Un equipo de investigadores de las universidades de Carolina del Norte y Duke (EEUU) y la Universidad de Oxford (Reino Unido) ha descubierto que reducir la cantidad de cobre en el cuerpo puede ayudar a la ralentización en el crecimiento de algunos tipos de tumores, como e lmelanoma.
Para el estudio, los científicos utilizaron ratones de laboratorio modificados genéticamente con una mutación que incluía el gen BRAF, un gen que elabora la proteína B-RAF, que participa en el envío de señales en las células y en el crecimiento de éstas.
El gen puede activarse y mutar en muchos tipos de cáncer, como el de pulmón. Los mismos ratones fueron modificados genéticamente también para que carecieran de una proteína que transporta el cobre en las células.
Los investigadores querían comprobar si mermar los niveles de cobre podía mejorar la supervivencia.
Los resultados no pudieron ser más alentadores: reducir el nivel de cobre en los ratones modificados genéticamente provocó una disminución del crecimiento de las células cancerosas.
De hecho,los ratones sobrevivieron un 15% más de tiempo que los ratones con un nivel normal de cobre en su cuerpo.
De la misma forma, los ratones a los que les fue administrado un fármaco para controlar los niveles de cobre también consiguieron disminuir el crecimiento de las células cancerosas.
Las conclusiones del trabajo, publicadas en la revista Nature, demuestran que los medicamentos diseñados para reducir la cantidad de cobre en el organismo (como para tratar la enfermedad de Wilson) podrían ser capaces de reducir el crecimiento de tumores que tienen una mutación en el gen BRAF.
Sin embargo, este tratamiento también tendría consecuencias negativas, ya que la deficiencia de cobre provoca entre otras cosas anemia y también una mayor vulnerabilidad a las infecciones.
La granada contiene elementos que inhiben el movimiento de las células cancerígenas y reducen la metástasis, evitando la expansión del cáncer, según revelaba un reciente estudio realizado en la Universidad de California.
Según un estudio de la Universidad de Rutgers (EE UU), beber café e incluso aplicarlo directamente sobre la piel es eficaz para prevenir el cáncer de piel, ya que la cafeína inhibe una proteína llamada ATR que, al ser neturalizada, lleva a la destrucción de las células dañadas por los rayos ultravioletas tras una excesiva exposición al sol.
Al igual que los huevos, la leche tiene propiedades anticancerígenas por su alto contenido en vitamina D. Además, se ha descubierto recientemente que la leche materna, además de fortalecer el sistema inmunológico del bebé, previene tumores infantiles agresivos gracias a dos de las proteínas que contiene (TRAIL y “Hamlet”).
Las últimas investigaciones han revelado que los extractos de ciruela y melocotón ayudan a destruir las células del cáncer de mama, incluso a las más agresivas, sin dañar a las células sanas, lo que abre las puertas a nuevos tratamientos de quimioterapia sin efectos
Científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad Marshall en Estados Unidos demostraron que tomar un puñado de nueces al díareduce el riesgo de padecer cáncer de mama por su alto contenido en ácidos grasos omega-3, antioxidantes y fitosteroles
La clave está en su elevado contenido en isotiocianatos. Esta sustancia, también presente en el repollo y la coliflor, elimina la proteína del gen p53 defectuoso que provoca el crecimiento anormal de las células.
Según una investigación llevada a cabo por la Universidad Long Island(EE UU), uno de los componentes del orégano, el carvacrol, induce apoptosis o muerte celular programada en las células tumorales de la próstata. Esta superespecia tiene además propiedades anti-inflamatorias y actúa como antibiótico.
El licopeno, presente en el tomate fresco y sus derivados, ha demostrado su capacidad para inhibir la proliferación celular, al tiempo que posee un efecto anti-carcinogénico y anti-aterogénico, al intervenir en la comunicación intercelular y modular los mecanismos inmunológicos.
Según un estudio del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona, tomar huevos es eficaz contra el cáncer de colon. La vitamina D presente en este alimento impide que actúe la beta-catenina,una proteína clave en la transformación de las células en cancerígenas.
No obstante, este efecto solo se produce durante la fase inicial del cáncer, que es cuando el receptor encargado de procesar la vitamina se encuentra todavía presente en las células.
De acuerdo con un estudio reciente, los hombres que beben alrededor de cuatro copas de vino tinto a la semana reducen en un 50% el riesgo de contraer cáncer de próstata. Este efecto se debe al antioxidante resveratrol, que reduce los niveles de hormonas masculinas, como la testosterona, que estimulan el crecimiento tumoral.
http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/eliminar-el-cobre-del-organismo-puede-retrasar-el-cancer-191397211774?utm_source=Cheetah&utm_medium=email_MUY&utm_campaign=140417_Newsletter