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Los ataques a la ciencia sobre cambios climáticos dificultan soluciones.

 
Muchos medios de comunicación son cómplices de los esfuerzos por socavar la evidencia científica.

A finales de septiembre, el Grupo Intergubernamental de expertos sobre el cambio climático lanzó su quinto informe de evaluación y un resumen en tres capítulos. Para no quedarse atrás, quienes estaban inconformes desataron una reprimenda de ataques diseñados para desacreditar a la ciencia antes de su lanzamiento. 
 
Se esperan más reclamos.

Muchos medios de comunicación son cómplices de los esfuerzos por socavar la evidencia científica. Artículos de opinión contraria se dan a conocer en publicaciones de Canadá y alrededor del mundo, desde el Financial Post y el Washington Post hasta the Australiany the U.K.’s Mail del domingo.

En the Guardian, los científicos Dana Nuccitelli y John Abraham, señalan que los ataques cubren cinco etapas de negación climática: negar el problema existente, negar que somos la causa, negar que es un problema, negar que podemos resolverlo, y afirmar que es demasiado tarde para hacer algo.

Un ataque que está llamando la atención de medios de comunicación, es el denominado Panel Internacional no Gubernamental sobre el informe del cambio climático que “reconsideró el cambio climático II: La ciencia física”. 
 
Está escrito por Fred Singer, un defensor del sector tabacalero conocido negativista del cambio climático, con Bob Carter y Craig Idso, también conocido por desestimar estudios legítimos, y publicado por el Instituto Heartland, una ONG estadounidense conocida por defender los intereses de la industria tabacalera y producción de combustibles fósiles. 
 
El año pasado Heartland hizo titulares para comparar las personas que aceptan la abrumadora evidencia científica de este fenómeno de origen humano con terroristas y criminales como Unabomber Theodore Kaczynski.

Lee el informe de Singer, si lo deseas. Pero está lleno de reclamos que desacreditan las quejas por emisiones de dióxido de carbono que son buenos para estimular la vida. 
 
No es la meta de negadores e inconformistas para contribuir a nuestra comprensión del cambio climático; ellos quieren promover empresas de combustibles fósiles y otros intereses industriales, un punto explícitamente expuesto en el Heartland-NIPCC de noticias.

En el informe reclama Singer, que no es revisado por expertos, proveyendo a gobernantes con “la evidencia científica que necesitan para justificar poner fin a la expansión de fuentes ineficaces de energía alternativa y otras estrategias inútiles y costosas para controlar el clima. Entonces ellos pueden centrarse en apoyar nuestras fuentes de energía más poderosas: carbón, petróleo, gas natural, nuclear, y la hidroelectricidad — para acabar con el flagelo de la pobreza energética que afecta a más de mil millones de personas en todo el mundo”.

En otras palabras, no hay que preocuparse del cambio climático, sin mencionar la contaminación que daña la salud, o el hecho de que los combustibles fósiles se harán cada vez más difíciles de extraer y finalmente serán agotados totalmente. 
 
Y aunque montañas de pruebas sólidas sobre el cambio climático alrededor del mundo las más devastadoras son y seguirán siendo para la gente más pobre del mundo, el informe finge la preocupación por los que sufren de “pobreza de energía”.

En general, los ataques a la legítima ciencia del clima vienen de personas cuyos argumentos han sido desacreditados en muchas oportunidades y que a menudo tienen vínculos con la industria de combustible de fósiles. 
 
Algunos, entre ellos Roy Spencer y Ross McKitrick, firmaron la declaración de Cornwall, que establece: “Creemos en la Tierra y sus ecosistemas — creados por el diseño inteligente y poder divino de Dios y sostenido por Su fiel Providencia— son robustos, resistentes, autorregulados y auto-correctivos, admirablemente adaptados para el florecimiento humano y exponiendo Su Gloria. El sistema climático de la Tierra no es una excepción”.

La declaración también afirma, “existe evidencia científica convincente que aporta al efecto invernadero humano de gases que está causando el calentamiento peligroso”, y que las energías renovables no deben utilizarse para sustituir combustibles fósiles. 
 
Su visión mundial no puede aceptar la realidad del cambio climático o sus soluciones sin que importe cuánta evidencia se proporciona — algo que ofende a mucha gente de fe que cree que todos tenemos la responsabilidad de cuidar la Tierra.

El informe IPCC, por el contrario, es una revisión de toda la ciencia disponible sobre el cambio climático, llevado a cabo por cientos de expertos de todo el mundo.
 
 Se confirma que está ocurriendo, que quemar combustibles fósiles es la causa mayor y que se pondrá peor si no actuamos. También examina lo que parece ser una leve disminución del calentamiento global, pero ciertamente no se detiene, como afirman quienes lo niegan, y de ello se ofrece explicaciones científicas. Próximos capítulos también propondrán soluciones.

Resolver el problema del cambio climático va a costar, pero será mucho más caro que seguir el Consejo derrotista de cómplices de la industria, cuya codicia y falta de atención para la humanidad condenará a nuestros hijos y nietos a un futuro incierto.

Escrito con contribuciones del Gerente de comunicaciones de la Fundación David Suzuki Ian Hanington.

Artículo original de lagranepoca.com

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