DAMASCO (AGENCIAS).- El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) lanzó este jueves la mayor campaña en sus 67 años de existencia, en busca de donaciones, para brindar asistencia humanitaria a por lo menos cinco millones de niños atrapados en la guerra interna que afecta a Siria
El organismo internacional ha constatado a través de comisionados que cuatro millones de niños han sido desplazados de las provincias donde se producen bombardeos y enfrentamientos que requieren ayuda humanitaria, así como otros 1,1 millones desplazados a los países vecinos.
De otro lado, la fuerza aérea gubernamental puso fin a una tregua acordada el día de Navidad con los rebeldes y reanudó este jueves los bombarderos por duodécimo día consecutivos a los barrios de la ciudad de Alepo, donde permanecen atrincherados los fuerzas de los rebeldes secundadas por mercenarios islámicos extranjeros.
Según el balance del Observatorio Sirio de Derechos Humanos(OSDH), una ONG con sede en el Reino Unido, del 15 al 24 de diciembre incluidos, murieron en los enfrentamientos entre los dos bandos un total de 410 personas, entre ellas 117 niños, 34 mujeres, 30 rebeldes y 9 yihadistas del Estado Islámico en Irak y el Levante (EIIL)".
La reanudación de los últimos bombardeos ejecutados el miércoles y jueves fueron hechos contra los barrios Sajur y Jabal Badro, localizados al este de Alepo, mientras que la localidad de Nakrin fue objeto del lanzamiento de barriles de TNT contra Nakrin,para eliminar a fuerzas rebeldes que permanecen confudidos entre la población civil.
Los "barriles de explosivos" utilizados contra los rebeldes, están fabricados con metal y con una capa de cemento en su interior, están llenos de TNT y son lanzados desde helicópteros y aviones militares.
Este tipo de artefacto explosivo no cuenta con un sistema de guía, por lo que son menos precisos, razón por lo cual "consiguen un máximo de destrucción y de muertos", según el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
La tregua rota este jueves con combates en Muadamiyat al Sham, al suroeste de Damasco, seguidos de bombardeos, había sido acordada en la víspera por el régimen y el comité local de la ciudad, asediada desde hace un año.
El acuerdo había entrado en vigor el miércoles, en el marco de la cual los habitantes aceptaron izar la bandera del régimen en las cisternas de agua de la ciudad durante tres días como gesto de buena voluntad, según explicó a la AFP Abu Malek, responsable del consejo local de la ciudad.
De inmediato, la oposición acusó al ejército leal al presidente sirio, Bashar al Asad, de haber roto el alto el fuego. "Abrieron fuego sin motivo con metralletas pesadas. Esto significa que hay miembros del régimen que se niegan a levantar el asedio", explicó a la AFP un militante de la ciudad.
Por su parte, una Comisión General de la Revolución Siria, una red de militantes presente sobre el terreno, confirmó los combates y anunció que el ejército había enviado "importantes refuerzos" hacia la ciudad.
Los barriles con explosivos, en Alepo, también fueron lanzados sobre el barrio de Hanano (este), mientras que un bombardeo intenso fue ejecutado sobre Daret Eza, una localidad de esta provincia, según el OSDH.
La Unión Europea, Estados Unidos y la Liga Árabe condenaron estos bombardeos y Human Right Watch los calificó de "ilegales".
Abu Omar, un militante de la localidad de Marea, cerca de Turquía, explicó a la AFP a través de internet lo que suponen los ataques con barriles de explosivos que se producen desde el 15 de diciembre. "Cuando comienza, tienes la impresión de que vas a morir en el próximo segundo", dijo.
Respecto al llamado lanzado por la UNICEF para prestar asistencia humanitaria, voceros de este organismo expresaron:"Actualmente, consideramos que cuatro millones de niños requieren ayuda humanitaria dentro de Siria, además de los 1,1 millones que viven fuera del país como refugiados".
El vocero indicó que se necesitan 835 millones de dólares para financiar sus operaciones dentro de Siria, lo que representa un incremento del 77 % en relación a lo previsto hace un año.
Este llamamiento se agrega a otro de carácter regional lanzado recientemente por la ONU para Siria, así como los países vecinos que acogen a la gran mayoría de refugiados: Líbano, Jordania, Irak, Turquía y Egipto, para los cuáles se requiere una cantidad mayor ascendente a los 6.500 millones de dólares.
Según los datos con los que trabaja Unicef, 14 millones de niños en el mundo están atrapados en tres crisis graves: en Siria, en la República Centroafricana y en Filipinas; en este último caso, debido a la destrucción que provocó el tifón Haiyan.
Con los fondos que obtenga para Siria, el organismo de la ONU tiene previsto vacunar, en las próximas semanas, a 25 millones de niños contra varias enfermedades dentro de Siria y en los países vecinos.
Esta campaña de inmunización es considerada vital tras el rebrote de la poliomielitis, una enfermedad que se consideraba erradicada en Siria y de la que se han confirmado últimamente 17 casos.
A través de distintas acciones, Unicef también pretende ayudar a 4,5 millones de niños a reanudar su escolaridad, ofrecer atención a 2 millones de menores que sufren del trauma de la violencia y dar acceso a agua potable a 11 millones de personas en Siria.
Contrincantes desoyeron pedido del Papa
La reanudación de las hostilidades en Siria se ha producido inmediatamente después de que el Papa Francisco impartió el día de Navidad desde la plaza de San Pedro su primera bendición"Urbi et Orbi" (a la ciudad y el mundo), en la que pidió "se ponga fin a la violencia en Siria y se garantice el acceso a la ayuda humanitaria" a ese país.
"Sigamos rezando al Señor para que el amado pueblo sirio se vea libre de más sufrimientos y las partes en conflicto pongan fin a la violencia y garanticen el acceso a la ayuda humanitaria", clamó el papa desde el balcón de la basílica San Pedro.
Rusia y Siria firman contrato petrolífero
En medio de las hostilidades, el ministro de Petróleo sirio, Sleiman Abas, la Compañía General Siria de Petróleo y la empresa rusa Soyuzneftegaz firmaron un importante acuerdo de prospección petrolífera, que prevé explorar 2.190 km2 en aguas de Siria.
Según el número uno de la empresa siria, Ali Abas, Damasco nunca había firmado un contrato de prospección para petróleo y gas de este tipo.
Rusia, uno de los principales apoyos para el régimen de Bashar al Asad, impulsa junto con Estados Unidos la realización de la conferencia de paz llamada Ginebra 2 que habrá de celebrarse el mes próximo en esta ciudad de Suiza.