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El bloqueo de Cuba: crimen y fracaso

Sobre asesinatos permitidos y ‘listas rojas’.

“La información es poder. Pero como todo poder, hay aquellos que quieren quedarse con él.” Aaron Swartz, ciberactivista, cofundador de Reddit.

Desde asesinatos de individuos que representan una espina en la maquiavélica mente de la élite dominante del mundo, hasta matanzas masivas perpetradas por sujetos con supuestos problemas mentales. 
 
En este artículo analizaremos algunas de las causas y causantes que sujetarían los hilos con una mano amenazante y sangrienta, provocando y permitiendo la muerte de ciudadanos seleccionados tanto en el plano colectivo como individual, perpetrando “sacrificios necesarios” para mantener en marcha su agenda.

La frase que Ud. leyó al principio resume la causa de todo lo que va a leer a continuación. 
 
En la era de la comunicación actual, la información se ha vuelto un valioso tesoro, y gracias a Internet el público tiene acceso a algunas monedas del cofre que la contiene. 
 
Recientemente políticas restrictivas como S.O.P.A. y P.I.P.A., fracasaron a la hora de intentar restringir el acceso a cierta información de la red con el pretexto del copyright reclamado constantemente por las multimillonarias compañías discográficas y cinematográficas.
 
 No obstante, se logró dañar la filosofía liberal de Internet, creando la paranoia en los principales portales de acceso a información masiva, lo que desembocaría inevitablemente en la censura a la que es sometido el usuario común en la actualidad.

Prodigios como Aaron Swartz, entre otros, colaboraron con la resistencia a este tipo de políticas de censura, por ejemplo a través del proyecto Demand Progress
 
Amigos del cartel de la censura y restricción en Internet, como la “Motion Picture Association of America” (MPAA), se transformaron en enemigos jurados de este tipo de proyectos que buscaban y aun buscan mantener a la red de redes libre de los dinosaurios de la industria del copyright.

Lamentablemente, el 11 de enero de 2013, Swartz, de 26 años, fue encontrado muerto en Nueva York. La causa de su muerte fue caratulada de suicidio por ahorcamiento… 
 
Ninguna nota suicida fue dejada por el ciberactivista, y muchos sospechan que fue asesinado.

Entre sus críticas, el activista también se opuso a lo que se conoce como “Red List” o “Kill List”, una lista hecha desde los centros de inteligencia norteamericanos en donde, en la batalla contra el terrorismo y amenazas nacionales, nombres de gente peligrosa son puestos en una lista para que luego el Presidente apruebe objetivos a eliminar por el bien de Estados Unidos y sus aliados. 
 
De hecho, el propio Obama ha firmado la ley de la NDAA que autoriza asesinatos secretos de ciudadanos estadounidenses en suelo estadounidense. 
 
Por lo que surge una pregunta inevitable, ¿pudo ser Aaron Swartz considerado una persona peligrosa?

Antes de que lo “suiciden”, Swartz fue perseguido durante el último año y medio por la Fiscalía y el FBI. Primero fue investigado por publicar millones de documentos de la Corte Federal de Estados Unidos. 
 
Luego le acusaron de fraude informático y obtención ilegal de documentos del Instituto Tecnológico de Massachusetts e incluso le arrestaron. 
 
Post mortem, el tribunal desestimó las acusaciones de los ataques cibernéticos…

Sea que los servicios de inteligencia lo hayan asesinado o la exagerada persecución a la que fue sometido Swartz lo haya llevado a matarse, lo cierto es que el Sistema ha suprimido exitosamente una anomalía peligrosa para sus intereses.

Hackers del grupo Anonymous, ante este nefasto acontecimiento, declararon que “fiscales de mano dura violaron la mente de Aaron Swartz, para luego llevarlo al ‘suicidio’. 
 
¿Son las draconianas leyes del copyright aplicadas selectivamente a aquellos que amenazan la inercia del poder establecido? Ciertamente. 
 
