Mientras Occidente se aferra desesperadamente a las riendas del FMI y del Banco Mundial, parece lógico que los países del BRICS apuesten por crear organismos económicos alternativos, afirma el experto en mercados financieros Patrick L. Young.
Como buen árbitro de las finanzas públicas, el FMI fue tiempo atrás muy temido por políticos derrochadores, apunta el analista en su blog.
Sin embargo, agrega, en los últimos años el organismo ha pasado a ser un ente politizado, que ha perdido de vista sus objetivos originales.
Desempeñó un papel clave, junto con el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo, en el restablecimiento del orden de Europa tras el colapso de la Unión Soviética, pero en la actualidad su labor es bien distinta.
"EE.UU. y Europa han mantenido un dominio absoluto sobre los gerentes de primer nivel del FMI y el Banco Mundial, no solo en vista de un renacimiento masivo del este, sino también con cierto grado de hipocresía despreciable dada la pésima gestión financiera de los gobiernos estadounidenses que han despilfarrado durante décadas y de la jocosa gobernanza económica europea llevada a cabo recientemente", subraya Young.
Por eso, las naciones que integran el bloque BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), cansadas de esperar una reforma del sistema de voto dentro del FMI, avanzan hacia un verdadero nuevo orden mundial.
Según el experto, sería lógico "crear un contrapeso al FMI", algo así como un banco supranacional para esas naciones del este que están emergiendo. Deberá mantener el gasto público bajo control y ser capaz de aplicar las políticas que se requieren en economías de Estados fallidos como el de Ucrania.
Sin embargo, por encima de todo, el Fondo Monetario de los BRICS necesitará lograr un equilibrio para poder operar "sin estar motivado por el temor o el favoritismo", indica Young.
De acuerdo con el coordinador del Ministerio de Exteriores de Rusia en BRICS y G20, Vadím Lukov, los países del BRICS han logrado importantes avances en la creación de una estructura que servirá como alternativa al FMI y al Banco Mundial. De hecho, la Fundación de las Reservas de Divisas de los BRICS y el Banco de Desarrollo de los BRICS deberían empezar a funcionar en 2015, señala.
El FMI debería comportarse como un doctor, pero no lo hace"EE.UU. y la UE insisten en convertir las instituciones financieras supranacionales ya establecidas en vehículos para la gestión del declive en la eurozona y en otros lugares, en lugar de imponer las políticas necesarias para reparar los gobiernos fallidos y restablecer el crecimiento", recalca el analista.
Lo que el FMI realmente necesita son tecnócratas fuertes y no políticos débiles "que trabajen con un pie ya metido en la siguiente decisión política", asegura Young en su blog.
Asimismo, agrega, lo que el FMI debería estar haciendo es "comportarse como un buen médico, asegurándose de que el paciente tome sus medicinas y adopte las reformas requeridas […] y no ofreciendo a un alcohólico vodka con poco alcohol y diciéndole que continúe bebiendo.