allá de Siria e Irak, entrando en las regiones kurdas. Es una profundización del militarismo en la región.
El tercer tema que quiero tocar es lo que está pasando en Grecia, donde hemos visto que el gobierno de Syriza, un partido supuestamente de izquierda, firmó un acuerdo militar con Israel, ese estado genocida que oprime a los palestinos.
Syriza rompió una tradición griega de muchos años, que era el apoyo incondicional a la lucha por la liberación de los palestinos.
Ahora, este gobierno de Syriza que se autotitula izquierdista, está formando una alianza político – militar con Israel que va a apoyar las agresiones israelíes contra Siria e Irán. Es una ruptura total con todo lo que existía antes de Syriza.
Un partido que empieza a la izquierda y termina abrazando un régimen colonialista y racista, algo más que debemos tomar en cuenta.
Finalmente, tengo otros dos temas. Este fin de semana, las organizaciones y comunidades negras organizaron un gran congreso para discutir la violencia y la impunidad policial contra las comunidades afroamericanas e hispanos, particularmente contra personas de color.
Y mientras la conferencia avanzaba, la policía de Clyde, en Ohio, lanzaba una ofensiva tirando tóxicos y asaltando a los asistentes a la conferencia, que protestaban contra la violencia.
Esto es un indicio de la fuerza policial que tienen las autoridades y la total impunidad, la falta de respeto a las comunidades.
Es decir, los grupos buscan las formas de organizarse y mientras se están organizando y debatiendo, la policía los espera afuera y cuando salen los delegados del Congreso, son atacados. Si esto no es un estado policial no sé cómo llamarlo.
Por último, tenemos el problema de la crisis en Brasil que se está profundizando. Ahora podemos ver que toda la política neoliberal de Lula Da Silva y Dilma Rousseff, ha cosechado una serie de denuncias.
La popularidad de Rousseff ha caído al 9%. No creo que tenga ninguna posibilidad de continuar en el poder porque sus aliados de centro derecha están abandonando el barco que se hunde.
Es muy probable que la derecha esté esperando el momento adecuado para juzgar a Lula y una vez que empiece el proceso judicial, la próxima etapa será lanzar una campaña para buscar una forma de derrocar al gobierno de Dilma.
Y Dilma no tiene ninguna defensa porque las medidas económicas que ha aplicado han creado conflictos dentro del campo sindical y popular.
Entonces, atacados por sus aliados de la derecha, abandonados por sus aliados sindicales, es muy probable que el gobierno caiga dentro de los próximos meses o un año.
Eso va a resultar en una nueva elección y con pocas posibilidades de que el PT recupere su influencia.
Es el final del ciclo de Lula y el PT que buscó acomodar el capitalismo salvaje, el capitalismo que ha contaminado los recursos, deforestado las selvas, una política de acuerdo con el capital que no se puede sostener cuando la crisis económica empieza a afectar los precios de sus principales materias primas.
Es una lección para toda América Latina porque no se puede tener aliados capitalistas y mucho menos una política de dependencia de materias primas como fuerza motriz del crecimiento.
Extractado por La Haine
Efraín Chury Iribarne: Podríamos comenzar con las relaciones de Canadá con Israel. ¿Es algo antiguo?
JP: Es algo más nuevo que viejo. Históricamente Canadá tuvo una posición más crítica a Israel que EEUU. Nunca tuvo una posición pro liberación de Palestina, pero tampoco eran apoyo incondicional de Israel.
Ahora, tres factores influyen en Canadá para volcarse a este abrazo con Israel. Primero, ha aumentado en los últimos 20 años el peso del poder económico y político de las organizaciones sionistas. Han penetrado particularmente el Partido Conservador y Liberal, pero también a los socialdemócratas con influyentes contribuidores a las campañas. Entonces, el primer factor que influye en Canadá es el aumento del poder de las organizaciones sionistas.
El segundo factor es que el gobierno conservador del Primer Ministro Stephen Harper ha tenido relaciones muy estrechas con los sionistas y a partir de eso ha aumentado su apoyo a Israel.
Y el tercer factor que influyó es que en Canadá existen organizaciones sindicales, organizaciones por el boicot y la desinversión en Israel, entre sectores universitarios y populares. Esa oposición de base ha tenido el efecto de detonar las actividades de los grupos más derechistas de la sociedad canadiense. Los sectores más reaccionarios están tomando posiciones que antes dejaban a los partidos.
Por tanto tenemos tres factores: el gobierno conservador, la enorme influencia de los ricos sionistas en la política y tercero, la actividad de los grupos derechistas en la sociedad canadiense. El conjunto de estos tres factores, han tenido el efecto de empujar a Canadá a imitar la política norteamericana.
EChI: El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, emitió duras palabras contra la Organización de Estados Americanos. Dijo que la OEA no sirve para nada, sólo sirve al imperio y al capitalismo. ¿Qué repercusión hay allí de estos dichos?
JP: Puede ser que haya repercutido entre los sectores más politizados; que haya sido repudiada por otros sectores como la derecha de los exiliados cubanos y los auto exiliados venezolanos. Pero la política norteamericana va ahora por otros instrumentos.
La OEA dejó de tener importancia, entonces Washington busca aumentar su influencia a partir de encuentros bilaterales, o instrumentos comerciales de libre comercio como el Trans Pacífico y otros. La OEA no tiene mucha importancia ahora en la política latinoamericana ni tampoco en la política norteamericana.
