"Da asco la mitad de Buenos Aires", el cantante rosarino Fito Páez para calificar a los ciudadanos que votaron el domingo pasado.
"Hace tiempo que lo vengo sintiendo. Es difícil de diagnosticarse algo tan pesado.
Pero por el momento no cabe otra".
"Aquí la mitad de los porteños prefiere seguir intentando resolver el mundo desde las mesas de los bares, los taxis, atontándose cada vez más con profetas del vacío disfrazados de entretenedores familiares televisivos", señaló haciendo alusión a Mauricio Macri pero sin nombrarlo.
Luego asevera que "a la mitad de los porteños le gusta tener el bolsillo lleno, a costa de qué, no importa" y agrega que "lo que esa mitad está siendo o en lo que se está transformando, cada vez con más vehemencia desde hace unas décadas, repugna".
La elección a jefe de gobierno en la que ganó en primera vuelta -por cerca de 19 puntos- Mauricio Macri (Pro) frente al candidato de la Casa Rosada, Daniel Filmus (FPV) dejó muchas heridas.
Entre ellas, parece, la de algunos artistas que directamente atacaron con duras y polémicas palabras a los votantes porteños.
"Da asco la mitad de Buenos Aires", escribió en la contratapa del diario Página/12 el cantante rosarino Fito Páez para calificar a los ciudadanos que votaron el domingo pasado.
"Hace tiempo que lo vengo sintiendo. Es difícil de diagnosticarse algo tan pesado. Pero por el momento no cabe otra".
"Nunca estuvo más lejos de ser esa ciudad deseada por todos.
Hoy hecha un estropajo, convertida en una feria de globos que vende libros igual que hamburguesas, la mitad de sus habitantes vuelve a celebrar su fiesta de pequeñas conveniencias", comienza el polémico artículo de Páez.
Luego asevera que "a la mitad de los porteños le gusta tener el bolsillo lleno, a costa de qué, no importa" y agrega que "lo que esa mitad está siendo o en lo que se está transformando, cada vez con más vehemencia desde hace unas décadas, repugna".
"Hablo por la aplastante mayoría macrista que se impuso con el límpido voto republicano, que hoy probablemente se esconda bajo algún disfraz progresista, como lo hicieron los que 'no votaron a Menem la segunda vez', por la vergüenza que implica saberse mezquinos", sostuvo el cantautor.
"Aquí la mitad de los porteños prefiere seguir intentando resolver el mundo desde las mesas de los bares, los taxis, atontándose cada vez más con profetas del vacío disfrazados de entretenedores familiares televisivos", señaló haciendo alusión a Mauricio Macri pero sin nombrarlo.
"Siento que el cuerpo celeste de la ciudad se retuerce en arcadas al ver a toda esta jauría de ineptos e incapaces llevar por sus calles una corona de oro, que hoy les corresponde por el voto popular pero que no está hecha a su medida", dijo calificando a la actual gestión en la ciudad.
"Buenos Aires quiere un gobierno de derechas. Pero de derechas con paperas.
Simplones escondiéndose detrás de la máscara siniestra de las fuerzas ocultas inmanentes de la Argentina, que no van a entregar tan fácilmente lo que siempre tuvieron: las riendas del dolor, la ignorancia y la hipocresía de este país.
Gente con ideas para pocos. Gente egoísta. Gente sin swing.
Eso es lo que la mitad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires quiere para sí misma", cerró.