Los legisladores hispanos del Congreso de Estados Unidos continúan este jueves la presión sobre el presidente Barack Obama para que responda sobre el tema migratorio.
Una de las iniciativas será aprobar este jueves una resolución en la que además de expresar su decepción le exigen a Obama tomar acciones “lo más pronto posible” tras la celebración de los comicios de medio término del próximo 4 noviembre.
El documento solicita que el gobernante otorgue al menos los alivios migratorios para impedir la “innecesaria deportación de inmigrantes que no son criminales pero que tienen raíces profundas, familiares y bienes en las comunidades” de este país.
Para el legislador demócrata por Illinois Luis Gutiérrez es un erro cualquier demora en ese sentido.
La semana pasada el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Denis McDonough, informó en una reunión con el Caucus que Obama tomará medidas antes de que terminen los días festivos.
Obama dijo que en cuanto a inmigración tendrá que gobernar por decreto, apelando a sus poderes, por la falta de acuerdo en el Congreso, en particular proveniente de la oposición republicana.
En los últimos días el presidente ha ocupado la mayor parte de su tiempo a la agenda exterior, a causa de la anunciada amenaza que supone para la seguridad nacional el grupo radical Estado Islámico (EI), según Washington.
Desde 2008 Obama prometió recomponer el roto sistema de inmigración del país si llegaba a la mansión ejecutiva, pero dos años antes de finalizar su segundo mandato no ha logrado concretar una reforma migratoria integral en un escenario en el cual hay más de 11 millones de inmigrantes sin papeles y unos 60 mil niños que viajan solos a través de la frontera sur.
Además se suman las expulsiones de inmigrantes que rondan los dos millones desde 2009 hasta la fecha, lo que le ha valido a Obama el calificativo aquí de “deportador en jefe”.
(Tomado de agencias)
