El Gobierno venezolano alertó sobre la intención del presidente estadounidense, Barack Obama, de impulsar "el surgimiento de un Pinochet" en Venezuela, valiéndose de la crisis postelectoral que vive la nación latinoamericana.
Este sábado en cadena nacional de radio y televisión, el canciller venezolano, Elías Jaua, leyó un comunicado en el que manifestó la “indignación” de Venezuela por las declaraciones que hizo Obama durante su visita a México, donde dijo que “el hemisferio completo está viendo la violencia, las protestas, y los ataques a la oposición” venezolana.
“Causa indignación en el pueblo venezolano, que afirme de manera falaz” que el hemisferio completo está viendo el “ataque” de que es “víctima” la oposición en Venezuela, dijo Jaua. “Presidente Obama, sus declaraciones alientan el surgimiento de un Pinochet (a través del apoyo brindado al ex candidato opositor Henrique Capriles)”, agregó.
Venezuela ejerce ampliamente libertades y derechos que la sociedad estadounidense está aún lejos de alcanzar”
En sus afirmaciones el presidente estadounidense también manifestó que hay informes que prueban que Caracas no observa los principios básicos de “derechos humanos, democracia, libertad de prensa y libertad de reunión”.
En respuesta, el jefe de la diplomacia venezolana señaló que en su país “hay un total y absoluto respeto por los derechos humanos de todos”, y que el “pueblo de Venezuela ejerce ampliamente libertades y derechos que la sociedad estadounidense está aún lejos de alcanzar”.
“Su declaración falaz, destemplada e injerencista, no ayuda a mejorar las relaciones bilaterales, por el contrario, las conducen a un mayor deterioro, que solo confirma ante el mundo la política de agresión que usted y su Gobierno mantiene contra nuestra nación”, sentenció el canciller.
Por su parte el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, describió a Obama como el “jefe mayor de los diablos” y lo responsabilizó de la violencia “planificada” registrada en Venezuela en los últimos días.