PL – Pese a la posición oficial uruguaya de solidaridad con la soberanía argentina en las Islas Malvinas, parlamentarios de oposición de este país asistirán, invitados por el gobierno británico, al cuestionado referéndum que se efectuará en ese territorio en marzo.
Encabezados por el diputado del opositor Partido Nacional, Jaime Trobo, los legisladores uruguayos alegaron que viajarán como observadores para ver el proceso en que se preguntará:
“¿Desea que Islas Falkland conserven su condición política actual como Territorio de Ultramar del Reino Unido?”.
No obstante, el Foro Malvinas en Uruguay, que acaba de cumplir su primer aniversario en defensa de la soberanía argentina, criticó a los parlamentarios y dijo que “las autoridades británicas solo buscan legitimar el último de sus avasallamientos colonialistas en nuestro territorio sudamericano”.
El Foro consideró la invitación “provocativa y agraviante” por cuanto, con ello, se pasa por alto “lo que constituye una firme posición regional con respecto a la cuestión de las Malvinas, se ignora la tradicional posición histórica del Uruguay en la materia y se pasa por alto la misma esencia del pueblo uruguayo”.
Por su parte, el exministro de Defensa y senador por el gobernante Frente Amplio, Luis Rosadilla, quien integra el Foro, calificó de “fantochada” el anunciado plebiscito, que “no es válido porque se trata de un referéndum impuesto desde la colonización”.
El embajador argentino en Uruguay, Dante Dovena, calificó el sufragio como una “teatralización” que Londres proyecta realizar.
Por su parte, el diario El País publicó hoy declaraciones del embajador británico en Uruguay, Ben Lyster-Binns, insistiendo en que el referéndum “es un asunto que involucra a tres partes: al gobierno británico, a los habitantes de las Islas Falkland y al gobierno argentino”.
No obstante, el Foro Malvinas en Uruguay, que acaba de cumplir su primer aniversario en defensa de la soberanía argentina, criticó a los parlamentarios y dijo que “las autoridades británicas solo buscan legitimar el último de sus avasallamientos colonialistas en nuestro territorio sudamericano”.
El Foro consideró la invitación “provocativa y agraviante” por cuanto, con ello, se pasa por alto “lo que constituye una firme posición regional con respecto a la cuestión de las Malvinas, se ignora la tradicional posición histórica del Uruguay en la materia y se pasa por alto la misma esencia del pueblo uruguayo”.
Por su parte, el exministro de Defensa y senador por el gobernante Frente Amplio, Luis Rosadilla, quien integra el Foro, calificó de “fantochada” el anunciado plebiscito, que “no es válido porque se trata de un referéndum impuesto desde la colonización”.
El embajador argentino en Uruguay, Dante Dovena, calificó el sufragio como una “teatralización” que Londres proyecta realizar.
Por su parte, el diario El País publicó hoy declaraciones del embajador británico en Uruguay, Ben Lyster-Binns, insistiendo en que el referéndum “es un asunto que involucra a tres partes: al gobierno británico, a los habitantes de las Islas Falkland y al gobierno argentino”.