Mar Caso Fontecilla, nos dejó este comentario que por su importancia y actualidad lo subimos aquí Es terrible, a estas horas – 20/07/2014 las 23:22 horas- los muertos en Gaza superan la cifra de 418, el 77% son civiles y uno de cada cinco asesinados es un niño.
Jose Maria García Mauriño/Juan Santiso
Una vez más, los aviones israelíes bombardean al pueblo palestino en la franja de Gaza. Modernos drones -aviones no tripulados- lanzan bombas que no distinguen entre miembros de la resistencia, mujeres, ancianos o niños.
Además, Netanyahu llevó a cabo un ataque con tropas terrestres la franja de Gaza, para lo que ha movilizado a 40.000 reservistas. Las primeras victimas fueron cuatro niños que se encontraban jugando al futbol, en la playa. Con su cinismo habitual, los sionistas llaman a estos crímenes “Operación Margen Protector”.
Ya no se sabe qué adjetivos ponerle a este Estado: genocida, terrorista, imperialista y fascista sin límites, todo es poco. Es fácil poner adjetivos.
Es mejor no entrar en ambigüedades, ni citar declaraciones de la ONU: En la conferencia islámica de apoyo a Gaza, la hipocresía mundial se luce una vez más. ¿De dónde viene la impunidad con que Israel está ejecutando la matanza de Gaza? Qué vergüenza.
La resistencia palestina contra la ocupación está legitimada.
Y no por tribunal alguno, sino por un derecho mucho más fuerte que el derecho internacional: la legitimidad de los oprimidos para liberarse, de la opresión contra un pueblo que tiene derecho a tener un territorio para existir, para llevar una vida digna. Israel solo aceptará cumplir un justo acuerdo cuando la comunidad internacional le muestre que el precio de no tener paz es más alto que el de tenerla.
Para ello, la solidaridad internacional de los movimientos sociales y su actividad en las redes, deben jugar un papel decisivo como lo están haciendo ahora.
Desmontando mentiras: La verdadera razón de la movilización de los judíos ortodoxos en Nueva York no fue condenar los bombardeos Quizás movidos por los deseos más que por la realidad en varios medios de comunicación y en las redes sociales se acogió con alborozo que decenas de miles de judíos ortodoxos se manifestaran en la ciudad de Nueva York en contra de la guerra y los bombardeos sobre Gaza.
Lamentablemente no fue así, se trataba de una movilización en contra de una ley que tiene en cartera el gobierno de Israel para que los residentes en el exterior tengan que servir sobre el terreno al ejército sionista. No es lo mismo.
Países y ciudadanos del mundo solidarios: #PazParaPalestina
Ya sabemos lo que significa a nivel histórico que unos colonos sionistas sean secuestrados.
O que la resistencia lance cohetes caseros para defenderse de la agresión israelí que viene padeciendo desde hace más de medio siglo. Más justo será recordar que, contando solo desde el año 2000, las balas israelíes han matado a más de 1.500 niños palestinos.
Que en Gaza viven 1, 7 millones de palestinos en 350 kilómetros cuadrados, de los cuales 1,2 millones fueron expulsados de sus tierras (lo que ahora es el sur del Estado de Israel).
Que viven bloqueados, con un 40% de paro y un 14% de sus niños sufriendo desnutrición aguda.
Que, como cualquier persona decente tendrá que admitir, desde 1948 (e incluso antes) no hay en esa tierra otro agresor que los sionistas.
Por eso, Israel debe tener cuidado de que su intento de una segunda Nakba (en árabe significa catástrofe, calamidad o desastre), no se convierta en una tercera Intifada. Sin embargo, para que esto sea posible, es necesaria la táctica, la clarificación política.
Es menester señalar que los activistas del Frente Popular para la Liberación de Palestina, Yihad islámica, Hamás, fueron los que, con ejemplar coherencia, rechazaron siempre la farsa de los acuerdos de Oslo (1993, Gobierno provisional palestino aceptado por Israel). Ahora, cuando las agresiones se producen siempre dentro de las fronteras anteriores a 1967, el tiempo les ha dado la razón.
No así la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que siempre los ha sometido a persecuciones.
Ello facilitó la demonización que de Hamás extendió y propagó Israel, a través del lobby más poderoso del mundo, sobre todo en los Medios de Comunicación, llegando a culpabilizar al pueblo palestino por haberles votado en las elecciones que les permite gobernar en Gaza.
http://periodicodigitalwebguerrillero.blogspot.com/2014/07/israel-provoca-el-holocausto-palestino.html