¿Son capaces de utilizar a sus marionetas del sistema judicial de tortura para hacer que te mates? Por supuesto.
 
 ¿Te asesinarán si te atreves a ir más allá?”

Asimismo, Kim “Dotcom”, fundador de MegaUpload, declaró sobre el asunto: “Él la detuvo (a la SOPA) y se hizo un blanco político: por eso le pasaban todas esas cosas. 
 
No hay ninguna causa razonable para perseguir a un joven ingenioso como él, de la manera cómo ellos actuaban. Fue una persecución política”.
 
 El cierre injustificado de MegaUpload por parte del FBI fue el desencadenador de una paranoia en los sitios para compartir archivos. Recientemente Kim “Dotcom” lo relanzó bajo el nombre de MEGA, y busca desafiar a los censuradores y sicarios de las libertades en Internet con nuevas herramientas que asegurarán a los usuarios privacidad, libertad y seguridad a la hora de compartir archivos en la red.

Reporteros también buscaron la opinión de Julian Assange, quien por meses se ha exiliado en la embajada de Ecuador en el Reino Unido. Assange dijo: “no estoy seguro que Aaron Swartz fuera tan cobarde como para suicidarse por miedo a ir a prisión. 
 
Lean sus palabras y decidan por Uds. mismos, yo estoy convencido que Swartz fue asesinado por los sicarios del copyright que hicieron ver todo como un simple suicidio. 
 
‘Ten cuidado con lo que dices, o podrías terminar como Aaron Swartz’, ese es el mensaje que quieren dar”.

Swartz dio una charla en 2008, mencionando su intención de “descargar informes científicos y subirlos a las redes para compartir archivos”:

“La información es poder. Pero como todo poder, hay aquellos que quieren quedarse con él. 
 
Todo el legado cultural y científico del mundo, publicado por siglos en diarios y libros, está siendo digitalizado y almacenado por un puño de corporaciones.
 
 ¿Quieres leer los trabajos con los resultados más importantes de la ciencia? Tendrás que enviar grandes cantidades a editoriales como Reed Elsevier.

“Existen personas luchando para cambiar esto. 
 
El Open Access Movement ha luchado valientemente para asegurar que los científicos no firmen derechos de autor y en cambio se aseguren que su trabajo sea publicado en Internet, bajo términos que permitan a cualquiera tener acceso a él.
 
 Pero incluso en los mejores escenarios, esto sólo aplicará para publicaciones futuras. 
 
Todo lo que no ha sido publicado bajo este esquema se ha perdido.

“Es un precio demasiado alto para pagar. ¿Forzar a académicos a pagar dinero para leer el trabajo de sus colegas?
 
 ¿Escanear bibliotecas enteras pero sólo permitir que la gente de Google los puedan leer? 
 
¿Proveer artículos científicos a una élite de universidades del primer mundo, pero no a los niños del sur del mundo? Esto es indignante e inaceptable.

“Estoy de acuerdo”, muchos dicen, “¿pero qué puedo hacer? 
 
Las compañías detentan los derechos de autor, generan enormes cantidades de dinero cobrando accesos, y es perfectamente legal –no hay nada que podamos hacer para detenerlas”. 
 
Pero sí hay algo que podemos hacer, algo que ya estamos haciendo: oponernos a ellos.

“Aquellos con acceso a los recursos –estudiantes, bibliotecarios y científicos– han recibido un privilegio. Pueden alimentarse de este banquete de conocimiento que el resto del mundo tiene vedado. Pero no deben –moralmente no pueden– mantener este privilegio para sí mismo.
 
 Tienen un deber de compartirlo con el mundo. Y tienen una forma: compartir contraseñas con colegas, llenar peticiones de descargas para amigos

“[...] Pero toda esta acción ocurre en la oscuridad, oculta en lo subterráneo. Es llamada robo o piratería, como si compartir una riqueza de conocimiento fuera el equivalente a saquear una nave y asesinar a su tripulación. 
 
