Los colonos israelíes han incendiado este miércoles una mezquita en Cisjordania ocupada en el marco de sus repetidos actos de violencia contra los palestinos.
Según fuentes oficiales locales, colonos israelíes han prendido fuego en la entrada principal de la mezquita y han pintado eslóganes racistas en las paredes del edificio.
Sin embargo, los residentes han logrado apagar las llamas antes de que se extienda al interior de mezquita, según informa Ghassan Douglas, encargado de los archivos de los asentamientos de la Autoridad Palestina en Cisjordania.
El acto vandálico ha tenido lugar horas después de que varios colonos apedrearan un vehículo del Ministerio de Salud del Estado palestino cerca de la ciudad cisjordana de Nablus y, como consecuencia, varios de los trabajadores que viajaban en el coche resultaron heridos.
El ministro palestino de Salud, Jawad Awad, ha tildado la agresión de “bárbara y atroz" cometida en el marco de "los actos de la ocupación y acciones inhumanas, que son rechazadas por todos los acuerdos y principios internacionales".
Los colonos israelíes realizan este tipo de brutales actos con el propósito de obligar a los palestinos a abandonar sus hogares, una medida paralela a la política expansionista del régimen de Tel Aviv.
Sin embargo, la comunidad internacional, en particular la Organización de las Naciones Unidas (ONU), califica de ilegal la construcción de los asentamientos israelíes, acto prohibido según las Convenciones de Ginebra.
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