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Reino Unido, acusado de crímenes de guerra en Irak



El Reino Unido ha sido acusado ante la Corte Penal Internacional (CPI) de crímenes de guerra durante su intervención en Irak. Un grupo de activistas y de abogados quiere traer a exfuncionarios británicos al tribunal La Haya para responsabilizarles por presunto abuso sistemático de iraquíes.


Políticos y exfuncionarios del Gobierno británico podrían ser llamados a juicio en La Haya por crímenes de guerra. Una demanda ha sido interpuesta ante la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos abusos cometidos por tropas británicas entre 2003 y 2008 durante la invasión a Irak.

La solicitud, interpuesta por el Centro Europeo por Derechos Humanos y Constitucionales con sede en Berlín y por los abogados de Interés Público en Reino Unido, incluye 250 páginas en las que se acusa a tropas británicas de cometer actos como tortura con fuego, descargas eléctricas, amenazas de muerte y violaciones sexuales contra iraquíes.

Entre esos altos funcionarios a los que quieren responsabilizar está el General Sir Peter Wall, actualmente jefe del ejército británico. También se menciona al exsecretario de Defensa, Geoff Hoon, y al exministro de Defensa, Adam Ingram.

El Gobierno ha rechazado este intento de traer a juicio a figuras políticas y militares.

El ministro de Relaciones Exteriores, William Hague, ha dicho que estas acusaciones ya han sido abordadas, bien sea a través de investigaciones públicas o a través de las cortes británicas, y que se han reconocido algunos casos aislados de abuso, en los que se han ofrecido disculpas y compensación. Pero el Gobierno rechaza las denuncias de abuso sistemático.

Activistas, sin embargo, dicen que esto va más allá de un incidente aislado y que aquellos quienes estuvieron a cargo en el Gobierno, tienen un caso que responder.

La Corte Penal Internacional (CPI) históricamente ha investigado crímenes de tiranía en África; ahora, tiene en frente denuncias contra el quinto Ejército más poderoso del mundo, el de un país de primer mundo y que se proclama defensor de los derechos humanos, como lo es Reino Unido.

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