Pero compartir no es inmoral –es un imperativo moral. Sólo aquellos cegados por la ambición impedirían que un amigo hiciera una copia.

Las grandes corporaciones, desde luego, están cegadas por la ambición.
 
 Las leyes con las que operan lo requieren –sus accionistas se amotinarían si fuera de otra forma. 
 
Y los políticos que han comprado los apoyan, pasando leyes que las dan poder exclusivo sobre quién puede hacer copias.

“No hay justicia en seguir leyes injustas. Es tiempo de aclarar las cosas, en la gran tradición de la desobediencia civil, y declarar nuestra oposición a este robo privado de la cultura pública.

“Debemos tomar la información, donde sea que esté almacenada, hacer copias y distribuirlas por el mundo. Debemos de tomar el material que ya no tiene copyright y añadirlo al archivo.
 
 Debemos comprar bases de datos secretas y subirlas a la red. Debemos de descargar publicaciones científicas y subirlas a la redes para compartir archivos. 
 
Debemos de luchar por el Guerrilla Open Access.

“Con suficientes de nosotros, en todo el mundo, no sólo enviaremos un mensaje fuerte en contra de la privatización del conocimiento –haremos que sea una cosa del pasado. ¿Te unirás a nosotros?”

Aaron Swartz. Julio 2008, Eremo, Italia

El último post de John Noveske

John Noveske fue uno de los fabricantes de rifles de asalto en Estados Unidos. Sus rifles, son ampliamente conocidos como una de las piezas de armamento más finas hechas en América. 
 
Y hablamos en pasado, porque John Noveske falleció en un misterioso accidente de coche hace solo unas semanas, el 4 de enero de 2013. 
 
De acuerdo a los reportes, su coche “viajaba en dirección contraria por la banquina de una carretera hasta que chocó con un par de rocas que se encontraban al costado del camino. 
 
El vehículo volcó y el Sr. Noveske fue expulsado”. Hasta acá todo parece un simple y desafortunado accidente…

Ahora, pongamos todo en contexto. Noveske era un gran opositor al control de armas, cuyo debate se ha instalado en la sociedad estadounidense recientemente gracias al asesinato masivo ocurrido en la escuela primaria de Sandy Hook, en el pueblo de Newtown, Connecticut; perpetrado por Adam Lanza, de 20 años (el 14 de diciembre de 2012). 
 
El pistolero solitario -quien antes había matado a su propia madre- asesinó a veinte niños e hirió a seis adultos dentro de las instalaciones de la escuela, valiéndose de varias armas de fuego. Esta masacre pasaría a ser la segunda más sangrienta en la historia moderna de Estados Unidos, luego de Virgina Tech en 2007.

Solo una semana antes del accidente de coche que le costaría la vida, John Noveske había publicado un extenso y detallado post en Facebook, en donde nombraba todas las matanzas en escuelas relacionadas con el consumo de psicofármacos. Al final del post se preguntaba, “¿Qué drogas estaría tomando Adam Peter Lanza?”

Este sería el último post que publicaría en su vida… (texto completo más abajo).

Pero el prominente fabricante de rifles no fue el único defensor de la Segunda Enmienda que ha muerto en los últimos días. Keith Ratliff, el creador de un canal de YouTube bastante popular dedicado a mostrar armas exóticas, también fue hallado muerto. 
 
El periódico Daily Mail, informó que el cuerpo de Ratliff “fue descubierto en una carretera rural de Carnesville, Georgia. 
 
El cadáver tenía una sola herida de disparo en la cabeza y la policía está viendo el caso como un homicidio”. En otra palabras, alguien mató a Ratliff, y tuvo que ser alguien con la habilidad suficiente para acercársele sigilosamente.

Matanzas y psicofármacos

Este es el último post en la página de Facebook antes del incidente, que pone de manifiesto la relación entre jóvenes autores de masacres en EE.UU. y el consumo de psicofármacos:

No estoy seguro de todos los hechos, pero me lo paso un amigo. —-John.