EChI: ¿En qué otros temas estás trabajando?
JP: Bueno son varios. Estamos en el año del 62 aniversario del asalto al Cuartel Moncada en Cuba, cuando los revolucionarios encabezados por Fidel Castro atacaron un cuartel de la dictadura de Batista. Y ayer, el 26 de julio, Raúl Castro ofreció un discurso sobre la importancia que tiene el fin del bloqueo económico y la devolución de la Base de Guantánamo colonizada por EEUU.
Esto es importante porque marca las limitaciones que tiene la reapertura de relaciones y embajadas entre Washington y Cuba. Todavía faltan los elementos más importantes, ya que sigue el bloqueo y la ocupación de territorio cubano en Guantánamo.
Y los cubanos han dicho que no tienen interés en la OEA y mucho menos someterse al embargo norteamericano. Entonces, debemos tener en cuenta que Cuba sigue siendo un país revolucionario que defiende su soberanía y ha entrado en estos acuerdos con Washington, con mucha defensa de sus intereses básicos.
El segundo tema que quiero comentar, es el ataque de Turquía contra los luchadores kurdos. Turquía ha declarado la guerra contra los kurdos, que están luchando por su independencia y combatiendo a los terroristas en Irak y Siria. Pero Turquía en cambio, con el pretexto de combatir al EI, ataca Siria, trata de ocupar territorio del norte sirio, llamándolo "cordón de seguridad".
Entonces, a partir de esta actividad supuestamente antiterrorista, el gobierno turco de Erdogan está lanzando una ofensiva contra Siria, contra los kurdos y con muchas detenciones de disidentes internos.
Hay más de 600 presos ya en Turquía entre disidentes y activistas que no tienen nada que ver con EI, pero Turquía está utilizando el ejemplo norteamericano de usar el antiterrorismo para lanzar guerras contra el gobierno sirio, contra los kurdos y contra los movimientos pro democracia en Turquía, con el respaldo de Washington y los países de la OTAN.
Entonces, el Medio Oriente –Turquía en particular- entran en un período de guerra que va a multiplicar los frentes de conflictos más allá de Siria e Irak, entrando en las regiones kurdas. Es una profundización del militarismo en la región.
El tercer tema que quiero tocar es lo que está pasando en Grecia, donde hemos visto que el gobierno de Syriza, un partido supuestamente de izquierda, firmó un acuerdo militar con Israel, ese estado genocida que oprime a los palestinos.
Syriza rompió una tradición griega de muchos años, que era el apoyo incondicional a la lucha por la liberación de los palestinos.
Ahora, este gobierno de Syriza que se autotitula izquierdista, está formando una alianza político – militar con Israel que va a apoyar las agresiones israelíes contra Siria e Irán. Es una ruptura total con todo lo que existía antes de Syriza.
Un partido que empieza a la izquierda y termina abrazando un régimen colonialista y racista, algo más que debemos tomar en cuenta.
Finalmente, tengo otros dos temas. Este fin de semana, las organizaciones y comunidades negras organizaron un gran congreso para discutir la violencia y la impunidad policial contra las comunidades afroamericanas e hispanos, particularmente contra personas de color.
Y mientras la conferencia avanzaba, la policía de Clyde, en Ohio, lanzaba una ofensiva tirando tóxicos y asaltando a los asistentes a la conferencia, que protestaban contra la violencia.
Esto es un indicio de la fuerza policial que tienen las autoridades y la total impunidad, la falta de respeto a las comunidades.
Es decir, los grupos buscan las formas de organizarse y mientras se están organizando y debatiendo, la policía los espera afuera y cuando salen los delegados del Congreso, son atacados. Si esto no es un estado policial no sé cómo llamarlo.
Por último, tenemos el problema de la crisis en Brasil que se está profundizando. Ahora podemos ver que toda la política neoliberal de Lula Da Silva y Dilma Rousseff, ha cosechado una serie de denuncias.
La popularidad de Rousseff ha caído al 9%. No creo que tenga ninguna posibilidad de continuar en el poder porque sus aliados de centro derecha están abandonando el barco que se hunde.
Es muy probable que la derecha esté esperando el momento adecuado para juzgar a Lula y una vez que empiece el proceso judicial, la próxima etapa será lanzar una campaña para buscar una forma de derrocar al gobierno de Dilma.
Y Dilma no tiene ninguna defensa porque las medidas económicas que ha aplicado han creado conflictos dentro del campo sindical y popular.
Entonces, atacados por sus aliados de la derecha, abandonados por sus aliados sindicales, es muy probable que el gobierno caiga dentro de los próximos meses o un año.
Eso va a resultar en una nueva elección y con pocas posibilidades de que el PT recupere su influencia.
Es el final del ciclo de Lula y el PT que buscó acomodar el capitalismo salvaje, el capitalismo que ha contaminado los recursos, deforestado las selvas, una política de acuerdo con el capital que no se puede sostener cuando la crisis económica empieza a afectar los precios de sus principales materias primas.
Es una lección para toda América Latina porque no se puede tener aliados capitalistas y mucho menos una política de dependencia de materias primas como fuerza motriz del crecimiento.
Extractado por La Haine