PL – Las autoridades federales estadounidenses acusaron a 14 personas de cometer fraude migratorio a partir de los beneficios únicos que otorga la Ley de Ajuste Cubano (LAC) de 1966 a los inmigrantes de la isla caribeña.
Estos individuos -seis de ellos de origen cubano- en su mayoría residen en el estado de Florida, y son sospechosos de fraguar matrimonios falsos y de otros delitos graves cometidos desde diciembre de 2009 hasta julio de 2014 para evadir las leyes de Estados Unidos.
Según el fiscal adjunto Robert Emery, quien está a cargo de la investigación, los acusados reclutaban ciudadanos cubanos elegibles para la residencia permanente en Estados Unidos, gracias a las provisiones de la LAC, y coordinaban dichos matrimonios con extranjeros, quienes pagaban por el servicio.
Si se demuestra su culpabilidad, los involucrados pudieran enfrentar penas de hasta 20 años de cárcel y posibles procesos de deportación tras cumplir sus sentencias.
Una declaración publicada en la página en Internet del Departamento de Justicia, señala que los sospechosos exigían a los extranjeros un pago para notarizar licencias matrimoniales falsas y completar la documentación migratoria exigida.
También preparaban a sus “clientes” para las entrevistas con funcionarios del Servicio de Inmigración y Ciudadanía.
Estos arrestos sirven como recordatorio de que el sistema de inmigración legal de Estados Unidos no está en venta y trabajaremos de forma agresiva para investigar y llevar ante la justicia a quienes pretendan vulnerar su integridad, señaló Alysa Erichs, agente especial de los servicios de inmigración y aduanas en Miami.
La LAC, promulgada el 2 de noviembre de 1966, establece que cualquier ciudadano cubano puede regularizar su situación migratoria luego de permanecer un año en territorio estadounidense.
En 2013, unos 30 mil cubanos se acogieron a los preceptos de la CAA, considerada por las autoridades de la nación caribeña como el principal estímulo a la emigración ilegal desde la mayor de las Antillas.
Durante su reciente visita a Cuba el 14 de agosto pasado, el secretario de Estado, John Kerry señaló que el Gobierno norteamericano no tiene en su agenda pedirle al Congreso la eliminación de la LAC, a pesar de que La Habana y Washington coinciden en la necesidad de establecer una emigración legal, segura y ordenada.