Eric Harris, 17 años (primero Zoloft y después Luvox) y Dylan Klebold, de 18 (masacre de Columbine, en Littleton, Colorado), en conjunto asesinaron a 12 estudiantes y 1 profesor e hirieron a otras 23 personas antes de suicidarse. Los registros médicos de Klebold jamás fueron hechos públicos.

Jeff Weise, 16 años, tenía prescrito 60 mg al día de Prozac (¡tres veces la dosis promedio para adultos!) cuando le disparó a su abuelo y su pareja, y a muchos compañeros de su escuela en Red Lake, Minnesota. Luego se suicidó. 10 muertos, 12 heridos en total.

Cory Baadsgaard, 16 años, Colegio de Wahluke (Estado de Washington), consumía Paxil (lo que le causaba alucinaciones) cuando llevó un rifle a clase y tomó de rehenes a 23 compañeros. Cory no tiene memoria del evento.

Chris Fetters, 13 años, tomaba Prozac y mató a su tía favorita.

Christopher Pittman, 12 años, consumía Zoloft cuando asesinó a sus abuelos.

Mathew Miller, 13 años, se colgó a sí mismo en su habitación luego de 6 días de tratamiento con Zoloft.

Kip Kinkel, 15 años, (en Prozac y Ritalin) le disparó a sus padres mientras dormían, después fue a su escuela y abrió fuego matando a dos compañeros e hiriendo a otros veintidós.

Luke Woodham, 16 años, (Prozac) mató a su madre, a dos compañeros de su escuela e hirió a otros seis.

En 1998, un niño en Pocatello bajo los efectos del Zoloft y armado, toma una escuela.

Michael Carneal (Ritalin), 14 años, abrió fuego sobre estudiantes de una escuela secundaria durante una reunión en West Pacuah, Kentucky. Tres adolescentes fueron asesinados y otros cinco heridos.

Un jovencito en Huntsville, Alabama, (Ritalin) tuvo un ataque psicótico que lo llevó a atacar a sus padres con una hacha y matar a uno de sus hermanos.

Andrew Golder, de 11 años, (Ritalin) y Mitchell Johnson, 12 años, (Ritalin) le dispararon a 15 personas, matando a estudiantes y un profesor.

TJ Solomon, 15 años (Ritalin) abrió fuego contra sus compañeros en una escuela de Conyers, Georgia. Hirió a seis estudiantes.

Rod Mathews, 14 años, (Ritalin) asesinó a uno de sus compañeros de escuela golpeándolo con un bate hasta la muerte.

James Wilson, 19 años, (varias drogas y psicofármacos) de Breenwood, Carolina del Sur, llevó un revolver a su escuela primaria y mató a dos jovencitas, hirió a otros compañeros y a dos maestras.

Elizabeth Bush, 13 años, (Paxil) fue responsable por una masacre en una escuela de Pennsylvania.

Jason Hoffman (Effexor and Celexa), masacre de El Cajón, California.

Jarred Viktor, 15, años, (Paxil) luego de consumir Paxil por 5 días, acuchilló a su abuela 61 veces.

Chris Shanahan, 15 años (Paxil) en Rigby, inesperadamente mató a una mujer.

Jeff Franklin (Prozac y Ritalin), Huntsville, AL, mató a sus padres cuando llegaban del trabajo utilizando una maza y un cuchillo. Acto seguido atacó a sus hermanos menores.

Neal Furrow, autor de una balacera en escuela judía de Los Ángeles. Había sido medicado con Prozac entre otras drogas.

Kevin Rider, 14 años, estaba dejando el Prozac cuando murió de un tiro en la cabeza. Al principio se caratuló como suicidio, pero dos años después se reabrió la investigación de su muerte como posible homicidio. El sospechoso principal, de la misma edad, había estado tomando Zoloft y otros antidepresivos.

Alex Kim, 13 años, se colgó poco después que su prescripción de Lezapro fue doblada.

Diane Routhier fue prescrita con Welbutrin debido a un cálculo biliar. Seis días después, luego de sufrir muchos efectos adversos, se disparó.

Billy Willkomm, un campeón de lucha y estudiante de la Universidad de Florida, fue prescrito con Prozac a los 17 años. Fue encontrado colgado de una gran escalera en la casa familiar de Gulf Shore Boulevard, en julio de 2002.

Kara Jaye Anne Fuller-Otter, 12 años, consumía Paxil cuando se colgó de un gancho en su closet. Los padres de Kara declararon: “el maldito doctor no le hubiera sacado los medicamentos, incluso cuando nosotros mismos le advertimos que ella estaba teniendo reacciones adversas al Paxil…”

Gareth Christian, Vancouver, 18 años, consumía Paxil cuando se suicidó en 2002. Su padre no pudo resistir la pérdida y también decidió terminar con su vida.

Julie Woodward, 17 años, estaba con Zoloft cuando decidió colgarse en el garaje de su casa.

Matthew Miller, tenía 13 años cuando fue llevado al psiquiatra al tener dificultades en la escuela. El doctor le dio muestras de Zoloft. Siete días después su madre lo halló muerto, colgado con un cinturón en un gancho del lavadero.

Kurt Danysh 18 años, Prozac. Mató a su padre con una escopeta. Ahora se encuentra en prisión, y escribe cartas tratando de advertir sobre el uso de drogas antidepresivas SSRI.

Woody ____, 37 años, se suicidó pasada la 5ta semana de tomar Zoloft. Antes de su muerte, el psiquiatra sugirió doblar la dosis de la droga. El sujeto había consultado al psiquiatra solo por problemas de insomnio, no tenía problemas de depresión o síntomas de problemas mentales.

Hammad Memon, 15 años, disparó y mató a su compañero de escuela. Había sido diagnosticado con ADHD y depresión, tomaba Zoloft y otras “drogas para su condición”.

Matti Saari, 22 años, estudiante culinaria, disparó y mató a 9 estudiantes y una maestra, antes de matarse. Saari estaba tomando SSRI y benzodiazapine.

Steven Kazmierczak, 27 años, disparó y mató a cinco personas, hiriendo a otras 21 antes de matarse en el auditorium de la Northern Illinois University. De acuerdo a su novia, recientemente había consumido Prozac, Xanax y Ambien. Los resultados toxicológicos demostraron que Steven aún tenía rastros de Xanax en su sistema.

El pistolero finlandés Pekka-Eric Auvinen, 18 años, tomaba antidepresivos antes de matar a ocho personas y herir a otra docena en el Colegio de Jokela. Acto seguido se suicidó.

Asa Coon de Cleveland, 14 años, disparó y mató a cuatro antes de quitarse la vida. Los registros de la corte muestran que Coon tomaba Trazodone.

Jon Romano, 16 años, medicado por depresión, disparó con una escopeta a su maestra en un colegio de New York.

Teniendo estos antecedentes en cuenta, ¿qué drogas estaría tomando Adam Peter Lanza, cuando mató a 26 personas en el reciente caso en New Town Ct.?

Esta misma semana -martes 22 de enero de 2013- en un colegio del Estado de Texas, Carlton Berry, de 22 años, le disparó a un sujeto durante una discusión y luego hirió a otras tres personas, posteriormente se disparó a sí mismo …

¿Por qué entonces se establece un control sobre las armas de los ciudadanos estadounidenses, en vez de establecer un control sobre las drogas causantes de apretar los gatillos?
 
 ¿Qué relación se puede establecer entre la prescripción de drogas que transforman personas deprimidas en asesinos, y el control de armas?
 
 ¿Se permitió esta proliferación de drogas antidepresivas y tratamientos con ellas, solo para provocar una situación que permitiera al gobierno estadounidense derribar las garantías que proporciona la Segunda Enmienda y el derecho a tener armas para defensa propia ante un gobierno tiránico?

Fuente: Mystery Planet.

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